Actualmente hace su segundo protagónico en la serie Lucifer, aunque fue la serie de culto True blood, de HBO, la que lo posicionó
Rodolfo G. Zubieta / Agencia ReformaCiudad de México
Diciembre 26, 2017
De manera lenta, pero segura, un mexicano se ha ido colando desde hace varios años en las mejores series estadunidenses y hoy goza del amor del público con su segundo protagónico en televisión, en la serie Lucifer.
Se trata de Kevin Alejandro, un actor de raíces mexicanas, nacido en San Antonio, Texas, que inició su carrera en el 2003 y desde entonces ha sumado más de 60 créditos en la pantalla chica.
Charmed, 24, Alias, CSI: New York, Medium, Big love, CSI: Miami, Ugly Betty y Sons of anarchy son algunos de los programas en donde ha tenido participación, a veces especial y otras, recurrente.
“Descubrí al inicio de mi carrera una gran fórmula para entender y trabajar en la industria: los papeles pequeños, que duran uno o dos episodios, donde eres el invitado, son importantísimos”, sostuvo.
“De esta forma, al hacerme visible, los estudios empezarían a confiar en mí y en mi trabajo. Ellos veían que me comprometía con un proyecto, que hacía bien lo que se me pedía y volvían a confiar en mí”.
Así, el actor, cuyos abuelos maternos eran de Guadalajara, poco a poco comenzó a destacar en Hollywood y su imagen a ser más reconocida entre la comunidad latina de Estados Unidos.
Obtuvo papeles de mayor peso en series como Weeds, donde dio vida a un narcotraficante; Heroes, como un policía; un detective en Southland y un hombre misterioso en The mentalist.
Sin embargo, fue el personaje del brujo mexicano Jesús Velázquez, en el show de culto True blood, de HBO, el que lo posicionó, pues su papel se expandió durante tres temporadas.
“Creo firmemente que todos los pequeños papeles y mis ganas de trabajar y dar siempre mi 100 por ciento, me han llevado hasta este momento de mi vida, a finalmente estar donde siempre había soñado. Todos esos roles como invitado o recurrentes me prepararon para crear un personaje de manera más profunda y no sentirme como un pez fuera del agua”, reconoce el también cineasta, de 41 años.
Ese personaje es Daniel Dan Espinoza, un detective de homicidios de Los Ángeles que se ve obligado a trabajar con el diabólico protagonista de Lucifer (Tom Ellis), el mismísimo Príncipe de las Tinieblas, una serie de Universal Channel.
“Lucifer es uno de los highlights de mi carrera, sin duda. Es un show diseñado para relajarte cuando llegas a casa, divertirte y sacudirte de vez en cuando. Mi personaje es de los pocos en la serie que genera una mayor empatía con el público, pues es humano y hace que la historia se mantenga anclada en un mundo real, sin tanta fantasía”.
Una de las sutiles características de este “héroe” es su raíz mexicana, un elemento que Alejandro ha buscado imprimir en casi todos sus personajes.
“Me siento orgulloso de dónde vengo. De niño, mi mamá me obligaba a hablar español, pero después crecí y es una práctica que se me ha ido olvidando, pero que no suelto. Me gusta estar conectado a mis raíces. El tener todo tipo de papeles, no precisamente de mexicano, me ayudó a abarcar un mayor rango actoral y obtener más oportunidades”, consideró.
“Es genial que actualmente la industria en Hollywood y de todo el mundo estén más abiertos a la diversidad, a apostar por todo tipo de personas y talentos. Es un buen momento para alcanzar tus sueños”, dijo Kevin Alejandro.