Habrá más violaciones a los derechos con la militarización de la GN, prevén defensores

Tlachinollan dice que se va polarizar más a la sociedad y los ciudadanos estarán más indefensos. El Centro Minerva Bello opina que la incorporación a la Sedena es una reacción desesperada ante el aumento de la violencia pero no tendrá resultados. Rompe AMLO su compromiso de que la seguridad pública estaría dirigida por civiles: Centro Morelos

 

El director del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Abel Barrera Hernández, declaró que “es muy preocupante” la decisión del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, de incorporar a la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Dijo que en los hechos eso es militarización y que con ello se va a polarizar más a la sociedad y se coloca al ciudadano en mayor indefensión y riesgo a sus derechos humanos y que la medida trastoca los principios internacionales.
Por su parte, el director del Centro de Derechos Humanos de las Víctimas de la Violencia Minerva Bello (Centro Minerva Bello), Filiberto Velázquez Florencio, opinó que la medida es una “reacción desesperada” por el aumento de la violencia, pero que no tendrá resultados efectivos.
Mientras que el Centro Regional de Derechos Humanos José María Morelos y Pavón (Centro Morelos), adelantó que son inminentes las violaciones a los derechos humanos con esa decisión.
El jueves el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, informó que un día antes envió al Congreso la iniciativa de reformas con el propósito de que la Guardia Nacional pase a formar parte de la Sedena. Aseguró que el propósito no es militarizar o ir al autoritarismo.
Consultado por teléfono, el director de Tlachinollan Barrera Hernández consideró que la decisión del presidente sí implica militarizar el país y que es una decisión que trastoca los principios internacionales que establecen que la política de seguridad pública tiene que estar en manos de las autoridades civiles y operadas por cuerpos civiles.
Opinó que la tendencia debe ser el fortalecimiento de las corporaciones civiles y los cuerpos de seguridad deben estar a favor de los derechos humanos.
Criticó que el Ejército por su formación militar tiene su esencia en el uso de la fuerza y sus integrantes están preparados con estrategias bélicas y castrenses para enfrentar a los que consideran sus enemigos.
“Es obvio que su perfil profesional es la guerra, y decir que ahora con cursos de derechos humanos y talleres van a cambiar su visión y a respetar los derechos humanos, es falso porque es un institutito regido por una autoridad vertical, que da órdenes para que se cumplan y para implementar operativos”.
Barrera Hernández declaró que el armamento de las fuerzas armadas pone en riesgo a la sociedad civil.
“La militarización ha causado graves violaciones a los derechos humanos; se han dado ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias, desapariciones de personas, casos de tortura”, denunció.
Para el defensor de derechos humanos legalizar la presencia de los militares para que se encarguen de la violencia en las calles, es como volver a un esquema guerrerista “que no ha dado resultados desde que se decidió sacar al Ejército de los cuarteles para garantizar seguridad”. Declaró que con esa medida lo único que se ocasionó fue que se incrementara la violencia, se multiplicaron los civiles armados, y que el uso de las armas se convirtió en una práctica generalizada.
Vaticinó que igual será con la transferencia de la Guardia Nacional a la Sedena; “no vemos que vaya a haber realmente una contención de la inseguridad, menos un mayor respeto a los derechos humanos”.
El director de Tlachinollan dijo que la medida también implica impunidad pues recordó que los crímenes y violaciones a los derechos humanos que han cometido los militares en el estado no se han investigado ni castigado.
“En Guerrero hay una deuda histórica desde la guerra sucia, hay señalamientos claros y contundentes de que el Ejército actúa como fuerza represiva y de contrainsurgencia y se sigue aplicando, como en el caso de los estudiantes de la Normal de Ayotzinapa que fueron infiltrados porque los vieron como una amenaza de estabilidad social”.
Añadió que está claro que en las desapariciones de los estudiantes participaron mandos y elementos castrenses.
Dijo que en Guerrero la militarización ha dejado “rastros sangrientos” a lo largo y ancho de la entidad y que no hay ni un militar castigado, a pesar de casos como el de la desaparición de Rosendo Radilla que ha llegado hasta la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el que hay encubrimiento e impunidad.
“Es muy preocupante lo que está pasando, más allá del perfil que se le quiere dar al Ejército, que es obvio que no lo tiene, porque han sido violadores de derechos humanos y ahora no puede tener una imagen inmaculada o decir que esta vez va a respetar los derechos humanos”.
Barrera Hernández advirtió que la militarización en el país va a polarizar más a la sociedad y va a colocar al ciudadano en una situación de mayor riesgo porque el Ejército en las calles no representa la protección a los derechos humanos, advirtió.
Añadió que en la entidad ya se está viendo que la Guardia Nacional no está protegiendo a la gente, sino a las instituciones, a los intereses del Estado, por ejemplo las casetas de peaje de la autopista, “y se vuelven contra la población civil que ejerce su derecho a la protesta”.
Agregó que en los años que ha estado aquí la Guardia Nacional no se ha visto que sea garante de los derechos humanos, por el contrario, se organiza para contener la protesta social, como pasó con los padres y madres cuando quisieron desplegar propaganda por la desaparición de sus hijos en la Autopista del Sol, recordó.
Declaró que por el contrario hay un incremento de la violencia e inseguridad, “a pesar de que las cifras oficiales indican que estamos a la baja en los delitos, en los hechos la gente se siente insegura y con temor por los asesinatos, y hay mayor uso de la fuerza contra la misma población que se siente indefensa y desprotegida”.
Añadió que tampoco se ha visto que la Guardia Nacional se traslade a las regiones donde hay presencia de los grupos de la delincuencia, “no actúan para contener sus irrupciones y agresiones, quedan a la expectativa, a la distancia”.
Criticó que el actual gobierno no ha fortalecido a las policías municipales que requieren capacitación y profesionalización, por el contrario se ha invertido el dinero en cuarteles de la Guardia Nacional y en el incremento del número de sus efectivos.
“Las corporaciones policiales municipales y estatales están desmanteladas y se ha robustecido equivocadamente a la Guardia Nacional y al Ejército”.
Por su parte, el director del Centro Minerva Bello, Velazquez Florencio, declaró que la incorporación de la Guardia Nacional a la Sedena “es una reacción desesperada ante el aumento de la violencia e impunidad en el país”.
Añadió que “es casi, casi”, de lo único que ha podido echar mano el actual gobierno para solucionar el problema de la violencia, “pero lamentablemente sabemos que no es una manera efectiva de dar una respuesta al problema”.
Para el defensor de derechos humanos hay otras maneras de las que se puede echar mano, “pero para eso se necesita mucha apertura y disposición para trabajar con los organismos de derechos humanos, con la sociedad civil, con las víctimas y las iglesias”.
Sin embargo criticó que hay cerrazón y prefieren pensar que solamente ellos tienen la respuesta.
Dijo que no cree que, como dijo López Obrador, la medida no signifique militarismo ni autoritarismo, “porque sabemos las graves violaciones a los derechos humanos que se han dado y, en ocasiones son demasiado sangrientas”.
Agregó que el ejemplo es el caso de los 43 estudiantes desaparecidos de la Normal de Ayotzinapa, “ese es un caso que dejó una grave y grande herida abierta”.
Reconoció que no todos los elementos del Ejército son violadores de derechos humanos, “pero cuando alguien de ellos lo llega a hacer deja grandes heridas en la sociedad, lo hemos visto a lo largo de la historia”.
Opinó que al pasar la Guardia Nacional al Ejército serán lo mismo, “nada más le ponen un chaleco con un color diferente, entonces se van a seguir perpetrando las violaciones a los derechos humanos y la impunidad”.
Dijo que aunque lo niegue el presidente, la incorporación de la Guardia Nacional a la Sedena significa militarismo y autoritarismo y que no es la solución efectiva en un país democrático.
En un boletín de prensa, el Centro Morelos opinó que son inminentes las violaciones a los derechos humanos con la incorporación de la Guardia Nacional a la Sedena.
“Al asumir el Ejército el control de la Guardia Nacional, el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador rompe con su compromiso de que serían las instituciones civiles las que tendrían el mando de las instituciones de Seguridad Pública”, criticó.
Agregó que en el fondo, pocos creen que con ello se logrará resolver el problema de la seguridad pública, la paz y acabar con la corrupción. “Tampoco se terminará con las desapariciones, asesinatos, desplazamientos y no acabará con los grupos narco paramilitares”.
Denunció que paralelamente a la militarización del país, el actual gobierno implementa un plan para acabar con los organismos civiles de derechos humanos que acompañan a las víctimas de la inseguridad y la violencia.
Dijo que pretende acallarlos porque son los que denuncian la inacción de las autoridades, la corrupción y la impunidad y que para ello “utilizan a los grupos paramilitares que son comparsas de los gobernantes, políticos y caciques locales”.

Diputados aprueban en lo general reformas sobre la Guardia Nacional

En las primeras horas de este sábado, los legisladores avalaron la propuesta presidencial para que el cuerpo de seguridad quede bajo control de la Sedena, luego de que Morena y aliados impulsaron que se votara en fast track

Agencia Reforma y Redacción

Ciudad de México / El Sur

Morena y sus aliados aprobaron en lo general en las primeras horas de este sábado los artículos que conforman la iniciativa que establece que la Guardia Nacional pase al control de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Con 265 votos a favor, 221 en contra y 2 abstenciones, se aprobaron en lo general reformas a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, que darán a la Sedena el control administrativo y operativo de la Guardia Nacional.
Con 267 votos se reformó en lo general la Ley Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos. Hubo 220 en contra de la oposición y una abstención de un morenista.
Con el voto de diputados de Morena, PT y PVEM, se dio luz verde también para modificar la Ley de la Guardia Nacional que establece una nueva estructura de mando de este cuerpo policiaco y le permitirá intervenir en seguridad pública local y auxiliar a las Fuerzas Armadas. Fueron 267 votos a favor, 222 en contra y una abstención.
Finalmente, con 458 votos a favor, 26 en contra y 1 abstención se avalaron, en lo general, las reformas, adiciones y derogaciones a diversas disposiciones de la Ley de Ascensos y Recompensas del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, en materia de Guardia Nacional y Seguridad Pública.
Las reformas establecen que el activo del Ejército y Fuerza Área está constituido por personal militar que se encuentre asignado, prestando sus servicios en la GN.

Hacen copy paste

El grupo parlamentario de Morena hizo copy paste de la iniciativa presidencial sobre la Guardia Nacional y pidió que se le dispensara el trámite, para que la misma noche de ayer viernes fuera discutida por el pleno.
De esta forma, los grupos parlamentarios de Morena, Partido del Trabajo y Partido Verde presentaron una iniciativa idéntica a la enviada por el Ejecutivo para que se sometiera a discusión y votación de inmediato, con dispensa de trámites, al considerarla de urgente resolución.
La iniciativa fue firmada también por PVEM y PT, y contiene las mismas palabras del texto presidencial, para plantear que la Secretaría de la Defensa Nacional tenga la atribución de ejercer el control operativo y administrativo de la Guardia Nacional, conforme a la Estrategia Nacional de Seguridad Pública que defina la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana.
Hasta el cierre de esta edición, el tema se seguía discutiendo en el pleno en lo particular.
En tribuna, el coordinador Ignacio Mier, en nombre del grupo de Morena, del Verde y PT, anunció que hacen suya la iniciativa presidencial de reformas en materia de Guardia Nacional.
Se reforman la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, Ley de la Guardia Nacional, Ley Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, Ley de Ascensos y Recompensas del Ejército y Fuerza Aérea., más 9 artículos transitorios.
“Estas reformas a leyes no reforman el espíritu original del Constituyente que aprobó la creación de la Guardia Nacional, como está establecido en el artículo 21 constitucional que la Guardia Nacional es una institución civil, adscrita a la Secretaria de Seguridad Pública y con funciones de coordinación de la Estrategia Nacional”, afirmó ante las acusaciones de que es una propuesta inconstitucional.
Pidió a los diputados que la iniciativa sea considerada de urgente resolución, que se le dispensen trámites y que entre de inmediato a discusión.
En consulta al pleno, la mayoría de Morena, PVEM y PT avalaron la dispensa de trámites y entrar a la discusión de la iniciativa, con el voto en contra del PAN, PRI, MC y PRD.
Las bancadas de oposición presentaron 8 mociones suspensivas para evitar el debate, pero fueron rechazadas por el pleno.
El panista Jorge Arturo Espadas, acusó el proceso de carecer de razón jurídica, sin parlamento abierto ni transparencia frente a los ciudadanos.

AMLO dice que no cree que Monreal pactara con opositores

López Obrador dijo que no cree que el senador morenista Ricardo Monreal haya pactado con la oposición para frenar reforma a la Guardia Nacional y en caso de que sí, considere que no le hará caso a los legisladores.
“No lo creo porque puede un legislador con vocación democrática o sin vocación democrática ofrecer su voto, pero no puede comprometer el voto de los demás , porque ya también no son tiempos aquellos de la borregada, ya cada quien es dueño de su criterio”, afirmó en conferencia mañanera.
“No creo y además si lo hizo no creo que le hagan caso los senadores en general, yo no hablo solo de los de Morena, si los senadores son representantes de las entidades, tienen criterio, representan a los ciudadanos, esto cambió, pero como dicen los abogados de que rechazan la reforma, nosotros estamos cumpliendo”.
El mandatario insistió en que defenderá la iniciativa con el fin de que no se corrompa a la Guardia Nacional.

Ricardo Monreal niega haber comprometido votos para rechazar reformas a la GN

El senador Ricardo Monreal afirmó que no comprometió voto alguno de rechazo a las reformas a la Guardia Nacional y electoral en las negociaciones que mantuvo con los grupos parlamentarios de oposición para impulsarlo a la presidencia de la Mesa Directiva.
En entrevista, el jefe de la bancada morenista sostiene que no incumplió acuerdos con las bancadas opositoras, como ha señalado el panista Damián Zepeda.
Según la versión del ex dirigente panista, el acuerdo de la oposición con Monreal para impulsarlo a la presidencia de la Mesa Directiva, comprendía el freno a la aprobación de las leyes secundarias de la Guardia Nacional y a la reforma electoral.
–Damián Zepeda dice que uno de los acuerdos era echar para atrás esa reforma en el Senado –se le preguntó.
“No, no es cierto. Eso sí es totalmente inexacto. Yo nunca podría comprometerme a eso porque ni siquiera sabemos el contenido de la misma”.
“Nunca comprometo votos por leyes anticipadamente; lo que siempre hago es comprometerme con mecanismos de diálogo, de apertura y de transparencia. Eso es lo que hago siempre, nunca comprometo votos. No podría hacerlo, porque eso depende del grupo parlamentario”.