EL-SUR

Sábado 07 de Septiembre de 2024

Guerrero, México

Opinión

Valentina Winocur y las perlas de Latinoamérica

Adán Ramírez Serret

Diciembre 15, 2023

 

 

 

Para Jimena Serret Iriarte.

La historia de Latinoamérica se caracteriza por turbulenta. Sus aguas siempre están revueltas y sus habitantes son revolcados por la idiosincrasia y complejidad de su condición. Desde el inicio del concepto Latinoamérica con las guerras de independencia que libró cada país, hasta la consolidación que se dio en el siglo XX con las revoluciones y concreción de los estados nación, la historia de los países que conforman esta región ha sido violenta, confusa; similar en su esencia en muchos sentidos. Lo propio de Latinoamérica es ser Latinoamérica. Esto se ve mucho en lo poemas de Pablo Neruda o en las novelas de Gabriel García Márquez.
Para Octavio Paz Latinoamérica es un todo que las guerras de Independencia dividieron y que el papel de la poesía es unir a estos países que la geografía política ha dividido. Y quizá tenga razón en muchos sentidos, sobre todo en el que la lengua une un enorme continente y se genera una tradición en la que hay un diálogo que trasciende fronteras. ¿Acaso Pizarnik sólo pertenece a Argentina, Garro a México o Peri Rossi a Uruguay? Lo cierto es que ninguna de estas autoras sería posible sin el grueso de la tradición de un continente hispano parlante. Pues, más allá de lo cosmopolita de estas autoras, representan a literaturas que encarnan una poética que se entiende como latinoamericana, antes que nada. La historia de esta región está muy ligada a la ficción que se hace desde estos lares, escribe Valentina Winocur (argentina / mexicana, 1990), “no quiero mezclar la historia familiar con la Historia pero a veces no se pueden explicar las cosas si no”. Así, las historias de dictaduras, partidos hegemónicos y guerrillas son parte de las historias de vida que pasan a la ficción de la literatura latinoamericana.
Es el caso de la primera novela Perlas de araña de Valentina Winocur. La historia de una niña que viene a vivir a México sola, con su abuela, luego de que sus padres han desparecido y lo mejor para salvar la vida era huir del país.
Así se encuentra una niña huérfana de padres y de país en un primer día de escuela bastante complicado, pues no sólo debe luchar por ser nueva, sino también por ser extranjera. Lo cual es conflictivo, pues por un lado es problemático estar sólo con mexicanos; y por el otro estar con puros hijos de extranjeros que la lleva a una escuela cara y conservadora. Así que con el paso del tiempo se adapta a una de mexicanos más liberales.
Perlas de araña es una novela muy inteligente, porque a pesar de estar narrada en primera persona no es una literatura selfie sino una exploración hacia el mundo y, sobre todo, en un principio observa a su abuela quien es la persona que funge como su padre, madre y familia completa. Un personaje que la educa a cada segundo. Es maestra en una universidad y se inclina por el humanismo, así que, cuando le quitan a su nieta un libro sobre sexualidad se escandaliza del moralismo de la escuela.
El encuentro entre la nieta y la abuela es divertido y profundo. La abuela es la generación que no ve mal dar un buen pellizco a un niño latoso; y la niña la observa desde la ingenuidad y con la distancia de la edad que las separa. Entre las dos son una familia completa que se las arregla bien para que no les falte nada, y la familia ausente es sustituida por la historia de un continente contenida en los relatos de la abuela.
El mundo de la niña se va entretejiendo entre su propia experiencia, es la niña extranjera que es cada vez más mexicana y cuando viaja a Argentina ya no pertenece tampoco del todo allá. Ahora es mexicana y argentina: latinoamericana. También conoce el mundo a partir de los ojos de la abuela quien le cuenta su propia juventud que parece de otro mundo, de tiempos remotos en donde las familias tenían muchos hijos; la historia de los padres desparecidos que se van entrelazando con la historia de un país, la dictadura, la politización de los jóvenes; el encuentro con otras culturas y, en fin, ese inmenso mare magnum que es Latinoamérica, con fronteras agresivas en la política, pero huidizas en lo cultural. Con habitantes que han tenido que huir y pertenecen a varios países, a una lengua, a una tradición híbrida.
Perlas de araña es una primera novela entrañable, tiene el compañerismo de las buenas novelas en donde los personajes se tienen un amor tal, una cercanía tan profunda, que se vuelven parte de la vida de quien lee la novela.
Valentina Winocur, Perlas de araña, Ciudad de México, Elefanta, 2023. 206 páginas.