Integrantes de la asociación civil Grupo ACA preguntaron al director del Instituto Municipal de Planeación (Implan), David Aguilar González, si tiene experiencia en desarrollo urbano y qué hará para que haya un ordenamiento en Acapulco, además de qué acciones se llevarán a cabo para que haya movilidad en el municipio una vez que esté en funciones el nuevo transporte Acabús.
Aguilar González justificó que no sea un ingeniero o arquitecto para ocupar el cargo y precisó: “es la pregunta que más me han hecho y les contesto que por la misma razón de que el presidente de un municipio no es un ingeniero civil o un arquitecto, porque el titular es el que conduce en forma mucho más amplia, pero debe de tener la humildad de preguntarle a los que sí saben”.
Aguilar González en la administración pasada fe subsecretario de Planeación y en la sesión informó los proyectos que se tienen pensados en este nuevo gobierno.
Dijo que se planea que la dirección esté ubicada en el centro de negocios Costera 125 y que gestionará ante regidores el tres por ciento que le corresponde del presupuesto de inversión municipal.
Además habló de la empresa Celsol, que instaló las luminarias en Acapulco y que “parece que estafó al Ayuntamiento”.
Por su parte, la arquitecta Andrea Marquina pidió saber si el instituto dependerá de la Secretaría de Planeación o será un organismo descentralizado, porque, dijo, “la persona al frente debe de tener conocimiento profundo en desarrollo urbano, porque lo que más impacta son las obras que se hacen y para evitar ocurrencias o cosas como el puente Bicentenario, el Macrotúnel o el Acabús que no estaban considerados en el Plan Director”.
El acasocio Raymundo Benítez dijo que “a esta mesa todos los invitados que han venido han dado su currículum y no sé porqué hoy es la excepción; debemos saber cuál es su experiencia en urbanización y todo lo que conlleva al área que le compete, porque el desarrollo urbano es un área sensible, queremos saber hacia dónde va Acapulco y esperaba escuchar algo más técnico y proyectos concretos para saber a dónde vamos”.
Alcibiades Fajardo criticó que el alcalde Evodio Velázquez no cumplió su promesa de tomar en cuenta a las asociaciones, por ello dijo que no hay confianza de que se tome en cuenta la voz de los ciudadanos; “ojalá no seamos como los miembros del Coplademun que sólo los llaman a firmar”.
Mientras el arquitecto Javier Morales pidió saber qué se hará para evitar que Acapulco crezca con anarquía u “ocurrencias”.
Por su parte, Arturo Flores Mercado preguntó qué se hará para prevenir que más de 35 mil viviendas que están en la zona Diamante se inunden.
Y José Luis Gallegos pidió que el gobierno municipal recupere el dinero que se paga del Derecho de Alumbrado Público a la empresa que instaló las luminarias para dar mejor servicio a los acapulqueños, y aclare si será una dirección o un organismo descentralizado.
En otros temas, la acasocia Margarita Nájera preguntó si hay reglamento de estacionamientos y si el de Tránsito está adecuado para el funcionamiento del Acabús. En tanto, Mónica Corazón indicó que si se habla de un ahorro en papel y de presupuesto, porqué las oficinas se van a un lugar donde que se paga una renta alta, lo que secundó Rubén Huerta, que dijo que “no se tiene cuidado con el gasto del dinero público”.
Aguilar González detalló los proyectos en los que se trabajará como el Atlas de Riesgo, el Plan de Movilidad y el Programa de Mejora Regulatoria, “esperamos que en los primeros 100 días… bueno antes de que acabe el año entreguemos el Plan Regulatorio Urbano, que tendrá carácter de reglamento y hacer una red interna para descender el tortuguismo”.
Respecto a qué se hará para evitar inundaciones en la zona Diamante, explicó que “vamos a trabajar en obras de mitigación y eso no lo puede hacer el municipio, tenemos que tocar puertas y por ello el director del Implan no es necesario que tenga un perfil en específico”.
“El Implan debe de disponer no menos del 3 por ciento del presupuesto de inversión municipal anual. El presupuesto de inversión de 2015 es de unos 860 millones de pesos, de eso nos ponemos 25 millones de pesos anuales y esto no es para el Ramo Mil, de sueldos o salarios, es para obras de presupuesto participativo”, detalló el funcionario, e indicó que gestionará ese recurso con los regidores.
Respecto al transporte Acabús, dijo que “es un proyecto que tiene grandes complejidades y platicaba con el urbanista Domitilo (Soto) de que quiere desembrar la ceiba a pesar de que está protegida” y que empezará a funcionar en mayo. Y “vamos a pedir un informe para mostrarlo a la sociedad acapulqueña”.
Del porqué es una estafa la empresa Celsol, el funcionario indicó: “porque en el contrato de acción pública privada se ofrece que a cambio de la colocación de las luminarias y retener el Derecho de Alumbrado Público se tendría un descuento de pago por concepto de electricidad, sin embargo la Comisión Federal de Electricidad no reconoce la tecnología de esas lámparas”.
Aguilar González aseguró que desconoce quién se quedó con las lámparas, “es la opacidad del contrato y tenemos que trabajar en ello porque son 144 mil luminarias y eso requiere de muchas bodegas y tenemos que ver el contrato”.
Indicó que la situación ya tiene cuatro años y que serán “seis años más si es que no se hace algo con ese contrato”, y que desconocía cómo se encontraba el litigio del Ayuntamiento con la empresa y “como ustedes oyeron pedí a algunos acasocios que nos puedan ayudar y vamos a investigar el estado del litigio”.