EL-SUR

Jueves 17 de Octubre de 2024

Guerrero, México

Opinión

Cambios en el sector cultural

Humberto Musacchio

Noviembre 07, 2022

Cambios en el sector cultural

La joven y muy talentosa Valeria Macías fue nombrada directora del Ex Teresa Arte Actual. Macías se desempeñaba desde hace cinco años como subdirectora del mismo espacio. Entra a ocupar el lugar que deja Francisco Javier Rivas Mesa (Tito Rivas), quien pasa a la Fonoteca Nacional y es presentado como “artista sonoro, músico, gestor cultural e investigador”, con varios títulos académicos que esperamos le permitan una buena gestión en momentos críticos para la cultura, que vive o más bien sobrevive entre penurias sin cuento. A la dirección del Canal 22 llega el siempre creativo Pável Granados en sustitución de Armando Casas, de quien el boletín de la Secult dice que “robusteció la programación con nuevas producciones e incluyó renovadas temporadas de programas legendarios como La dichosa palabra, La oveja eléctrica, o El Chamuco TV, y La raíz doble, por mencionar algunos”, logros que hacen incomprensible su salida. Asume la dirección del Museo del Palacio de Bellas Artes Alejandra de la Paz, quien se ha desempeñado en cargos de política cultural. El muy brillante Miguel Fernández Félix deja ese puesto y trabajará para una institución privada donde no padecerá las miserias presupuestales a que están sometidas las instituciones públicas de cultura.

Vandalismo contra el arte

Continúa incontenible el vandalismo con aerosoles contra las obras de arte. Hace unos días, un mitin estudiantil al pie de la Torre de Rectoría, en la Ciudad Universitaria, terminó con unos enmascarados pintarrajeando los murales de Siqueiros. Luego, la canalla anticultural causó graves daños al mural Sol de fuego, de Jorge Best, obra que está en la antigua SCOP, a lo que siguió la afectación de cinco murales de Ariosto Otero localizados en la alcaldía de Magdalena Contreras. Esos ataques al patrimonio nacional ocurren generalmente –aunque no siempre—durante la noche, cuando los policías que deberían vigilar se dedican a ingerir bebidas espiritosas o se entregan a un agradable y reparador sueño mientras los grafiteros hacen de las suyas. Se suponía que después del robo de esculturas en Paseo de la Reforma o en las colonias Roma y Condesa, ahora sí se desplearía una vigilancia efectiva para evitar el vandalismo. El señor García Harfuch tiene la palabra.

De nacimientos y laicismo

Se espera que esta semana, el ministro Juan Luis González Alcántara presente al pleno de la Suprema Corte un proyecto de sentencia sobre nacimientos y otros adornos de carácter religioso. La propuesta es que no se instalen en lugares públicos ni sean pagados por el erario, pues abundan las autoridades que gustan de montar nacimientos o colgar figuras de santos, niños dios y otros emblemas relacionados con asuntos de culto. El proyecto de González Alcántara tiene como fin que la Corte defina si tales elementos violan los principios constitucionales del Estado laico y la igualdad ante la ley de todos los credos, lo que llevará a determinar si las instalaciones referidas y su financiamiento con recursos públicos privilegian, imponen o consideran superior la religión cristiana, especialmente la católica, sobre otras creencias o incluso sobre la ausencia de cualquiera de ellas, de acuerdo con el concepto de neutralidad religiosa que han de observar los órganos del Estado.

Contra la hipocresía racista

El actor Tenoch Huerta ha publicado un libro, Orgullo prieto, que causará inquietud en las buenas conciencias. Se refiere al racismo mexicano, un racismo que no se atreve a decir su nombre, pero que ahí está. Somos una mezcla de indios, europeos y africanos, con no pocas contribuciones asiáticas, pero lo cierto es que conforme vemos hacia arriba, en los estratos sociales más altos la población se va blanqueando y el racismo se manifiesta con toda su brutalidad. Hace pocas semanas se denunció que en un restaurante nada barato, muy frecuentado por políticos panistas, a la clientela morena la mandaban al rincón, donde no fuera muy visible. Igualmente, todos hemos escuchado estupideces como esa que define a un bebé en forma supuestamente benévola: “es morenito pero no está feo”. En las discotecas pasan primero los de piel más clara, en los mejores empleos se prefiere a los más blancos e incluso en la familia suele mostrarse preferencia por los integrantes con menos pigmentación. Pues sí, vivimos en un ambiente racista que no se atreve a decir su nombre.

Breviario…

Hace poco más de seis años que murió el escritor Ignacio Padilla, integrante de la llamada Generación del Crack, quien por más de dos décadas trabajó en una novela que aparece publica hasta ahora: Lo que no sabe Medea. La tardía publicación seguramente se debió a que era una obra inconclusa, pero Alfaguara, el sello editor, no informa sobre “lo que no sabe el lector”, que es quién fue el ghostwriter que la terminó. @@@ La escritora capitalina Daniela Tarazona obtuvo el Premio de Literatura Sor Juana Inés de la Cruz, presea que otorga la Feria internacional del Libro de Guadalajara, por su novela Isla partida. Fueron jurados nuestra paisana Sara Poot Herrera, la chilena Andrea Jeftanovic y el venezola Daniel Centeno Maldonado.