Las embarazadas tienen mayor riesgo de tener dengue y complicarse, advierte experto

Un trabajador de Vectores del sector Salud en la la colonia Pensadores de Chilpancingo, donde una brigada fumigó contra el dengue el lunes de la semana pasada Foto: Jesús Eduardo Guerrero / archivo

Alina Navarrete Fernández

Chilpancingo

El especialista en virología y coordinador de la Maestría en Ciencias Biomédicas de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Óscar del Moral Hernández, dijo que las mujeres embarazadas tienen un estado de inmunosupresión natural, por lo tanto, son más susceptibles a contagiarse de dengue y desarrollar la forma grave, conocida como hemorrágica.
De acuerdo con el Sistema de Vigilancia Epidemiológica, a la fecha suman 4 mil 403 casos acumulados de dengue en el estado, de los cuales 2 mil 294, es decir el 52 por ciento, corresponde a mujeres. Mientras, del total de casos acumulados, mil 620 fueron de dengue no grave, 2 mil 589 fueron de dengue con signos de alarma y 194 de dengue grave.
En entrevista con El Sur, al respecto de los casos de dengue en la entidad, el académico declaró que a finales de 2023 se incrementaron “alarmantemente” los contagios, pero también del dengue grave, “no es un problema nada más en Guerrero, ni siquiera en México, es un problema internacional”.
Detalló que hay cuatro serotipos de dengue, “algo que enciende las señales de alarma es cuando circulan a la vez más de uno. De manera normal debería circular uno o cuando mucho dos, pero ahorita, de acuerdo con los últimos reportes de la Secretaría de Salud, en México están circulando los cuatro. Esto es alarmante, porque complica la situación, ya que nos podemos enfermar más de una vez, porque un tipo no te confiere protección contra el otro”.
“A todos los que vivimos en zonas endémicas, como nosotros en Guerrero, alguna vez seguramente ya nos dio dengue. Eso es lo más común, pero el problema es que cuando te da una segunda, una tercera vez, puede ser más grave, hay mayor probabilidad de que desarrollen la forma grave, ese es el otro problema”, resaltó.
Sobre los riesgos que el dengue representa para las mujeres embarazadas, señaló que se trata de una “situación muy especial”, debido a que tienen “un estado de inmunosupresión natural, entonces, al infectarse con dengue, evidentemente, están en mayor riesgo de desarrollar la forma grave, no solamente riesgo para la mujer, sino también para el producto”.
No obstante, “esto depende mucho de la etapa del embarazo en la que se infecte. No es lo mismo que una mujer se infecte en las primeras semanas (del embarazo) que unos días previos al parto o, incluso, durante o en los días posteriores al parto, por la lactancia”.
Puntualizó que si bien una mujer embarazada puede infectarse con el vector, como cualquier otra persona, y desarrollar el dengue normal, que no tiene complicaciones, de acuerdo con las indicaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), “las mujeres embarazadas sí deben de estar bajo vigilancia, de preferencia en hospital, aunque no tengan síntomas de alarma”.
Indicó que las mujeres embarazadas que se contagian de dengue “en cualquier momento, pueden desarrollar esos síntomas de alarma y complicarse, y pueden desencadenar en fatalidades, como decesos o problemas con el bebé, preeclampsia, todas estas complicaciones graves durante el embarazo”.
Recordó que el dengue, que se contagia mediante la picadura del mosquito, tiene un período de incubación de 2 a 7 días, y después, se empiezan a desarrollar los síntomas: “una gran proporción de las personas son asintomáticas, es decir, en una misma familia le puede picar los mosquitos a todos, la mitad desarrollar síntomas y la otra mitad no, uno se complica y tres no, es muy variado”.
“Pero en una mujer embarazada, aun cuando no se detecten síntomas de alarma, como hemorragias, como disminución de plaquetas, etcétera, debe de acudir al médico y debe de estar vigilada (…) las recomendaciones son las mismas que para cualquier persona. Hay que evitar las zonas, los lugares donde se sepa que hay enfermos, cuidarse de los piquetes de los mosquitos, usar repelentes, etcétera”.
Reiteró que “es muy importante en qué semana del embarazo se puede infectar la mujer, porque de eso depende todo, lo más grave es que se infecte unas cuantas semanas o días antes del parto, porque sí puede transmitir el virus a través de la placenta. Sí hay transmisión vertical, aunque no es lo más común. Una mujer embarazada sí puede transmitir el virus al bebé antes de que nazca o transmitírselo durante el parto”.
De acuerdo con Oscar del Moral, “hay reportes, casos clínicos, médicos, donde los daños al bebé pueden ir desde problemas menores, bajo peso al nacer. Desde problemas de conjuntivitis hasta otros más graves, si la infección es durante las primeras semanas, pudiera llegar incluso a darse aborto espontáneo, aunque no es lo común”.
“Lo más común es que si las madres se infectan en los días previos al parto, se complica el parto y se complica en la madre, porque el este virus, cuando desarrolla la forma grave, uno de los problemas graves son las hemorragias. Una madre de por sí pierde mucha sangre en el parto y, entonces, si está infectada con dengue se complica más”, abundó.
Debido a estas circunstancias, por recomendación de la OMS, las mujeres embarazadas deben ser atendidas en un hospital de tercer nivel, pero al no contar con atención médica de ese tipo en Guerrero, es necesario la revisión constante, para que las pacientes puedan ser trasladadas de manera inmediata a otras entidades, como Morelos o Ciudad de México, donde se les proporcionen los cuidados necesarios.
“Una mujer con dengue y con dengue grave deber estar atendida en un hospital de tercer nivel, porque si no tiene esa atención y esa infraestructura, tiene mucho riesgo de morir (…) una mujer embarazada requiere una atención muy especial, obstetras especializados, porque el manejo de la paciente es crítico”, sentenció.
A pregunta expresa, dijo que los casos de dengue se incrementaron porque el Laboratorio Estatal de Salud Pública está en Acapulco y dejó de funcionar muchos meses después del embate del huracán Otis, por lo que la vigilancia epidemiológica estuvo parada. Además, “el cambio climático es una realidad, los incrementos de temperatura, el calor favorece mucho la reproducción del vector, del mosquito”.
Mientras que “la gente tiene la costumbre de almacenar muchísimas cosas en sus patios, en sus casas (…) el gobierno tampoco tiene una campaña, debería de haber una campaña masiva de prevención, de concientización”.
Llamó a la ciudadanía a seguir las recomendaciones correspondientes, pues “esto del dengue es responsabilidad de todos, realmente tampoco podemos echar la culpa al gobierno, la prevención y el cuidado nos corresponde a todos”.

 

Guerrero es el primer lugar nacional en casos de dengue, informa la Ssa federal

Juan Luis Altamirano Uruñuela / Israel Flores

Ciudad de México / Ciudad Altamirano

Guerrero acumula 3 mil 172 casos confirmados de dengue en lo que va del año, según información del Sistema Especial de Vigilancia Epidemiológica de Dengue, de la Secretaría de Salud (Ssa) federal.
La información, con corte al 20 de mayo pasado, indica que Guerrero es el primer lugar en el país en casos de dengue, mientras que en México hay 13 mil 398 casos de dengue confirmados en total.
En Guerrero se mantienen cinco registros de personas fallecidas a causa de dengue en lo que va del año, lo que provoca una tasa de letalidad de 0.25 defunciones por cada 100 casos de dengue, con signos de alarma más los casos de dengue grave.
En el plano municipal, Acapulco es donde se concentra el mayor número de casos de dengue acumulados en el estado, con mil 938 casos en lo que va del año, por lo tanto el sistema le considera como “zona de epidemia”.
Acapulco acumula 920 casos de dengue no grave, una tasa de 108.09 casos por cada 100 mil habitantes; mientras que hay mil 18 casos de dengue con signos de alarma, más los casos de dengue grave, una tasa de 119.61 casos por cada 100 mil habitantes.
Del mismo modo, Marquelia es considerada zona de epidemia, con 12 casos de dengue no grave, 83.19 por cada 100 mil habitantes, y 17 casos de dengue con signos de alarma más los casos de dengue grave, 117.86 por cada 100 mil habitantes.
En la zona de alarma está Azoyú, con dos casos de dengue no grave, 15.53 por cada 100 mil habitantes y 23 casos de dengue con signos de alarma más los casos de dengue grave, 178.64 por cada 100 mil habitantes.
En el caso de Eduardo Neri, son siete casos de dengue no grave, 12.97 por cada 100 mil habitantes, mientras que 78 son casos de dengue con signos de alarma más los casos de dengue grave, 144 por cada 100 mil habitantes.
El resto del estado es catalogado como zona de seguridad, pues hay 241 casos de dengue no grave, 8.71 por cada 100 mil habitantes y 854 casos de dengue con signos de alarma más los casos de dengue grave, 30.88 por cada 100 mil habitantes.
Hasta la semana epidemiológica 20, en Guerrero hay un acumulado de mil 182 casos de dengue no grave, en tanto que mil 882 casos de dengue con signos de alarma y 108 casos de dengue grave.

Suman más de mil 200 los casos de dengue en Tierra Caliente

Hasta la segunda semana de mayo, la región Tierra Caliente sumaba más de mil 200 casos de dengue detectados en diferentes municipios, en una región donde se han registrado decesos relacionados con le enfermedad.
Según el último registro de la jurisdicción sanitaria, los municipios de Coyuca de Catalán, Pungarabato, Ajuchitlán y Zirandaro.
La región Tierra Caliente ha presentado tres decesos relacionados con el contagio de dengue. Las altas temperaturas no han provocado ninguna modificación en la disminución de los contagios, como ocurría en otros años.
En el hospital regional de Coyuca de Catalán hay seis pacientes. Son los mismos familiares los que tienen que comprar el medicamento, que va de paracetamol a algunos antibióticos que han solicitado, en algunos casos, los médicos. Además de la compra de pabellones que se deben traer.
También la alimentación corre a cargo de los familiares, porque no está funcionando el área de alimentos debido a la falta de insumos.
A partir del próximo lunes, en el municipio de Pungarabato comenzarán las jornadas de limpieza de cacharros, con una programación que organizó el centro de salud, junto con el Ayuntamiento.
La jornada tardará alrededor de un mes y tienen el objetivo de recorrer todas las colonias y las comunidades.