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Viernes 17 de Mayo de 2024

Guerrero, México

Espectáculos  

Estrenan Hotel Nirvana, obra basada en los experimentos del sicólogo Timothy Leary con el LSD en Zihuatanejo

Se debe recuperar la “utopía histórica” de la contracultura ante la constante violencia que se vive en el país, remarca el autor, Juan Villoro

Abril 05, 2024

Escena de Hotel Nirvana, que se puede ver en el Centro Nacional de las Artes Foto: Cortesía de la Compañía Nacional de Teatro

Nancy Gutiérrez / Agencia Reforma

Ciudad de México

En los años 60, el famoso sicólogo estadunidense Timothy Leary fue expulsado de Harvard por hacer experimentos con LSD con sus alumnos. Lo que pocos saben es que después de eso él se refugió en México, en Zihuatanejo, donde continuó con sus experimentos.
A partir de ese hecho surge la obra de teatro Hotel Nirvana, un texto de Juan Villoro, bajo la dirección de Antonio Castro, y las actuaciones de la Compañía Nacional de Teatro, que ya está en cartelera del Teatro de las Artes.
“Me pareció que debíamos recuperar esta utopía histórica porque resuena muy fuerte con el presente porque todos los días nos despertamos con noticias de secuestros y asesinatos, debido al narcotráfico, y hubo un momento en el que se planteó una relación muy distinta los estimulantes en aquel momento Leary planteó la posibilidad de un trato regulado una investigación para ver cuales convienen, cómo administrarlas, establecer una regulación social, pero esto no fue posible y todo quedó en manos del narcotráfico”, dijo en entrevista Juan Villoro.
A pesar de que está inspirada en un hecho real, la obra es ficción, cuenta la historia de 11 personajes hospedados en dicho hotel que experimentan con una droga (también ficticia), llamada Logos. Entre los huéspedes está una filósofa del lenguaje, harta de la academia; una ex monja alcohólica decepcionada de la iglesia, un agente de la CIA, un funcionario de la Segob, una niña rica que patrocina el proyecto, entre otros.
“Yo inventé a los personajes, cuyas vidas quería contar, e invente también otra droga, porque el LSD es una droga introspectiva y en escena hubiera sido muy aburrida, así que me serví de otra sustancia a la que llamé Logos y que afecta el lenguaje.
“Estas son las transformaciones que la gente tiene, a partir de su estancia en Hotel Nirvana, pero no todas las transformaciones son positivas porque no quería hacer una celebración de la expansión de conciencia, hay gente que se esclarece y otra que se suicida”, adelantó el dramaturgo.
Para llevar a escena este texto en el que comenzó a trabajar desde hace varios años, contó con el apoyo de varios expertos teatrales, como la vistosa escenografía de Ingrid SAC, que permite ver en simultáneo lo que acontece en varias habitaciones; además la iluminación de Víctor Zapatero y la música de Diego Herrera, de Caifanes, y su hijo Mariano Herrera.
“Hotel Nirvana está completamente inspirada en el ímpetu de los movimientos contraculturales de los años 60, y de su deseo de transformar las cosas, al menos en nuestra mente. Es una obra muy divertida y provocadora, y es una invitación a extender los límites de nuestra imaginación para reinventarnos como sociedad y como personas”, dijo Antonio Castro, a quien Villoro reconoce como coautor de la obra y con quien anteriormente ya había trabajo, en obras como El filósofo de Clara y La desobediencia de Marte.
La obra, montada por la Compañía Nacional de Teatro, tendrá funciones hasta el 21 de abril, en el Centro Nacional de las Artes; sin embargo, esperan llegar al teatro Julio Castillo, del Centro Cultural del Bosque, a finales del verano. El recinto se ubica en avenida Río Churubusco, Country Club, y la obra tiene funciones los jueves, viernes y sábados, a las 7 de la noche; los domingos la función es a las 6 de la tarde. La entrada cuesta 150 pesos en taquilla, pero los jueves es de 30 pesos.
Villoro recomienda leer, para conocer más sobre el personaje en el que está basada la obra, y además adentrarse en los movimientos contraculturales de la época, Las enseñanzas de Don Juan, de Carlos Castañeda; Se está haciendo tarde (final en laguna), de José Agustín; Pasto verde, de Parménides García Saldaña, y la poesía de Allen Ginsberg.
En cuanto a música, recomienda a Bob Dylan, Jefferson Airplane y Grateful Dead.