Ejecutan a balazos a un ex comandante de la Policía Preventiva en Petatlán

 

Ayer un ex comandante de la Policía Preventiva de Petatlán fue asesinado de varios disparos y su cuerpo fue levantado por sus familiares quienes decidieron no esperar a las autoridades para las diligencias correspondientes.
Fuentes policiacas dieron a conocer que el asesinato ocurrió poco después de las 11 de la mañana, la víctima fue identificada como Gregorio Jaime Farías, quien se desempeñó como comandante de la Policía Preventiva Municipal durante la administración del alcalde perredista, Antonio Armenta Miralrío.
Según la fuente, la víctima estaba frente a unos establecimientos cerca de la terminal de autobuses cuando hombres armados que circulaban a bordo de un vehículo se detuvieron para dispararle en repetidas ocasiones y enseguida se dieron a la fuga, el ex comandante recibió tres disparos en la cabeza, lo que le provocó una muerte instantánea, al lugar llegaron paramédicos de Protección Civil y Bomberos pero no pudieron hacer nada.
El informante agregó que los familiares no esperaron a que las autoridades llegaran a hacer la diligencia, y subieron el cuerpo a un vehículo particular y se lo llevaron a su domicilio en la cabecera municipal de Petatlán.

Deudos por la granada en Petatlán reclaman a Zeferino que el alcalde no los ayuda




Deudos y familiares de sobrevivientes que convalecen de las heridas provocadas por la granada de fragmentación que estalló el pasado 11 de abril en la feria de Semana Santa en Petatlán le reclamaron a Zeferino Torreblanca que el alcalde de este municipio, Antonio Armenta Miralrío, no les da los recursos económicos que el gobierno estatal envió para los afectados.
Antes de que empezara el acto de clausura de la novena reunión nacional sobre iguanas, que se llevó a cabo en el rancho Las Margaritas, donde funciona una Unidad de Manejo Ambiental, en el municipio de Petatlán, Torreblanca fue alcanzado por los deudos y familiares de los heridos.
La señora Rosa Elmira Corona Romero, mamá de Vidal Suazo Corona, muerto en el lugar, y del sobreviviente Sander Suazo –uno de los heridos más graves en el ataque pues su pierna derecha estuvo a punto de desprendérsele–, le habló al gobernador antes del acto de clausura de la reunión sobre las iguanas.
La mujer traspasó a los guardaespaldas de Torreblanca, se presentó y abordó el tema: “Mi hijo el que murió estudiaba en la Universidad de Morelia, el cual me lo calumniaron injustamente y yo quiero una aclaración señor gobernador, si usted nos prestó ayuda, ¿sí la mandó o no la mandó?, porque estamos haciendo un gasto bastante y no hemos trabajado para atender a nuestros hijos”.
El reclamo de doña Rosa Elvira fue porque en su momento, el director de la Policía Investigadora Ministerial (PIM), Érit Montúfar, reportó que el ataque con granada se debió a que momentos antes Vidal Suazo, junto con sus hermanos Sander y Candelario habían reñido con los agresores. “Yo quiero decir que nada de eso es cierto, mi hijo Candelario ni siquiera estaba en México cuando esto pasó”, dijo la señora a los reporteros antes de abordar al gobernador.
Del alcalde de Petatlán Armenta Miralrío, el gobernador le dijo a la mujer que “se ha estado ayudando, lo que pasa es que también al presidente municipal le ponen requisitos”.
–Ni un requisito, señor gobernador –le interrumpió la señora.
–No, no, déjeme decirle, nosotros le ponemos requisitos a él.
–Pero se le ha dado, y nosotros lo hemos ido a buscar y nunca nos ha recibido.
–No, no, no, escúchenme para que no haya malos entendidos; al señor que se le apoye nosotros tenemos que pedirle requisitos nosotros, porque así lo exige el Congreso local, aquí no se entrega el dinero nada más porque sí.
–Nosotros lo sabemos –interrumpió Liseth Abarca Martínez, hermana de Emigdio Abarca, otro de los sobrevivientes que convalece en silla de ruedas–, piden facturas, nosotros ya se las entregamos a él (al alcalde Antonio Armenta).
–Sí, nada más que a él le están poniendo requisitos en Chilpancingo –contestó el gobernador– yo tengo que hablar bien, no vengo a limpiarme tan fácil ni dejar el problema, hay que decir las cosas como son.
“Yo les pido también la comprensión porque entiendan que no es fácil; ustedes están pasando por momentos difíciles pero nosotros no podemos resolverlo de la noche a la mañana si no vamos encontrando respuestas dentro de la legalidad y las normas que tenemos”.
–Pero queremos saber si hay un apoyo o no lo hay –insistió doña Rosa Elvira.
–Se está apoyando –respondió el gobernador.
–A ella ya se le dieron 59 mil pesos –terció el alcalde Armenta.
–Ah, bueno –dijo Torreblanca.
Entonces, se vino la discusión, porque doña Rosa Elvira le reclamó al edil:
–Tú dices que pagaste la vida de dos muertos; tú sabes que la vida no vale 60 mil pesos.
–Mire señora, los decires son muchos – contestó el alcalde.
–Ponte bien los pantalones Tony; yo no iba a venir señor gobernador, pero me dolió tanto lo que dijo volvió la señora.
–Yo no creo que valga la pena que estemos jugando con vidas –dijo Torreblanca–; el gobierno tiene la intención de ayudar pero tampoco podemos ir más allá.
–Pero no tiene por qué lastimarnos señor gobernador, no fueron animales los que se murieron.
–Yo voy a hablar con ellas directo –ofreció Antonio Armenta.
–Estoy de acuerdo, yo recojo su inquietud, me parece que es incorrecto que estemos discutiendo en cuestiones de esa naturaleza –cortó el gobernador.
Ante el trato que recibieron, las mujeres, entre ellas Carolina Palma Suástegui, quien fue madre de René Mora Palma, otro de los muertos en la explosión, expusieron pancartas en las que exhibieron sus reclamos.
Doña Carolina Palma se dolió “de lo mentiroso que es el presidente municipal, dijo que a mí me dio 60 mil pesos para ayudar con los gastos del funeral y lo único que recibí fue la caja para meter a mi hijo; tuvieron que traérmelo de Zihuatanejo a Petatlán en una camioneta porque Antonio Armenta no nos ayudó ni con la carroza, es un mentiroso, dice puras mentiras”.
Por su parte, la señora Rosa Elmira dijo: “Esperábamos más del gobernador, es una lástima porque lo que nosotros queríamos era que nos escuchara; no estamos peleando el dinero, eso pasa a un segundo plano, lo que queríamos era que supiera que Tony se está quedando con el dinero que el gobierno mandó como ayuda, pero se puso de su parte”.
Dijo que su hijo Sander todavía necesita más operaciones para injertarle piel en su pierna derecha, “cada injerto cuesta 40 mil pesos, es dinero que juntamos con sacrificios y no se vale que Tony se aproveche de la desgracia de muchas familias que salieron afectadas para desviar el dinero y gastárselo en sabrá Dios qué cosas”.

El alcalde de Petatlán incumple acuerdos sobre pago de licencias, afirma la Canaco




El presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en este municipio, Baltazar Vázquez Novoa acusó este viernes al alcalde Antonio Armenta Miralrío, de incumplir un acuerdo con los comerciantes en torno al pago de licencias de funcionamiento, pues ahora “se echa para atrás y se esconde de nosotros”.
El dirigente de los comerciantes dijo que en febrero, luego de varias reuniones con Armenta para encontrar una solución al pleito legal que los comerciantes han tenido con el Ayuntamiento debido a las altas tarifas en el cobro de las licencias de funcionamiento y refrendos, “llegamos a un acuerdo de que se estipularía una cuota fija para todos los negocios y que se cobraría ésta de acuerdo al giro”.
Según Vázquez se convino entonces en que la Canaco “integraría paquetes de comerciantes para pagar y recibir las licencias y en un primer paquete fueron 83 comerciantes los que pagaron la cuota estipulada, más adelante en marzo volvimos a meter a 30 más y es la fecha en que no nos han entregado una sola de las 113 licencias en total”.
El dirigente de los comerciantes dijo que en varias ocasiones ha ido con el tesorero del Ayuntamiento, Francisco Sánchez, quien le ha puesto “pretextos tontos, como que la imprenta hizo mal las licencias o que al alcalde se le ha complicado firmarlas porque nunca tiene tiempo, ya que sólo acude al Ayuntamiento en las noches, para que así la gente deje de estarlo chingando”.
Sin embargo, señaló Vázquez, parece que “Armenta decidió desconocer el convenio que hizo con los comerciantes organizados porque la cuota que él mismo le dio el visto bueno ahora le parece que es muy poco y que debemos de pagar más y que por eso no nos va a dar ninguna licencia ni refrendos, eso no es ni de hombres de palabra ni es propio de un presidente municipal”.
Ahora –acotó–, el director jurídico del Ayuntamiento, Horacio Lluck “nos ha empezado a mandar requerimientos de pago a nuestros negocios cuando conoce perfectamente que hay un convenio que el propio alcalde está violando, eso tampoco se vale”.
Añadió que de continuar con esta presión por parte del gobierno municipal, “no nos va a quedar de otra más que acudir de nuevo al Tribunal de lo Contencioso Administrativo para meterles demandas individuales y entonces no le vamos a pagar ni un solo peso”, expresó.

El alcalde de Petatlán no apoyó a los heridos por la granada, se queja un sobreviviente

 

El sobreviviente del ataque con una granada ocurrido en abril en la feria de este municipio, Emigdio Abarca Martínez reprochó este viernes que el presidente municipal de Petatlán, Antonio Armenta Miralrío, “sólo haya utilizado nuestra desgracia para figurar públicamente, pues pese a que se comprometió a que nos ayudaría a cubrir nuestros gastos médicos, ahora dice que si quiere, no tiene por qué ayudarnos con nada”.
En entrevista con El Sur Abarca Martínez dijo: “así como el señor Tony Armenta (como le dicen al alcalde) se sacó fotos y llevó a su periodista cuando fue a verme al hospital en Acapulco, así yo también quiero decirle a todos los lectores de su periódico que este señor nos mintió a todos los heridos del granadazo, nos dijo que nos iba a apoyar y ahora que le llevamos las facturas, nos dice que no tiene dinero”.
La madrugada del 12 de abril, en un bar propiedad del chofer del alcalde, ubicado en la feria de Semana Santa de Petatlán, 30 personas salieron heridas cuando fue arrojada una granada de fragmentación.
A consecuencia de ese ataque, murieron René Mora y Vidal Suazo Corona, mientras que el hermano de éste último, Sander Suazo y Marco Antonio Nájera junto con Emigdio Abarca fueron trasladados en helicóptero de la Secretaría de Marina al puerto de Acapulco –a petición del gobernador Zeferino Torreblanca–, por ser los heridos más graves.
Abarca contó que el alcalde de Petatlán lo visitó ocho días después del ataque y se comprometió a cubrir los gastos médicos, “cuando fue allá nos dijo que el gobierno le había enviado 200 mil pesos para que ayudara a los heridos del granadazo y que todo lo que gastáramos de medicamentos pidiéramos la factura a nombre de la Secretaría de Finanzas del estado”.
“Cuando me dieron de alta, pudimos facturar 20 mil 266 pesos que ahora nos dice que no nos va a pagar completo porque no tiene dinero porque ya pagó los dos muertos pues a cada familia de los difuntos les dio 60 mil pesos; eso fue lo que para él valió la vida de los dos jóvenes que murieron ”, indicó.
El joven convaleciente, quien tiene placas de fierro en sus piernas y en el dedo anular de la mano izquierda, dijo que su hermana Liseth supo por informes del tesorero del Ayuntamiento que el gobierno estatal envió un cheque más por 116 mil pesos para ayudar a los heridos, y que el alcalde le dijo que le dejara las facturas y que sólo le daría 5 mil pesos “si queríamos, que si no, nadie lo podía obligar a que nos ayudara”.
Dijo que hoy sábado, durante la gira que el gobernador Zeferino Torreblanca hará por Petatlán, “voy a buscarlo para agradecerle su apoyo y decirle que lamentablemente Tony Armenta no sabe cumplir con su palabra”, expresó.