Bloquean carreteras en la Costa Chica y toman el Ayuntamiento en Alcozauca por el fertilizante

Campesinos cierran tres tramos de la vía Acapulco-Pinotepa, en San Marcos, Florencio Villarreal e Igualapa. En la Montaña quedan adentro del edificio los trabajadores municipales

Antonia Ramírez / Jacob Morales Antonio

Alcozauca / Chilpancingo

Integrantes del Consejo de Comunidades Indígenas de la Montaña, del municipio de Alcozauca, tomaron el Ayuntamiento para pedir a las autoridades una mesa de diálogo, para tratar la entrega del fertilizante; mientras que campesinos de Costa Chica bloquearon por 10 horas tres tramos de la carretera federal Acapulco-Pinotepa Nacional, en San Marcos, Florencio Villareal e Igualapa, para exigir la entrega del insumo.
Los integrantes de la Coordinadora de Comisarios Ejidales y Comunales de Guerrero se apostaron desde las 8 de la mañana y bloquearon de forma total ambos sentidos en la carretera federal Acapulco-Pinotepa, vía que conecta con Oaxaca, en los tres tramos que pasan por la cabecera municipal. El bloqueo fue levantado a las 6 de la tarde, luego de que se acordó una mesa de trabajo hoy en Chilpancingo, a las 11 de la mañana, en la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).
Por teléfono, el representante de la coordinadora en Costa Chica, Arquímedes Sandoval Vázquez, denunció que había más de 7 mil campesinos que fueron excluidos del programa federal, a pesar de estar en las actas que se validaron en las asambleas de los ejidos; señaló directamente como responsables a los “Servidores de la Nación”, a quienes se entregaron todos los documentos necesarios solicitados.
En un comunicado, la coordinadora precisó que son 5 mil 138 los campesinos que no fueron ingresados al programa y se detalló que mil 300 son de San Marcos, mil 400 de Tecoanapa, mil 100 de Ometepec, 154 de Marquelia, 213 de Cuautepec, 676 de Cruz Grande, 152 de Tlacoachistlahuaca y 143 de Cuajinicuilapa.
El representante de los comuneros y ejidatarios, Sandoval Vázquez, dijo que en San Marcos dos presidente de bienes comunales no aparecieron en las listas de beneficiados, cuando es gente que año con año siembra maíz.
Exigió a la Sader y a la Secretaría del Bienestar que les expliquen las razones y los motivos del porqué no fueron incluidos en el programa federal, y que el bloqueo a la vía fue en una acción desesperada, porque muchos ya sembraron y necesitan el fertilizante.
También se quejó porque el alcalde perredista de San Marcos, Tomás Hernández Palma, no atendió la petición de comprar semillas de maíz mejorada para los productores del municipio y que nunca atendió al grupo de comisarios, bajo la excusa de evitar los contagios del virus que provoca la Covid-19.
Dijo que eran unos mil campesinos los que salieron a protestar en los tres tramos carreteros, y que todos trataban de cumplir con las medidas sanitarias, de traer cubrebocas y la sana distancia, pero que eso era casi imposible de cumplir; que con todo y miedo la gente tuvo que salir a bloquear la carretera, donde se permitió el paso de enfermos y ambulancias.
El asesor de la coordinadora, Arturo García Jiménez, dijo que el problema lo generaron los “Servidores de la Nación” que al subir los datos de los comuneros y ejidatarios al sistema, éste no cargó y simplemente se perdieron los datos de los campesinos.
Indicó que la desesperación de los campesinos es porque de ahí se obtiene el 30 por ciento de toda la cosecha del estado, y que el mismo problema se repite en otras zonas de Guerrero, pero en menor escala y que no hay tantos campesinos faltantes o desaparecidos de las listas, como en Costa Chica.
En un comunicado, la coordinadora demandó un un diálogo directo con el delegado federal Pablo Amílcar Sandoval y la coordinadora estatal del programa, Arely Cerón Trejo, de lo contrario no se retiraría el bloqueo carretero en los tres tramos.
También se recriminó que en la conferencia de prensa de este sábado, el subsecretario García Winder anunció que todo marcha muy bien con la entrega en Guerrero, y que además se están realizando acciones complementarias para fortalecer el programa de fertilizante, “ante lo cual le exigimos que cumpla en los hechos con lo que dice que se está haciendo, ya que además reconoce que más de la mitad de los suelos se encuentran deteriorados”.

Sin fertilizante, 800 productores

Mientras que en Alcozauca, los campesinos informaron que son aproximadamente 800 productores, los cuales no han recibido el fertilizante; algunos lo recibieron incompleto y otros más ni siquiera fueron censados por los “Servidores de la Nación” para integrarlos al padrón, por lo que exigieron una respuesta inmediata, porque nuevamente hay retrasos, al estar ya en julio y les dicen que esperen otro mes, cuando la milpa no espera.
La movilización campesina inició a las 9 de la mañana, cuando llegaron a las oficinas del Bienestar, para hablar con la responsable, Floritilia Martínez Peñabronce, y los “Servidores de la Nación” que coordinan la entrega del insumo y otros programas federales, encontrando las puertas cerradas y un letrero de que abrirían hasta las 5 de la tarde, por lo que se fueron al Palacio Municipal para solicitar la intervención del presidente, Armando Sánchez de Jesús.
Los campesinos dijeron que les comentaron que cerraron porque se enteraron que bajarían a buscarlos y tuvieron miedo de que les tomaran las oficinas, porque no saben dar respuestas a la población.
Mencionaron que al llegar al Ayuntamiento, donde colocaron su aparato de sonido para informar a la gente y pedir la intervención del presidente municipal, quien no estuvo, y ante la poca colaboración que encontraron los hombres y mujeres campesinas, decidieron tomar las instalaciones.
Aseguraron que ante esa acción, el director de Seguridad Pública, Eduardo Flores, los amenazó e intimidó diciéndoles que enviaría sus fotografías “allá arriba, porque estan secuestrando a los trabajadores”, y aunque le dijeron que estaban ahí para que el alcalde priísta fuera el interlocutor con las autoridades federales y estatales, no fue suficiente, al contrario, “se encerraron en las oficinas” y fue cuando la gente se sentó en las gradas de la entrada.
Remarcaron que ellos no retuvieron a los trabajadores, “fueron ellos quienes cerraron las puertas y se quedaron adentro”. Los campesinos se instaron en el corredor del Ayuntamiento, en espera de la respuesta de las autoridades.
Cerca de las 4 de la tarde, a través del sonido, les pidieron a los campesinos que estaban en el corredor y gradas del inmueble, que se hicieran a un lado porque los trabajadores del Ayuntamiento iban a salir. Fueron unos 15 y el que salió al último le puso llave a las puertas y los policías aprovecharon que los campesinos se pararon y recogieron todas las sillas en donde estaban sentados, otros les tomaban fotos.
Cerca de las 6 de la tarde informaron que por medio del director del Centro de Derechos Humanos de la Mañana Tlachinollan, Abel Barrera, se les comunicó el acuerdo de una mesa de trabajo con el titular de Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural de Estado de Guerrero (Sagadegro), Juan José Castro Justo, y la encargada del programa Fertilizante para el Bienestar, Areli Cerón, en Chilpancingo el día de hoy.
Comentaron que las personas se quedarán a dormir en el corredor del Palacio Municipal, en espera de la reunión de mañana martes.
El secretario general del Ayuntamiento de Alcozauca, José Luis Alvarado Bazán, dijo que el gobierno dio respuesta a los inconformes, que le pidieron hacer un oficio para enviarlo a las autoridades correspondientes y que también se aclaró que el Ayuntamiento ya no es responsable del fertilizante y que eso debían verlo con la Sader, Sagadegro y con la oficina de Bienestar, que coordina Floritilia Martínez.
La plática fue al salir de las oficinas con todos los trabajadores, donde agregó que ellos como Ayuntamiento los apoyaban con el traslado del fertilizante a sus comunidades.
Dijo que los campesinos se molestaron porque el presidente municipal no los atendió, porque estaba fuera realizando gestiones, pero les ofreció que pusieran una fecha y hora para hablar de sus planteamientos y el acompañamiento del municipio en sus gestiones.
Remarcó que el fertilizante no es competencia del municipio y eso debían verlo con las oficinas del Bienestar y con la Sader.
Participaron campesinos de 16 comunidades, entre ellas: Tlahuapa, Ixcuinatoyac, Almolonga, Chimaltepec, Acametla, San José Lagunas, Lomazoyatl, San Martincito y colonias de la cabecera, como La Mesita y Cruz Verde.
Otra de las quejas fue que el Ayuntamiento no cumplió con el traslado del fertilizante a las colonias de la cabecera municipal y los campesinos tuvieron que pagar el flete, al recogerlo en las bodegas destinadas.
Lamentaron el retraso en la entrega del fertilizante, porque afecta a los campesinos, cuyo sustento es la siembra de temporal y este año, nuevamente llega tarde, incompleto y otros ni siquiera fueron incluidos por las personas encargadas del gobierno federal.
Dijeron que el año pasado tuvieron paciencia, porque era un gobierno que estaba entrando, pero ahora ya no saben si es porque desconocen o por incapacidad para atender a la gente pobre que vive del campo.

 

La mala planeación detonó las protestas por el fertilizante, señala estudio del Coneval

La comprobación legal de la posesión de la tierra en propiedad social, el registro electrónico en una población sin internet y funcionarios sin experiencia en programas rurales, son algunos factores que causaron descontento entre los campesinos en 2019, dice el organismo que mide la política social

Ramón Gracida Gómez

La entrega de fertilizante gratuito el año pasado tuvo una planeación deficiente y una respuesta institucional insuficiente, que generaron las protestas sociales, concluye el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
La comprobación legal de la posesión de tierra en propiedad social, el registro electrónico en una población sin acceso a internet y funcionarios sin experiencia en programas rurales, son algunos de los factores que provocaron descontento entre los campesinos y retrasos en la entrega de los insumos; lo cual ocasionó que no se aprovecharan óptimamente, asegura el consejo en el documento que forma parte de las Evaluaciones de diseño con trabajo de campo a 17 programas prioritarios de desarrollo social 2019-2020, que presentó este lunes y están disponibles en su página web.
Con base en entrevistas a beneficiarios y servidores públicos de Iguala, Chilpancingo, Quechul-tenango, Leonardo Bravo, Mochi-tlán, Tlapa, Olinalá y Metlatónoc, el Coneval realizó una revisión minuciosa del programa que el año pasado operó solamente en Guerrero.
El organismo asevera que el proceso de planeación del programa en 2019, “no consideró los elementos y escenarios reales y suficientes, para propiciar un funcionamiento adecuado, de tal suerte que se enfrentaron a múltiples imponderables. Esta fue una de las causas fundamentales que provocaron protestas frecuentes e insatisfacción de buena parte de los solicitantes y, en específico, de las personas beneficiarias”.
Ahonda en la escasa existencia de oferentes de fertilizante, con la capacidad para cumplir con el volumen, “lo que restringió las posibilidades de negociación”, y el “tortuoso” proceso de licitación, que aplazó la adquisición hasta principios de abril de 2019, “lo que provocó demoras importantes”.
Además, la emisión de vales para intercambiarlos por el fertilizante implicó disponer de los datos de los beneficiarios y, luego, esperar alrededor 30 días para su impresión, lo cual “provocó nuevos retrasos, que también alentaron las protestas sociales (dado que empezaron a rebasarse las fechas óptimas de la siembra)”, aduce.
Asegura que el acompañamiento y asesoramiento por el programa de Desarrollo de Capacidades y Extensionismo Rural, en la correcta aplicación de los insumos, se concretó “aunque con un retraso considerable, pues los extensionistas empezaron a trabajar en la segunda mitad del año”.
Asimismo, el Coneval afirmó que el esquema para el registro de beneficiarios fue “pertinente en su concepción, pero que fue revelando insuficiencias paulatinamente”, como los mecanismos y canales de comunicación sobre el programa, que priorizó la vía electrónica, y no llegó a las comunidades más marginadas, “esto ocurrió mayormente entre productores pertenecientes a municipios marginados de la región Montaña, específicamente de Metlatónoc y Olinalá”.
A pesar de que la mayoría de los requisitos para acceder al programa no fueron problemáticos, la comprobación legal de la posesión del predio sí resultó serlo, porque en el caso de la propiedad social, muchos no cuentan con ese documento y para obtenerlo se debe realizar un trámite en el Registro Agrario Nacional, que tarda tres meses, periodo que prácticamente los dejaba fuera del programa, “esto fue un detonante para las primeras protestas”, concluye.
Del mismo modo, las solicitudes se realizaron vía internet, servicio al que no tienen acceso muchos productores, que tampoco saben manejar una computadora, lo cual fue aprovechado por las organizaciones gremiales, en principio al margen del programa, que “entraron en esta función y la utilizaron con fines de legitimación política; en algunos casos cobraron a los productores por hacer este trámite y, en otros, fungieron como un primer filtro para preseleccionar a los solicitantes”, denuncia.
Ante el personal reducido con el que operan el Centro de Apoyo al Desarrollo Rural y el Distrito de Desarrollo Rural, que generó congestionamiento de las solicitudes y protestas, los “Servidores de la Nación” se involucraron en el programa, pero este personal “con frecuencia no tenía experiencia en la operación de programas agrícolas ni conocimiento de los productores rurales”, lamenta.
Por ello, el Coneval señala que “la capacidad de respuesta institucional de parte de la Sader (Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural) fue insuficiente, y se recurrió a otros actores institucionales que llenaron vacíos en la atención, pero también generaron cierto desconcierto y dificultades que el programa ha tenido que subsanar lentamente y con costos operativos importantes”.
En cuanto a la distribución de los insumos, lo califica de “tortuoso, con varias dificultades que lo hicieron también costoso; resultado de una planeación deficiente y de la poca experiencia de parte del personal encargado que intervino en este proceso”.
Menciona algunos de los problemas como los atracos, la lentitud, almacenamiento improvisado y la orografía del estado, que dificultó el acceso a ciertas comunidades.
El Coneval afirma: “La entrega del apoyo se realizó tardíamente a la mayoría de los beneficiarios, lo cual dio lugar a que no se aprovechara óptimamente el insumo recibido, debido a que las fechas de siembra en muchos casos ya habían pasado, salvo en aquellas regiones del estado en las cuales hubo un mayor retraso de las lluvias y, por ende, del establecimiento de las siembras”.
En los testimonios encontraron quejas porque los 300 kilos de fertilizantes por hectárea fueron insuficientes y una formulación “poco idónea para elevar rendimientos en algunas zonas”, porque no se distinguió entre el potencial productivo de los suelos ni el tipo de cultivo.
Además de sus recomendaciones generales para evitar los problemas mencionados, el Coneval enfatiza que “si bien, el programa para 2020 tiene contemplado brindar asesoría técnica a los pequeños productores de cultivos prioritarios para el uso y aplicación de los fertilizantes químicos y biológicos, es importante que el fertilizante sea entregado y aplicado con oportunidad, y que las fórmulas sean las requeridas de acuerdo con los tipos de suelos”.
Si el fertilizante se entrega fuera de las fechas de siembra o no reúne la calidad mínima requerida, entonces el programa “no logrará su objetivo de incrementar la productividad de tales cultivos”, advierte.
El Coneval reconoce que la aplicación del programa el año pasado representó “un gran reto en su operación para la Sader, dada la trayectoria histórica que ha tenido el subsidio al fertilizante para apoyar a los productores en Guerrero”, que estaba a cargo de los gobiernos estatal y municipales.
Uno de los aspectos negativos que persisten en 2020 es que el programa no cuenta con padrón de beneficiarios, sino con un listado de tipo padrón, el cual sólo reporta el nombre del beneficiario, municipio y hectáreas apoyadas; pero no otras características relevantes como el estrato del productor, cultivo, edad, sexo, pertenencia a población indígena, grado de marginación de su localidad, entre otras.

 

Coneval reporta deficiencias en programas sociales

Agencia Reforma

Ciudad de México

Los programas sociales prioritarios del gobierno federal fueron puestos en marcha con deficiencias en su diseño y operación, advirtió el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Al presentar los resultados de las evaluaciones a 17 estrategias federales, el Secretario Ejecutivo del organismo, José Nabor Cruz Marcelo, indicó que en su primer año de operación, éstas carecieron de una definición clara de su población objetivo y de los problemas sociales que buscaban atender.
Además, señaló, operaron con poca o nula infraestructura física y recursos humanos dado el contexto de austeridad y, en algunos casos, aún no está claro el impacto de los programas en las condiciones de vida de la población.
Entre los programas evaluados se encuentran Apoyos para el Bienestar de las Niñas y Niños, Hijos de Madres Trabajadoras, Sembrando Vida, Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad Permanente, Precios de Garantía a Productos Alimentarios Básicos, Crédito Ganadero a la Palabra y Fertilizantes.
Asimismo Producción para el Bienestar, Agromercados Sociales y Sustentables, Universidades para el Bienestar Benito Juárez, Beca Universal para Estudiantes de Educación Básica y de Educación Media Superior Benito Juárez, Jóvenes Construyendo el Futuro, Nacional de Reconstrucción y Microcréditos para el Bienestar.