Jorge Nava

El dirigente de la Coordinadora Estatal de Transportistas Independientes de Guerrero (Cetig), Juan Mendoza Tapia, denunció que dentro de la Secretaría de Protección y Vialidad (SPV) “prevalecen actos de corrupción”.
Ayer por la noche, vía telefónica, Mendoza Tapia informó que, tras acudir a tratar de liberar el taxi pirata número 7462 –decomisado junto a otros 24 por la Policía Preventiva el 7 de octubre de 2005, después de una gresca entre choferes de urbanos de Pie de la Cuesta– descubrió que éste había sido desvalijado y que sus accesorios los porta un automóvil particular de un policía preventivo.
Abundó que en el auto del policía –de nombre Daniel Agatón Torres, aseguró– estaban colocados espejos laterales cromados, un alerón cromado (accesorio para la parte trasera de un vehículo), y las bocinas, todos, del taxi 7462.
Precisó que ubicaron el auto a las 10 de la noche de ayer, cuando estaba estacionado afuera de la SPV, después de que minutos antes platicaron sobre el robo con el encargado de despacho de esa dependencia, Salvador Vargas Villanueva, quien les pidió que buscarán pruebas, porque les aseguró que no protegería a nadie.
Mendoza Tapia adelantó que presentarán una denuncia por robo ante la agencia del MP especializada en atención a robo de autos del fuero común.
Observó que además de eso, descubrió que oficiales como Daniel Agatón, roban la gasolina de las patrullas para ponérsela a sus autos particulares, porque encontró varios garrafones.
El dirigente señaló que el policía sólo le indicó que le vendieron esos accesorios adentro de la Policía, y añadió que descubrió más unidades de su organización que están desvalijados.
Esos taxis –actualmente a disposición del juez tercero penal por el delito de pirataje–fueron confiscados por la PP, por orden del delegado de Transporte de la zona urbana, Salvador Melesio Montiel, porque “se constató” que los taxistas estaban trabajando con un mismo amparo.