EL-SUR

Jueves 19 de Septiembre de 2024

Guerrero, México

Opinión

Guerrero sólo será mejor con una nueva sociedad rural

Arturo Martinez Nateras

Julio 28, 2005

(Tercera parte)

 

4) Discutamos sin temores ni prejuicios, con absoluta claridad el tema de las contribuciones solidarias al desarrollo por parte de los ciudadanos. No hay impuesto más cabrón que la pobreza. Un gobierno con ingresos suficientes es un gobierno de izquierdas y para ello debe ser transparente, religiosamente eficiente y honesto. No veo en ninguna de las mesas ni en ninguna de las áreas del método propuesto para formular el Plan el tema de los recursos para el desarrollo. Los ciudadanos no quieren pagar impuestos por la corrupción y la desconfíanza pero si nos convocan con destino definido de los recursos sabremos responder. Presupuestar no es una cuestión técnica: es la más política de las políticas públicas. El que paga manda.

Es urgente de toda necesidad constituir un fondo para el desarrollo rural, destinar 200 millones para que el gobierno federal aporte 2 mil y disponga el estado de recursos para capital de riesgo y garantías líquidas; que los productores aportemos entre todos por lo menos 20 millones.

Propongo rescatar a las organizaciones y a los productores del Buró de Crédito y pactar un programa de liquidación de la cartera vencida para recupera la condición rural de sujetos de crédito, que Z negocie con los bancos su participación en el campo. Que busque a las agencias internacionales.

Propongo idear un esquema de crédito y de inversión adecuado a la propiedad social predominante. El Procede no ha procedido y por ejemplo en nuestro caso específico de La Pintada tenemos un patrimonio social cercano a los 300 millones de pesos, pero no podemos con ello garantizar los 30 que necesitamos para financiar nuestra revolución productiva. Tenemos facturas por casi 40 millones, 2 mil 500 metros cuadrados del Complejo Agroindustrail Cafetero, 150 viviendas, mil 200 hectáreas, 1.5 millones de cafetos, 500 mil árboles de nuestra flora preciosa y monumental, y millones de variedades endémicas que no sirven para nada ante la Financiera Rural, la banca comercial y etcéteras.

5) La sociedad rural no se puede seguir gobernando como hasta ahora. Dentro de los cambios se debe modificar la administración y las dependencias. El gobernador debe reclamar la desaparición de las delegaciones federales –de todas– y la transferencia de sus recursos y funciones. Ya se ensaya algo similar en Michoacán, Jalisco y Coahuila mediante convenios signados. Para nosotros, podemos convenir un trato diferenciado a partir de que el gobierno no tiene ni para caerse muerto. Haganlo ahora antes de que se pase definitivamente el factor de la novedad, no envejezcan antes de tiempo. Guerrero fue precursor de una tesis y una práctica que se quedó en la encarnación en una persona de delegado y secretario. Sobran entidades y faltan programas sustantivos. ¿Para qué carajos queremos sendas secretarías de desarrollo rural, medio ambiente, subses de asuntos agrarios, reforma agraria, procuradurías de la lluvia ácida, y mil etcéteras. Bastaría con una sola con recursos y programas suficientes y bien orientados.

6) La elaboración del PED, su aplicación y puesta en ejecución coincide con el debate nacional sobre el proyecto de nación que viviremos durante los próximos meses de cara al 2006. Esta coyuntura la debemos aprovechar para que los aspirantes se comprometan con un capítulo especial para el desarrollo del sur de México. La misma circunstancia de las próximas elecciones locales debe servir de marco para propiciar la formulación de los planes municipales, regionales y locales de desarrollo. Sin un adecuado concepto de la localidad como célula de la vida económica, sin una red de empresas familiares y sociales; sin un liderazgo productivo con el gobernador a la cabeza nada cambiará.

7) Propongo la realización de congresos por producto estratégico anuales, como órgano de gobierno supremo, la reforma de los consejos ya existentes los cuales hoy son pequeñas dependencias menospreciadas y verticales del gobierno del estado, pudiendo ser motores, rectores e interlocutores profesionales al servicio de los productores y bajo su mando directo.

Nosotros disponemos de un Plan Estatal de Desarrollo del café de Guerrero, sabemos qué hacer para salir de la crisis y cuanto es necesario invertir en seis años, para pasar de los 50 mil quintales que recolectamos en cerca de cincuenta mil hectáreas, es decir uno por hectárea, para llegar a 15 bajo sombra, con calidad y contenido orgánico.

Todo es cuestión de dejar de tirar cerca de 5 millones de dólares anuales para nada; invirtiendo un poco más de 2 mil anuales por hectárea y un capital semilla para transformar y comercializar nuestro producto que es de la mejor calidad mundial. Y lo mismo podemos hacer con el coco (es una pinche vergüenza que en los destinos turísticos consuman helado de coco importado de las Islas Canarias, que nosotros no tengamos ninguna planta integral para producir hasta carbón activado…¿y el mango, y la jamaica, el tamarindo y el limón…?

Así no podemos ni debemos seguir; por eso postulamos la proclama a la revolución productiva

8) Insisto en el reclamo de una evaluación de fondo del programa fertilizante. La SDR no deja de ser la secretaría del subsidio a Rubén Figueroa, a sus empresas y de contaminación, de ensalitramiento del campo guerrerense y este año lo hicieron hasta sin licitación. Una compra de más de 200 millones asignada, y asignada a quien se la asignaron es inadmisible, no hay excusa que valga. Los resultados reales del Programa Fertilizante están a la vista. En diez años se ha multiplicado el gasto y la superficie, para no decir el desperdicio y la depredación en un 300 por ciento y la producción no sube ni un kilogramo. Nos mantenemos oscilando alrededor del millón de toneladas de producción de maíz. No existe rendimiento productivo y sí daño ambiental.

¿Se trata de un subsidio similar al Procampo? Pues transparéntenlo, mejor entreguénselo directamente a los campesinos mediante una tarjeta de débito. Separen la partidocracia de la producción. Todo mundo conoce los malos manejos, la corrupción, el tráfico con el fertilizante y ahora hasta los ediles se benefician con el 15 por ciento de comisiones. Todos le tienen miedo a la gente pero los campesinos sobre todas las cosas necesitan del insumo dinero para producir bien. En todo caso hagamos una evaluación y un diálogo sobre los recursos para el desarrollo del campo de cara a la sociedad. Es urgente una auditoría técnica, operativa y social, una evaluación por objetivos y sustantiva.