EL-SUR

Sábado 07 de Septiembre de 2024

Guerrero, México

Opinión

Pluralidad en México; la fortaleza de lo singula

Ana Cecilia Terrazas

Agosto 26, 2023

AMERIZAJE

Para Maricruz y todo el equipo que encabeza.

Una de las riquezas documentables del inmenso y muy querido México es su diversidad, multiplicidad y mestizajes. Cualquier historiadora o historiador profesional repara siempre en la alusión “a los muchos Méxicos” para no encuadernar en un solo texto al país, que no reconozca sus diferencias, sus distinciones y polivalencias.
De hecho, buscar que sea homogénea una nación o un pueblo no solamente es imposible, sino que va contra de la singularidad del ser humano que vive en sociedad. El término o concepto que mejor queda a lo que aquí se valora es pluralidad. Este Amerizaje recuperó las voces de un equipo humano diverso reunido en torno de un proyecto audiovisual dedicado a la palabra, las distintas acepciones, sentidos y aproximaciones a la palabra y al concepto de pluralidad. Se aquilata cada decir y se agradece especialmente la generosidad para participar en función de un proyecto a su vez tan plural como lo es la voz misma de cada persona, como es el habla, el lenguaje y la palabra.
Primero que nada, para tomar el concepto en sustantivo, la Real Academia Española define así lo plural que viene del latín: adjetivo que significa “múltiple, que se presenta en más de un aspecto. ‘Alardeaba de su plural conocimiento en el campo de las ciencias’”; también acude al plural de número, “sintagma nominal plural”; “forma gramatical”; “plural de modestia”; “plural empleado en lugar del singular por si este último pudiera indicar presunción, como cuando un autor se refiere a su propia obra, por ejemplo, en este trabajo sostenemos que´”; “plural mayestático”, que en inglés es el llamado “Royal We” y que es por demás sangrón, arcaizante y está o debiera estar en desuso; “plural sociativo” que se refiere al otro, pero que incluye a uno, como por ejemplo: ¿qué tal estamos? (y que siempre acaba siendo aspiracional porque la otra persona sabe que no se está hablando de ambos, aunque pueda agradecer el gesto). Una definición más, que no está en el diccionario pero que se estila con frecuencia, la llamaría el plural no vinculante, quien no quiere hacerse cargo o responsable de cualquier decisión, y se escucha en quien suele decir “tuvimos que”, “decidieron aquello”.
En política, otra definición sí estudiada por lingüistas y semiólogos es el plural referido al voto. Este último, que acaba relacionándose con las primeras líneas de esta columna, se vincula a lo que se considera enriquecido por ser múltiple, más y mucho; ese el concepto de pluralidad del que se continuará hablando.
Para el filólogo y poeta Ignacio Martín, gran amigo del gremio filológico nacional legado por Antonio Alatorre, el concepto pluralidad está asociado a lo opuesto de lo singular, “significado que aún no ha perdido”. Recalca que, en política, la pluralidad viene desde la filosofía “monismo, dualismo, pluralismo (doctrina que, en oposición al monismo o al dualismo, afirma que hay múltiples, tal vez infinitos, tipos de realidad)” y asegura que “también en política, así como en sociología, el pluralismo, la pluralidad, alude a grupos de interés que a su vez pueden consolidarse como factores dentro de un sistema político e influir en las decisiones”.
Lo maravilloso de la indagación filológica de Martín, que pudiera parecer obvio pero que no lo es, es que, insiste, “el plural parte del singular, sólo hay pluralidad si se aceptan las singularidades”. En el ámbito de la filología, sigue, “el pluralismo nos lleva de la mano a otros prefijos como multi (multilateralismo, multiculturalismo)”.
Doctora en derecho, Laura Ruiz García también compartió con esta columna la siguiente convicción: “la pluralidad es un regalo de la democracia, es lo que permite la coexistencia de la diversidad. En México, la pluralidad son los diversos tonos y voces de los distintos puntos geográficos, voces políticas y distintas condiciones; es la armonía de las mayorías y las minorías, todas haciendo gobierno”.
La pluralidad se debe respetar y dejar ser ahora que hay tantas personas políticas, candidatas, en precampañas y campañas. La pluralidad es fortaleza y no amenaza porque implica ese respeto a la singularidad, incluso a la singularidad que opina que quien piensa distinto a mí me hace peligrar.