Staff / Agencia Reforma

Ciudad de México

Durante el informe del presidente Andrés Manuel López Obrador, por el segundo aniversario de su triunfo electoral, la cultura apenas tuvo una mención por parte del mandatario, quien sólo se refirió al proyecto del Complejo Cultural Los Pinos.
En su discurso desde Palacio Nacional, López Obrador se refirió a la inversión de mil 600 millones de pesos tanto para el proyecto Chapultepec, liderado por el artista Gabriel Orozco, como para el parque ecológico del Lago de Texcoco.
“Se inició la creación del complejo artístico y cultural Los Pinos que incluye todo el Bosque de Chapultepec así como el parque ecológico del Lago de Texcoco con una inversión autorizada para ambas obras de mil 600 millones de pesos”, dijo en su mensaje.
Aunque López Obrador aseguró que está en marcha la transformación política, económica, social y cultural del país, no hizo ninguna otra referencia al sector cultura.

Penurias en sector cultural

El tránsito de la precarización a la pauperización entre los creadores tiene un efecto dominó para la cultura y los derechos de sus trabajadores, advirtió ayer la curadora Sol Henaro durante su participación en el foro El sector cultural tras la pandemia: reflexiones críticas de la Cátedra Internacional Inés Amor en Gestión Cultural de la UNAM.
“En el sistema artístico y cultural tenemos un lamentable entrenamiento de sobrevivencia. Estamos habituados históricamente a resolver con poco, a que sean el deseo y las ganas los que encauzan y los que permitan siempre saltar el obstáculo para trabajar y crear algún tipo de proyecto. Eso tiene que ver con la precarización sistematizada”, planteó.
Y es alarmante que esta precarización se convierta en pauperización, añadió la responsable del Centro de Documentación Arkheia del Museo Universitario de Artes Contemporáneo (MUAC).
“Es un efecto dominó. Todo esto está relacionado y vinculado con políticas del estado anteriores y actuales que afectan; mi sensación es que hay un proyecto de ahogo paulatino al sistema cultural, de ir sofocando los derechos y las condiciones para mantener un ecosistema cultural sano, vital”, consideró.
Henaro y el escritor Luigi Amara, junto con la directora ejecutiva del Festival Internacional de Cine de la UNAM (FICUNAM), Abril Alzaga, y el director del Teatro La Capilla, Boris Schoemann, propusieron unificar esfuerzos entre los sectores del campo cultural para revertir la pauperización.
“Nos ha debilitado que cada gremio trabajara por su lado. Es momento de articular algo más amplio”, instó Alzaga. Y esta batalla política debe trascender las cámaras legislativas y repercutir también a nivel social, “a nivel calle, a nivel comunidad”, añadió Amara.