Descubren a desconocidos con máquinas que destruían humedales en Zihuatanejo

* Efectúan la AFI y Ecología municipal una inspección en Buena Vista

 * Durante la acción se capturó a cinco personas, pero fueron liberadas por falta de pruebas * Fueron afectados 600 metros cuadrados de humedales y dos bocabarras, una de ellas aún con agua, en la que se destruyó el hábitat de varias especies

Brenda Escobar, corresponsal, Zihuatanejo * Luego de que ecoguardias denunciaron que máquinas deforestaban manglares en la playa de la comunidad de Buena Vista, en Zihuatanejo, elementos de la Agencia Federal de Investigación (AFI), así como personal de Ecología municipal comenzó una movilización, pero no hubo detenidos.

Ayer martes, ecoguardias de la comunidad de Buena Vista avisaron a la dirección de Ecología municipal que en la playa del lugar había máquinas que destruían la zona de humedales, por lo que el jefe del departamento de Inspección, Armando Encarnación Ríos, se apersonó en el lugar y constató lo dicho por los informantes.

Debido a que los dos inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente cumplían una orden de trabajo, Encarnación Ríos pidió apoyo a la PGR para que detuvieran a personas desconocidas que en esos momentos derribaban con motosierras árboles de mangle, de la especie candelilla y botoncillo, y con un trascabo rellenaban dos bocabarras de esteros.

El comandante de la AFI, Francisco Ingram Sánchez del Villar, un grupo de agentes y el titular del Ministerio Público Federal, Nicolás Fernando Rojas López, acudieron al lugar y en el trayecto, en la comunidad de Pantla, aprehendieron por unos minutos, en calidad de sospechosos, a cinco personas que iban a bordo de una camioneta Nissan, pero el director de Ecología, Tomás Muñiz Vera, dijo que no eran ellos y los dejaron ir.

Los federales tomaron fe de que fueron afectados 600 metros cuadrados de humedales y dos bocabarras, una de ellas aún con agua, en la que prácticamente se destruyó el hábitat natural de especies, tales como tortugas blanca y negra, camarón, aves y anfibios.

Se informó que el terreno era propiedad del empresario local de Pantla, Florentino Valencia, quien se lo vendió a tres extranjeros, uno de ellos de nombre Michael Lee Bush, de quien ya el Ministerio Público Federal tomó datos pues no cuenta con la autorización de impacto ambiental para afectar esa área que es zona protegida.