Nuevo emplazamiento a huelga en Global Jeans; sindicalizados piden un bono anual

 

La maquiladora Global Jeans vuelve a estar emplazada a huelga por violación al contrato colectivo de trabajo, y esta ocasión los trabajadores piden un bono adicional anual y advirtieron que si hoy jueves no llegan a un arreglo el viernes colocarán las banderas rojinegras.
Ayer el secretario general de la Sección 20-A –que representan a los trabajadores de la empresa–, Felipe Loyo Malabar, se reunió con los representantes de la maquiladora quienes presentaron una propuesta para que se desistan de la huelga.
El líder sindical explicó que las tres principales demandas de los trabajadores son el cumplimiento de su horario de trabajo, el pago de horas extras y un bono de producción anual.
Dijo que dos de las tres propuestas ya fueron aceptadas por la empresa con excepción de la última, por lo que platicaría ayer con los trabajadores para llevar una respuesta al encuentro que tendrán hoy con los representantes de la maquiladora.
Loyo Malabar adelantó que de no haber acuerdos mañana a las 3 de la tarde se irán a huelga en la maquiladora, instalada en Ciudad Renacimiento desde el 2000 y que es propiedad de Jaime Abadin, José Antonio Fernández Calluela, Rafael Micha y Jacobo Troice, que son los accionistas mayoritarios.
Global Jeans tiene una planta laboral de 500 sindicalizados y 226 administrativos de confianza.
La antigüedad de los trabajadores está entre los seis años y dos meses, mientras que las edades fluctúan entre los 18 y los 50 años, de los que 70 por ciento son mujeres.
En la maquiladora se elaboran diseños de pantalones de mezclilla que exportan a Estados Unidos y que además se distribuyen en diferentes tiendas como Wal Mart.
El 10 de octubre, y debido a la baja en las exportaciones a Estados Unidos –originada por el huracán Katrina–, se despidió “temporalmente” a 300 sindicalizados de las diferentes áreas y sólo quedó habilitada el área de costura, por lo que la empresa estuvo emplazada a huelga.
El 8 de mayo, Loyo Malabar informó que la empresa se niega a pagar horas extras a más de 250 trabajadores del área de Costura –60 por ciento de éstos son madres solteras– y les impedía salir hasta completar su número de prendas que deben producir cada día, con lo que violaba con ello los artículos 66,67 y 68 de la Ley Federal del Trabajo.