Identifican restos de uno de los 43; no estaba en el basurero de Cocula, destaca la FGR

Un fragmento óseo de Christian Alfonso Rodríguez Telumbre fue hallado en la Barranca de la Carnicería, en el mismo municipio, a 800 metros del sitio que indicaba la “verdad histórica”, informa el fiscal especial Omar Gómez Trejo. Concuerdan la Universidad de Innsbruck y forenses argentinos en el análisis de ADN

Caterina Morbiato

El Sur / Ciudad de México

La Fiscalía General de la República (FGR) confirmó este martes la identificación de Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, uno de los 43 estudiantes que fueron desaparecidos en Iguala, la noche del 26 de septiembre de 2014. Cuando fue desaparecido Christian tenía 19 años y cursaba el primer año en la escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa.
En conferencia de prensa, el titular de la Unidad Especial de Investigación y Litigación para el caso Ayotzinapa de la Fiscalía General de la República (FGR), Omar Gómez Trejo, dijo que la identificación genética fue realizada por el Instituto de Genética de la Universidad de Innsbruck, Austria, y confirmada por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF).
El funcionario aseguró que los restos óseos fueron rastreados en una zona conocida como “Barranca de la Carnicería”, municipio de Cocula, durante una diligencia que la Unidad Especial para el Caso Ayotzinapa hizo entre el 21 y el 29 de noviembre de 2019.
El área, remarcó Gómez Trejo, difiere de la presentada en la primera investigación oficial del caso, según la cual los normalistas habrían sido secuestrados, asesinados, incinerados y sus restos arrojados al río San Juan, en las cercanías del basurero de Cocula.
“Este lugar no es el basurero de Cocula, ya que la barranca se encuentra a más de 800 metros de distancia de donde se crea la narrativa de la ‘verdad histórica’”.
“Cabe destacar que en el pasado, dentro del mismo expediente se recibió información sobre la zona antes referida sin que se agotara, por lo que deberá establecerse una serie de deslindes a las responsabilidades a que haya lugar”, advirtió.
Durante las búsquedas de noviembre pasado, detalló, se recuperaron 15 indicios que fueron embalados en el lugar para su análisis en presencia de los representantes de las familias y de la Comisión Presidencial del Caso Ayotzinapa.
“Con este nuevo hallazgo, como lo señaló el fiscal general Alejandro Gertz Manero, la verdad histórica se acabó y enfatizó: el caso sigue abierto”, agregó.
El subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, afirmó que la identificación permitió derrumbar la “mal llamada verdad histórica” sobre los 43 estudiantes de Ayotzinapa y abrió una nueva ruta para esclarecer el caso.

Conclusión “indubitable”

La evidencia fue analizada a fines de febrero de 2020 por los servicios periciales de la FGR en Ciudad de México, con el fin de establecer su utilidad para los análisis genéticos correspondientes. Autoridades periciales, junto con integrantes del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) escogieron seis de los 15 indicios encontrados para enviarlos a los laboratorios de Innsbruck.
Los resultados llegaron a México el 19 de junio.
“Para mayor certeza, los resultados de Innsbruck fueron analizados también por el Equipo Argentino de Antropología Forense, que terminó su revisión el 4 de julio, concluyendo de forma coincidente que una de las piezas óseas enviadas al laboratorio de Innsbruck pertenece al estudiante normalista Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, de forma indubitable, correspondiente a una extremidad inferior”, informó Gómez Trejo.
Dijo que en breve se enviarán otros restos a la Universidad de Innsbruck.

EAAF y GIEI, aliados imprescindibles

Por separado, los forenses argentinos en un comunicado informaron la concordancia con los resultados reportados desde Innsbruck. También afirmaron que el dictamen de genética complementario que efectuaron –que incluye cálculos estadísticos adicionales sobre probabilidad de parentesco y genética poblacional– dio como resultado un porcentaje de parentesco superior a 99.99 por ciento, teniendo en cuenta las variables estadísticas aplicables a este caso.
El EAAF mencionó que el resto óseo identificado corresponde a un hueso del pie derecho y fue hallado entre el 25 y el 26 de noviembre de 2019. Además, que en la diligencia de búsqueda realizada en la Barranca de la Carnicería, municipio de Cocula, se hallaron más de 100 fragmentos óseos gravemente fragmentados y alterados por exposición a altas temperaturas y correspondientes al menos a dos personas.

Encuentro con la familia de Christian Alfonso

“Estos resultados son extremadamente dolorosos para los familiares del joven Christian Alfonso Rodríguez Telumbre y para las familias de los otros estudiantes. Esperemos que estas nuevas investigaciones continúen un proceso de verdad. El EAAF continuará trabajando en la investigación junto a las familias de los 43 estudiantes, sus representantes legales y la Unidad Especial para el Caso Ayotzinapa de la FGR”, dijo Mercedes Doretti, fundadora y directora para Centro y Norte América del EAAF.
Gómez Trejo dio a conocer que visitó a la familia Rodríguez Telumbre para informarla personalmente sobre la identificación genética del joven, “explicarles cómo sucedió el hallazgo y solventar todas y cada una de sus preguntas y dudas posibles”.
“Quiero recalcar que hemos sido sumamente cuidadosos en la forma de informar y atemperar al máximo los efectos de la revictimización al momento de dar este tipo de noticias”, expresó.
Durante el encuentro con la familia de Christian Alfonso, que se dio en Tixtla el pasado 5 de julio, Mercedes Doretti se conectó de manera virtual para explicar a la familia los resultados de los estudios genéticos que realizó junto con más especialistas.
En diciembre de 2014, la entonces Procuraduría General de la República (PGR) dio a conocer la identificación del normalista Alexander Mora Venancio y, en septiembre de 2015 la de su compañero Jhosivani Guerrero de la Cruz, esta última la desacreditó el EAAF.
Desde ese momento no se volvió a identificar a ningún otro de los jóvenes desaparecidos.
“Hemos roto el pacto de impunidad y de silencio que rodeaba el caso Ayotzinapa”, afirmó Gómez Trejo.
Destacó que aún es necesario fortalecer las líneas de investigación que podrían explicar cómo el fragmento óseo hoy identificado fue llevado hasta el lugar del hallazgo. Para ello, reconoció, será fundamental la colaboración del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) que se reintegró oficialmente a las investigaciones desde principio de este año.
“La Unidad a mi cargo –comentó Gómez Trejo– trabaja para contar con pruebas objetivas que soporten estas líneas y así, a diferencia de lo que ocurrió en el pasado, no precipitará resultados ni difundirá conclusiones que no cuenten con dicho sustento”.

“Se cayó la verdad histórica”, dice Alejandro Encinas y ofrece castigo a los responsables

Se trata de “hechos nuevos, lugares diferentes que confirman otra historia”, resalta el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración. Añade que las autoridades esperan tener más resultados que confirmen la identidad de otros normalistas desaparecidos

Viétnika Batres

El Sur, Ciudad de México

El gobierno de México está comprometido en castigar a los responsables de la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, desaparecidos la noche del 26 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero, afirmó este martes el subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas Rodríguez, luego de que la Fiscalía General de la República (FGR) confirmó la identificación genética del normalista Christian Alfonso Rodríguez Telumbre.
“Se cayó la ‘verdad histórica’. Se abre una nueva a conocerla y para hacer justicia. No vamos a crear una nueva verdad histórica. Queremos castigo a los responsables materiales y a quienes renunciaron a su responsabilidad. Daremos resultados”, afirmó Encinas en breve entrevista con El Sur.
La identificación del joven Christian Alfonso fue posible debido al análisis de material genético extraído del fragmento de hueso de uno de sus pies, el cual fue hallado en noviembre de 2019 en el paraje Barranca de la Carnicería, municipio de Cocula, Guerrero, y posteriormente analizado por especialistas de la Universidad Médica de Innsbruck, en Austria.
Se trata de “hechos nuevos, lugares diferentes, que confirman otra historia”, resaltó el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración. Añadió que las autoridades esperan tener más resultados que confirmen la identidad de otros normalistas desaparecidos.
“Ha habido otros hallazgos en la misma zona, los cuales, una vez que los peritos señalen si son susceptibles de identificación genética, serán enviados a Innsbruck en cuanto se abran las fronteras”.
Encinas comentó también del momento en que se le comunicó a la familia Rodríguez Telumbre el resultado del laboratorio genético.
“Se les informó digna y oportunamente. Primero, el domingo, a la familia de Christian Alfonso por parte de Omar Gómez (FGR), Mercedes Doretti (Equipo Argentino de Antropología Forense), Santiago Aguirre (Centro Prodh) Ximena Antillón (Fundar México) y yo. Hoy, martes, se informó a los integrantes de la comisión de madres y padres y con apoyo del Centro Prodh, a los demás.
“Reiteramos nuestro compromiso de siempre informar con la verdad a los padres. Quieren justicia, están muy tristes, pero firmes en seguir su lucha”.

“La única verdad es que no hay verdad”

En conferencia de prensa la tarde de este martes –después de una reunión cerrada con los padres de los normalistas desaparecidos y la titular de la Segob, Olga Sánchez Cordero–, Encinas Rodríguez declaró que los resultados de la FGR no sólo han derrumbado la “verdad histórica” inventada por el gobierno de Enrique Peña Nieto, sino que crearon una nueva ruta para investigar los hechos ocurridos en Iguala hace casi seis años.
“Lo dije desde un principio: la única verdad es que no hay verdad”, expuso el subsecretario.
Con las investigaciones “fuertemente soportadas en evidencias y testimonios” se abre una ruta para conocer verdaderamente qué pasó con los 43 normalistas. “Nosotros no vamos a inventar una nueva verdad histórica, sino a hacer justicia”.
Advirtió que habrá descalificaciones de los “defensores del viejo régimen” a los avances logrados, aunque estén plenamente fundamentados en la corroboración de pruebas de ADN, testimonios e indagatorias que ha hecho la Unidad Especial de Investigación y Litigación para el caso Ayotzinapa, encabezada por Omar Gómez Trejo, pero se culminará con el castigo a los responsables.
“Vamos a continuar con esta ruta y a asumir el compromiso de que nosotros no vamos a inventar una nueva ‘verdad histórica’ porque lo que tenemos que hacer es justicia con los familiares”.
“Refrendo el compromiso asumido por el presidente de la República para que todas las instituciones de la administración coadyuven con la Fiscalía, para encontrar la verdad de los hechos y castigar a los responsables, tanto los materiales como los que incurrieron en omisión creando una verdad que no existía”, insistió.
El próximo viernes el presidente Andrés Manuel López Obrador se reunirá a las 10 dela mañana en Palacio Nacional con familiares de los 43 normalistas desaparecidos para dar continuidad a los compromisos que asumieron el jefe del Ejecutivo federal, el fiscal general de la República, Alejandro Gertz, y el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Arturo Saldívar.

Cumplir sin engaños ni falsas expectativas

A nombre de la actual administración, el subsecretario lamentó nuevamente los hechos ocurridos y se solidarizó con el dolor de María Telumbre y Clemente Rodríguez, padres del joven Christian Alfonso –cuyos restos fueron identificados–, así como de sus hermanas Carmen, Fabiola y Maribel.
“Por dolorosa que sea la verdad, siempre vamos a cumplir con nuestra responsabilidad sin engañar a nadie ni generar falsas expectativas, cumpliendo con nuestra las responsabilidad de la investigación de los hechos”, externó.
Encinas apuntó que los mecanismos de investigación en este caso deben servir para la búsqueda, identificación y retorno de cientos de personas que también están desaparecidas en el país.
“La práctica de desaparición forzada por muchos años fue una práctica sistemática y regular de diversas autoridades, y que lamentablemente se extendió a la actividad delictiva en la desaparición por particulares”.
Por ello, reiteró el llamado a la sociedad a romper el pacto de impunidad y silencio que hizo anteriormente López Obrador y que “ya rindió frutos”.
“Esperamos seguir contando con el apoyo de la sociedad, de testigos, de personas que participaron o tuvieron conocimiento de estos hechos para profundizar en las indagatorias y tener mayores resultados en el más corto plazo posible”, manifestó.

Habrá castigo para
los culpables

Alejandro Encinas resaltó en la rueda de prensa el esfuerzo de la FGR, así como de l grupo de antropología forense de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes, el cual se sumó de nuevo hace varios meses a las indagatorias.
En la breve entrevista con El Sur, se le preguntó qué pasará con los numerosos implicados que han sido liberados hasta el momento.
“Ya veremos. El que los hayan liberado no implica que se libren de la ley”, respondió.
Respecto al amparo concedido a José Ángel Casarrubias Salgado, El Mochomo, presunto líder de Guerreros Unidos, que no anula su arraigo en Ciudad de México, Encinas aseguró que “será consignado oportunamente”.
Y ya que uno de los dos autores intelectuales de la “verdad histórica”, Tomás Zerón de Lucio, está prófugo y hay una orden de captura internacional en su contra girada por la FGR, se le preguntó al subsecretario que va a pasar con el otro, el entonces procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, a lo que contestó sucintamente que el caso está “en revisión”.

 

Tenía 19 años, era tímido y quería ser agrónomo el normalista recién identificado

Christian Alfonso Rodríguez Telumbre desapareció cuando tenía 19 años cumplidos, quería ser agrónomo, en 2014 concursó para entrar a la Normal Centenaria del Estado Ignacio Manuel Altamirano en Chilpancingo, así como en la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, donde finalmente comenzó sus estudios.
Se graduó de la preparatoria de la Universidad Autónoma de Guerrero con un promedio de 8.7, y es el único varón de cuatro hijos de la joven pareja de esposos, Clemente Rodríguez y Luz María Telumbre.
Sus padres lo recuerdan como un niño muy serio, incluso tímido, que se alejaba de la gente, y que superó esa condición con la danza. En secundaria se integró a los bailables escolares, y en poco tiempo comenzó a participar en los fandangos dominicales en el Ayuntamiento. Participaba en el grupo de danza folclórica Xochiquetzal.
Cuando entró a la Normal de Ayotzinapa se integró al Club de la Danza para evitar las acciones de colecta de dinero y toma de autobuses, donde se exponen a riesgos frente a los automovilistas, a los policías o a los militares en las carreteras, pero el normalista se quedó con el común de los estudiantes, dijo su papá. (Redacción / Chilpancingo).

“Queremos asimilar nuestro dolor”, dicen en su casa en Tixtla familiares de Christian

La casa de la Familia Rodríguez Telumbre se encontraba solitaria luego de la conferencia de la Fiscalía General de la República, donde informó que los restos de uno de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos son de Christian Alonso Rodríguez Telumbre.
Sus padres Clemente Rodríguez y Luz María Telumbre llevan 5 años y 10 meses marchando y luchando para exigir la aparición con vida de su hijo Christian, que desde la noche del 26 de septiembre del 2014 no regresó a su casa.
“No queremos hablar” dijo un familiar, “espero que entiendan, queremos asimilar nuestro dolor y luego platicar” expresó mientras un grupo de reporteros llegó a la vivienda situada en el callejón de Las Cuevitas en Tixtla.
Las calles eran vigiladas por patrullas de la Policía Municipal, desde el momento en que los reporteros entraron fueron monitoreados y seguidos hasta la vivienda donde creció el normalista.
El lunes, Clemente Rodríguez fue hostigado por un grupo de autodefensas que opera en Tixtla y que porta las siglas de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria (CRAC-PC), lo retuvieron “sin saber el motivo”.
Uno de los vecinos cuenta que pudo “ser porque el domingo llegaron varias camionetas de la Guardia Nacional (a la vivienda de Clemente) y los halcones (informantes del crimen organizado) se pusieron alertas, quizás querían saber por qué había llegado la autoridad y no se habían enterado”.
El domingo Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, y Omar Gómez Trejo, titular de la Unidad Especial de Investigación y Litigación para el Caso Ayotzinapa llegaron a la calle Lázaro Cárdenas de la colonia Antonia Nava de Catalán, para informar a la familia Rodríguez Telumbre que el Instituto de Genética de Innsbruck, en Viena, encontró el ADN de Christian Alonso en uno de los restos enviados hace más de tres meses.
En la casa de Christian Alonso las puertas seguían abiertas como es habitual, su madre se dedica a la venta de tortillas y la gente entraba y salía con ellas. Nadie comentaba nada, el silencio era total.
Su padre vende garrafones de agua, aunque es un hombre de pocas palabras siempre estaba al frente de las protestas y los enfrentamientos contra policías y militares, un pañuelo verde para ocultar su rostro y el cartel de la foto de su hijo lo identificaban.
Christian Alonso Rodríguez Telumbre tenía 19 años cuando lo desaparecieron, su padre le aconsejó que entrara al grupo de Danza de Ayotzinapa “para evitar el activismo político”, pero no lo hizo.
La noche del 26 de septiembre del 2014 fue desaparecido junto a 42 de sus compañeros por el grupo criminal Guerrero Unidos y cinco años después sus padres siguen buscando justicia. (Lenin Ocampo Torres / Tixtla, Guerrero).

 

Impactó a los padres la identificación de Christian Rodríguez pero el caso no está cerrado: Vidulfo

“Falta mucho por hacer” y se tiene que detener a muchas autoridades federales y del estado, que de manera directa o indirecta participaron en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, dice el abogado

Jacob Morales Antonio

Chilpancingo

El abogado de los padres y madres de los 43 normalistas desaparecidos, Vidulfo Rosales Sierra dijo que la identificación de los restos de Christian Alfonso Rodríguez Telumbre impactó a todos los padres y madres, que la exigencia de presentación con vida de los estudiantes continúa, que el nuevo gobierno apenas está dando los primero resultados “pero falta mucho por hacer”, y que “el caso no está resulto”.
“Es una dolorosa noticia, pero objetiva. Es una noticia fuerte que tiene un impacto principalmente en la familia, en el movimiento que exige la presentación con vida de los normalistas, pero es una noticia objetiva”, dijo además a la agencia Reforma.
El abogado indicó que estos resultados son debido a la lucha de los padres de familia durante estos casi 6 años del movimiento, y que se refleja en la voluntad política del presidente Andrés Manuel López Obrador, pero “falta mucho por hacer” y se tiene que detener a muchas autoridades federales y del estado que de manera directa o indirecta participaron en los ataques en septiembre de 2014.
“El caso no está resuelto, hay mucho trabajo por delante. Eso se va a manifestar en la reunión que se tenga con el presidente el viernes” que será de manera presencial en la Ciudad de México, respetando todos los protocolos sanitarios debido a la pandemia de la enfermedad Covid-19.
Reconoció que los resultados de la investigación impactan a los padres de familia, principalmente a los familiares del estudiante identificado, y se resiente en el movimiento que acepta estos primeros resultados “muy significativos”, luego de una ardua búsqueda de campo el año pasado, a partir de solicitudes de información, nuevos datos y elementos que se tuvieron poco a poco.
Rosales Sierra insistió en que el caso no está resuelto y que las autoridades deberán de seguir hasta encontrar el paradero de los 41 estudiantes que aún se desconoce dónde están.
Dijo que los padres mantendrán la exigencia de hallarlos con vida, que corresponderá al Estado ubicar el paradero de los normalistas y las condiciones en que se encuentran.
Abundó que en el caso de los restos identificados de Alexander Mora Venancio, lo que no se acepta es el proceso de búsqueda y el procesamiento de las autoridades de la entonces Procuraduría General de la República (PGR) a cargo de Jesús Murillo Karam, porque no está dilucidado dónde se localizaron los restos y la cadena de custodia que se siguió.
El abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan indicó que se enviaron otros restos para su identificación a la Universidad de Innsbruck, y que están en proceso de análisis pero que no podía dar detalles ni la cantidad.
Respondió que todo apunta a que los estudiantes una vez que fueron entregados a los integrantes del grupo criminal Guerreros Unidos, fueron separados en grupos, como lo informó la Fiscalía General de la República.
Agregó que con estos nuevos resultados se cae la “verdad histórica” del ex presidente Enrique Peña Nieto.
El abogado contestó que no hay certeza de que todos los normalistas hayan sido incinerados, “si tuviéramos 15 o 20 restos incinerados bajo esa mismas circunstancias y mismas condiciones probablemente ese podría ser el final de los estudiantes, pero hay que seguir la búsqueda y no sabemos si todos habrían tenido el mismo destino, todo eso no se tiene dilucidado”.
Agregó que si el gobierno actual dice que ya no se puede seguir, tiene que dar datos irrefutables de que así sucedió con todos los estudiantes, tendría que estar respaldada por un grupo de datos, de pruebas y de análisis científicos que digan que así paso”.
De la detención de líder de Guerrero Unidos, José Ángel Casarrubias Salgado, El Mochomo, dijo que posee información privilegiada de los estudiantes, “él tiene información, es clave. El gobierno deberá de trabajar para establecer las comunicaciones necesarias con esta persona para obtener información del paradero”.

Desde 2016 Los Otros Desaparecidos exhuma cuerpos en barranca de la Carnicería, Cocula

En enero de 2016 miembros del colectivo Los Otros Desaparecidos de Iguala con peritos y antropólogos de la extinta Procuraduría General de la República (PGR) exhumaron de dos fosas clandestinas en la Barranca de la Carnicería, Cocula, cuatro osamentas de hombres, que es la misma zona en la que en noviembre pasado la Unidad Especial de Investigación y Litigación para el Caso Ayotzinapa (UEILCA) localizó restos óseos del normalista Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, uno de los 43 estudiantes desaparecidos en septiembre de 2014 en Iguala.
El fiscal especial para el caso Ayotzinapa, Omar Gómez Trejo informó ayer que como parte de las más de 20 acciones de búsqueda de la Comisión Presidencial creada en la actual administración federal, en la diligencia judicial del 21 al 29 de noviembre pasado, en la Barranca de la Carnicería, a un kilómetro de distancia del basurero municipal de Cocula, se recuperaron “15 indicios”.
Agregó que luego del análisis de seis de esas piezas óseas en el Instituto de Genética de la Universidad de Medicina en Innsbruck, Austria, el 19 de junio pasado se confirmó que uno de los fragmentos, correspondiente a una extremidad inferior, corresponde al estudiante Rodríguez Telumbre, desaparecido en los ataques de septiembre de 2014.
En los registros de El Sur consta que como parte del acompañamiento a familiares de desaparecidos, el 3 de enero de 2016, el grupo de búsqueda de entierros clandestinos del colectivo Los Otros Desaparecidos de Iguala, localizó en la Barranca de la Carnicería cuerpos inhumados.
Dos días después, el martes 5 de enero, peritos y antropólogos de la PGR exhumaron de dos entierros clandestinos cuatro osamentas humanas de hombres, los cuales fueron incorporados a su carpeta de investigación y trasladados para su resguardo a la Ciudad de México.
De acuerdo con familiares, la ubicación de esos entierros se logró a través de denuncias anónimas de pobladores de la zona. La Barranca de la Carnicería y el basurero municipal están a ocho kilómetros al sureste de la cabecera municipal de Cocula.
Se informó que las víctimas llevaban al menos un año asesinadas e inhumadas en la zona, de acuerdo con los reportes de los peritos. Hasta esa fecha, los miembros del colectivo Los Otros Desaparecidos habían acumulado 120 hallazgos de cuerpos, indican los registros periodísticos. (Alejandro Guerrero / Iguala).

Lamentan padres la identificación de uno de los 43; los buscan con vida, dice el vocero

Jacob Morales Antonio

Chilpancingo

El vocero de los padres de los 43 normalistas desaparecidos, Felipe de la Cruz dijo que la noticia de que los restos encontrados en una cueva en Cocula son del estudiante Christian Alfonso Rodríguez, es lamentable porque la esperanza de los familiares es hallarlos con vida.
En declaraciones por teléfono luego de la conferencia de la Fiscalía General de la República, informó que ninguno de los padres ni familiares del movimiento a excepción de los padres de Christian Alfonso Rodríguez conocían la noticia de que los restos estudiados en la Universidad de Innsbrukc pertenecen al joven desaparecido el 26 de septiembre de 2014 en Iguala.
Lamentó la noticia pero también dijo que esto está mostrando que hay avances en las investigaciones, se acerca a la verdad de lo que ocurrió y se están comprobando las mentiras del anterior gobierno priista.
“Se está avanzando a la verdad, que es lo que nosotros hemos buscado todo este tiempo, es doloroso porque los queremos vivos”.
Dijo que lo único que supo es que hace dos días una comisión de la fiscalía de la república visitó a Clemente Rodríguez Moreno y a su esposa en Tixtla, donde se les informó de la noticia siguiendo los protocolos establecidos con el gobierno federal.
El vocero indicó que conoce de otros restos que serán enviados a la misma Universidad para ser identificados, pero no sabe cuántos son y por eso reiteró la urgencia de una reunión de los padres de los 43 normalistas y la comisión especial del caso.
Felipe de la Cruz aceptó que esta noticia cambia un poco el movimiento que desde hace casi 6 años exige conocer el paradero de los 43 jóvenes, sin embargo dijo que la exigencia seguirá siendo la misma: continuar las investigaciones y dar con el paradero de los otros 41 estudiantes, luego de la identificación de los restos de dos.
Además, castigo a los responsables de los hechos y de los funcionarios que participaron en la falsa “verdad histórica” porque actuaron con “tanta maldad” y mintieron a los padres, como el ex director de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón de Lucio.