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Critica Pamela Anderson al movimiento #MeToo: “este feminismo puede ir demasiado lejos”, dice

La ola de denuncias de acoso y abuso sexual “paraliza a los hombres”, asegura la actriz de Guardianes de la bahía. En entrevista en el programa 60 Minutes, pide la repatriación de Julian Assange a Australia. Revela que conoció a Donald Trump cuando era modelo de Playboy y la contrataron para una fiesta de cumpleaños del ahora presidente de EU

Redacción

Noviembre 07, 2018

 

Aunque el movimiento #MeToo ha permitido que mujeres y hombres denuncien la práctica constante del acoso y abuso sexual en Hollywood y otros ámbitos, hay actrices que critican esta apertura, como Pamela Anderson, quien declaró en una entrevista en el programa de televisión australiano 60 Minutes que “este feminismo puede ir demasiado lejos”, y que es feminista, “pero creo que esta tercera ola de feminismo es aburrida. Creo que paraliza a los hombres”, añade.
El movimiento #MeToo, que tomó fuerza en octubre del año pasado a raíz de las denuncias de las actrices Rose McGowan y Asia Argento contra el otrora poderoso productor de cine Harvey Weinstein –actualmente enjuiciado por violación y acoso sexual–, desató una serie de denuncias no sólo en la industria del entretenimiento, sino en la política, el deporte y la cultura.
Pamela Anderson, de 51 años, actriz y modelo de la revista Playboy, conocida por su participación en la exitosa serie de los 90 Guardianes de la bahía, dijo que si bien es consciente de lo controvertidas que son sus declaraciones y de las críticas que estas pueden levantar, prefiere dejar claro que el movimiento #MeToo es “demasiado” para ella, “lo siento, probablemente me matarán por decir eso, pero mi madre me enseñó que no debía ir a un hotel con un extraño, y que si alguien me recibe con una bata de baño en una reunión de trabajo, debe ser otra cosa”, subrayó, refiriéndose a las prácticas del ex productor Harvey Weinstein. “Hay cosas que son sentido común”, sentenció.
La entrevista, a cargo del periodista Liam Bartlett, será emitida el próximo domingo, pero en los adelantos publicados en las redes sociales se puede ver que Anderson también habla sobre su relación con el fundador de WikiLeaks, Julian Assange. “Me siento muy cercana a él (…), confía en mí”, cuenta la intérprete de origen canadiense.
Cuando se le pregunta sobre qué tipo de relación tienen, la actriz contesta: “Nos gusta describirlo como una lucha romántica (romantic struggle)”, antes de aclarar que sólo hay amistad entre ellos.
Assange lleva más de seis años refugiado en la embajada de Ecuador en Londres bajo amenaza de extradición a Estados Unidos, para enfrentar posibles cargos de espionaje.
En ocasiones anteriores, el hacker australiano ha declarado no sentirse cómodo por sus condiciones de vida en la residencia diplomática, e incluso ha llegado a demandar al Estado ecuatoriano al considerar que allí se están “vulnerando sus derechos”.
En la entrevista, Anderson aprovechó para solicitar al primer ministro australiano Scott Morrison que use su poder para llevar a Assange a su tierra natal. “Scott, recupera el pasaporte de Julián y llévalo a Australia. Siéntete orgulloso de él y organízale un desfile cuando llegue a casa”, dijo la actriz, mirando directamente a cámara. “Julian ha hecho tanto. Ha expuesto crímenes de guerra. (…) Creo que los australianos deberían celebrarlo. Hay mucha locura en este momento, pero cuando se calme, él estará en los libros de historia. Será el australiano más famoso y la persona más importante en esta vida. Es un australiano que está salvando el mundo”, continuó.
Entre otras cosas que la actriz ha revelado en el programa, se encuentra el que en una ocasión fue “contratada” para asistir al cumpleaños de Donald Trump.
Si bien Anderson no recordó el evento con exactitud, sí afirmó que años atrás era común que a las conejitas de Playboy les pagaran 500 dólares para asistir a eventos, y que fue así como conoció al ahora presidente de Estados Unidos. Según la declaración de la modelo, esta sería la única ocasión en la que cruzó camino con el neoyorquino, pero sí afirma que le envió una carta a Melania Trump, impulsándola a no usar abrigos de piel, ya que “le gusto o no, la primera dama va a ser un icono de moda”.