17 enero,2019 6:52 am

Inician obras con el Fondo Minero de 2017 en cinco comunidades de Cocula

Funcionarios municipales y operativos de la minera Media Luna dan el banderazo simbólico junto con los Comités Ciudadanos de Desarrollo Comunitario y Participación.
Cocula, Guerrero, 17 de enero de 2019. Funcionarios municipales y operativos de la minera Media Luna dieron el banderazo simbólico a obras con recursos del Fondo Minero de 2017 en cinco comunidades de Cocula, dos de las cuales fueron reubicadas hace tres y dos años respectivamente, a poca de distancia de las operaciones de las empresas Nuevo Real de Limón y Nueva La Fundición.
Además de los comisarios, se informó que fue parte del proceso de selección de obras por la comunidad, un nuevo grupo instituido por la minera el año pasado en nueve poblaciones de influencia para evitar conflictos sociales, los Comités ciudadanos de Desarrollo Comunitario y Participación (Codecop).
La gerente de Relaciones Comunitarias de Media Luna, Bernarda Elizalde, explicó que después del paro de labores y bloqueos a la minera del 3 de noviembre de 2017 al 10 de abril de 2018, consideraron que se debía mejorar la toma de decisiones en la comunidades desde sus asambleas, para que éstas resuelvan qué obras y beneficios esperan de la empresa.
Aclaró que la mina tiene fondos mensuales y anuales para cinco poblados aledaños, dos en el corredor de tránsito y dos más en áreas de exploración, y el Codecop es intermediario entre la comunidad y la empresa, además de facilitador en la toma de decisiones de su comunidad.
Planteó que si la cobertura de obra de la mina es insuficiente se puede gestionar infraestructura del Fondo Minero.
La gerente reconoció que antes de los Codecop, la empresa decidía el apoyo que otorgaba a las comunidades en función de las necesidades que observaba, y no siempre era compartido con el punto de vista de los pobladores, “(ahora) se trata de responder a necesidades locales, como ellos esperan que respondamos”.
Precisó que el Comité se integra por voluntarios que no manejan dinero y los beneficios se entregan directamente a la población en especie, obras o servicios.
De acuerdo con el alcalde de Cocula, Carlos Alberto Duarte Bahena, ésta es la primera ocasión que el director de Obra Pública municipal acude a las asambleas de los pueblos de influencia de la mina, para definir qué obras esperaban del Fondo Minero.
No obstante, en el primer acto político en Atzcala, un vecino cuestionó la pavimentación de 2 mil 400 metros cúbicos sin que haya drenaje en la calle. Molesto, el alcalde lo recriminó porque no se aclaró esa situación antes, ya que no era posible modificar expedientes técnicos aprobados y debían regresar el dinero.
Mientras las autoridades municipales discutían el conflicto con la comisaria y presidenta del Codecop, el gerente de Asuntos Públicos de Media Luna, José Luis Peralta, recordó que el lunes habrá una reunión con la comunidad y ahí podrían encontrar la solución al problema, a fin de comenzar el arranque de las obras según lo planeado.
En el acto público, explicó que es obligación de las mineras en México pagar una suma de dinero como impuestos para integrar el Fondo Minero, que el gobierno federal distribuye a estados y municipios con producción de minerales (oro, plata y platino).
Añadió que, independiente del Fondo y la renta que se paga a los ejidatarios para el uso de su tierras, sin obligación jurídica, la empresa también genera apoyo directo “para ser buenos vecinos”.
Por otro lado, el director de Obras del Ayuntamiento señaló que éste es el último año en que el Fondo Minero será invertido sólo en infraestructura social, porque la nueva administración federal hará cambios a las reglas de operación para invertir el dinero en otros rubros.
De acuerdo con información oficial, el Fondo Minero fue creado para “elevar la calidad de vida de los habitantes en las zonas de extracción minera mediante la inversión física con impacto social, ambiental y de desarrollo urbano positivo”.
En Cocula se invertirán 47.6 millones de pesos del Fondo Minero, en cinco comunidades de influencia directa de la mina, en la cabecera municipal y otras cuatro localidades del municipio.
Sólo en Atzcala se aprobó la pavimentación de 2 mil 400 metros cuadrados de concreto hidráulico, con un costo de 3 millones 376 mil 670 pesos, la construcción de 153 metros lineales de barda de la primaria, por un millón 53 mil pesos, y un techado tipo regional en la misma escuela primaria, por un millón 302 mil pesos.
Real de Limón y La Fundición, pueblos urbanizados
Después, la comitiva se dirigió al arranque de obras en los poblados  Real de Limón y La Fundición, reubicados en 2015 y en 2016, porque se encontraban en terrenos que ahora ocupa la mina.
Distinto a los comunidades rurales de Guerrero, Real de Limón y Fundición fueron diseñados por la mina con trazos urbanos: viviendas uniformes de tabique y teja, amplias calles, espacios de áreas verdes, juegos infantiles, canchas deportivas, escuelas e iglesias. Además cuentan con electricidad, agua entubada, drenaje, y la carretera, aún sin pavimentar, es muy accesible porque es rastreada y regada (para que no levante polvo) constantemente por una brigada de la mina.
Los terrenos por vivienda son amplios, de 500 metros cuadrados (30 por 20 metros), sin embargo parecen reducidos para una casa, corrales de animales, plantas y algunos árboles frutales que mantienen las familias.
Para compensarlo, personal de la mina explicó que las familias recibieron además de la vivienda, otro terreno de 500 metros en las inmediaciones de la población.
Los pueblos sólo están separados por una barranca y diferencias políticas, según los mensajes de la autoridades municipales en el acto político en La Fundición.
Desde su ubicación se observa a unos dos o tres kilómetros de distancia, en línea recta, una gran falda de cerro hecha con tierra de desecho que la mina que se lanza desde lo alto, y encima sobresale un nube constante de polvo, por la caída de la tierra.
Los vecinos indicaron que el martes la mina estaba tirando poco desecho, que por lo general sólo se observa la nube de polvo en lo que antes fueron grandes barrancas.
En Real de Limón se construirán con el Fondo Minero cuatro techados tipo regional de 630 metros cuadrados cada uno, con un costo de 5.2 millones de pesos; además baños públicos y luminarias en el parque central por 667 mil pesos.
El director de la escuela Amado Nervo solicitó también un intendente. Aclaró que antes del actual ciclo escolar atendió solo a 42 alumnos, y el 2018 llegó una maestra pagada por el municipio y un maestro interino de la Secretaría de Educación Guerrero.
El alcalde adelantó que hay pláticas con la mina para que “probablemente absorba el gasto de una maestra, y el Ayuntamiento cubra el pago del trabajador de intendencia.
En Fundición, las obras programas son dos techados en la primaria y el jardín de niños por 2.6 millones de pesos, y 60 metros lineales de una barda perimetral por 432 mil pesos.
En la cabecera municipal se prevé la construcción de tres aulas por 2 millones de pesos, y tres pavimentaciones de concreto hidráulico en la calles Olivo, Allende y Barrio de San Bartolo por 5.59 millones de pesos.
Texto: Lourdes Chávez / Foto: Jesús Guerrero