Guerra sucia por la tenencia de la tierra entre vecinos de La Esperanza: Kuri Sánchez




En la colonia La Esperanza, ubicada en El Coloso, dos grupos de vecinos disputan la titularidad de los comités ciudadanos. Uno está a favor de la regularización de la tierra con el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) y el otro la rechaza.
En entrevista, el director de Gobernación municipal, Felipe de Jesús Kuri Sánchez, reconoció la existencia de grupos antagónicos en la colonia, los cuales mantienen una guerra sucia.
Uno de los grupos lo representa Sara Sánchez Morales y el otro Juan Salomón Zavaleta López, cuyos seguidores fueron registrados formalmente ante la dependencia como comité ciudadano.
El funcionario informó que cada bando es auspiciado por una regidora, pues mientras al de Sánchez Morales lo apoya la perredista Martha Ramírez Aquino, al de Zavaleta López, en el que se incluyen los ejidatarios de El Cayaco, es apoyado por la regidora –del mismo partido– Maricela Castro Osorio.
El jueves, la vecina Sara Sánchez Morales denunció que ha recibido amenazas de muerte después de que fue señalada como vendedora de terrenos en contubernio con el Infonavit, lo cual rechazó.
Explicó que su grupo está a favor de que regularicen sus predios y aceptaron que pagarán su propiedad al Infonavit, pues reconocen que es el dueño de los terrenos de La Esperanza. Ella y otras 16 personas más han recibido las primeras escrituras.
Pero producto de su resistencia a pagar sus tierras, Salomón Zavaleta comenzó los trámites para registrar a su grupo como comité ciudadano de la colonia y también para dar mayor fuerza su oposición.
Ayer por la tarde 153 personas presenciaron el registro de Juan Salomón Zavaleta López y su comité ciudadano ante Gobernación municipal, en una asamblea donde no hubo protestas de los rivales, informó el subdirector de la dependencia, Pedro Nava Arredondo.
Felipe Kuri dijo que hay desgaste político entre ambos bandos y especificó que el grupo que asumió el comité ciudadano “ha polarizado” el ambiente de la colonia, pues se niega a regularizar la tenencia de la tierra.