Claudio Viveros Hernández / Redacción

Taxco

La secretaria de Cultura del estado, Aída Martínez Rebolledo, inauguró el festival teatral nacional Jornadas Alarconianas, que se instituyeron para homenajear al dramaturgo catalogado en el Siglo de Oro español, Juan Ruiz de Alarcón, escritor que apenas fue mencionado en el discurso de la funcionaria.
Entre críticas persistentes en cuanto a la organización, la programación, difusión y opacidad, se inauguró el festival cultural creado en 1987 en homenaje a Juan Ruiz de Alarcón y Mendoza, un destacado dramaturgo que está incluido en la época del Siglo de Oro, de España, porque en esos tiempos Taxco era parte del Virreinato de la Nueva España.
Desde la conferencia de prensa del pasado 12 de mayo hubo críticas y cuestionamientos, que han sido persistentes desde anteriores ediciones, en cuanto a la organización, programación, difusión, opacidad y falta de transparencia.
En el corazón de la ciudad, a un costado de la emblemática parroquia de Santa Prisca, Martínez Rebolledo, consideró que las Jornadas Alarconianas porque nos recuerdan qué son las Jornadas Alarconianas “porque nos recuerdan que también desde el teatro, desde que se instaura, es también el método y la técnica para la revolución de las conciencias, a través del cual se dice y también se critica y se autocritica nuestro propio hacer como seres humanos; por eso, que viva el teatro y que vivan nuestros ganadores”.
Afirmó que todo lo que se ha trabajado del festival es maratónico y que se une a la gente de la “sociedad civil”, en alusión al comité de selección de artistas que se presentarán.
En ese tenor, pidió ante alrededor de un millar de asistentes un aplauso para la gobernadora, Evelyn Salgado Pineda –quien no estuvo presente–, de quien afirmó que es “la mujer que nos respalda, que nos dice ‘vamos’ y no importa y se tiene que hacer y hacer muy bien (…) porque ha demostrado con hechos lo importante que es la cultura para su gobierno”.
En su discurso precisó que “sin cultura no hay desarrollo social, sin cultura no hay cohesión de emociones, sin cultura cada quien simple y sencillamente estaría en su casa, aislado, sin este pretexto de volvernos a encontrar, y dar gracias a Dios porque la pandemia, parece que sí, ya quedó atrás y nos volvimos a ver; tres años, fue difícil y yo creía imposible ver un público así concurrido y vernos cara a cara, sentir nuestras emociones”.
La secretaria volvió a externar que con las Jornadas Alarconianas, uno de los pocos festivales dedicados al quehacer teatral a nivel nacional, “Taxco se convierte en el epicentro de la cultura en el estado y por qué no decirlo, de la dramaturgia a nivel nacional”, con lo que declaró formalmente inaugurada la edición número 36 de este festival de artes escénicas.
En su momento, al dar la bienvenida a los invitados, el alcalde Mario Figueroa Mundo, señaló que gracias a estos eventos culturales “podemos seguir generando promoción, difusión y derrama económica para las familias taxqueñas (…) lo que nosotros los taxqueños tenemos es querer a los que nos visitan como quisiéramos ser tratados cuando visitamos”.

“Escribir es hablar
sobre lo que me indigna”

Emocionada y agradecida por recibir el Premio Nacional de Dra-maturgia, Juan Ruiz de Alarcón, la creadora Maribel Carrasco, manifestó que “escribir es un ejercicio y un privilegio de la memoria, escribir para mí es hablar sobre lo que me indigna y sobre lo que me avergüenza muchas veces acerca de lo que le sucede a los niños y a los jóvenes en todo el mundo”, lo que deslizó con maestría en clara referencia a una realidad de violencia, asesinatos, abuso infantil y otros hechos que continuamente se registran y este sector son las principales víctimas.
Contextualizó que el festival es un homenaje al destacado dramaturgo Juan Ruiz de Alarcón, y sostuvo que escribir le ha dado lo mejor que ha tenido en la vida, como el amor, la familia y el encuentro con grandes amigos, pero sobre todo la pasión más importante que justifica el hecho de estar viva.
“En este momento que estoy viviendo ahora lo agradezco a todas las personas que han hecho posible que esté yo aquí, que haya recibido este maravilloso y honorable premio, un premio que significa mucho y reivindica en muchísimo el tipo de teatro que estamos haciendo para niños y jóvenes en México”.
Lo calificó como un “teatro potente” que tiene una calidad reconocida no solamente a nivel nacional, sino internacional, por lo que dedicó su premio a todas las compañeras y compañeros que como ella hacen la fascinante labor de escribir y hacer teatro para los niños y jóvenes.
El premio, añadió, es el primero que da a alguien que se dedica a públicos y a jóvenes audiencias y eso lo reconoció con su agradecimiento al Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura y al gobierno de Guerrero, a las integrantes del jurado, a la compañía de Teatro Neurodrama y a su director, Enrique Olmos de Ita, quien la postuló al premio.