23 octubre,2021 12:17 pm

Investiga FIFA a México por el grito homófobo lanzado en los duelos contra Canadá y Honduras

“Bajo la línea de cero tolerancia a la discriminación y la violencia en el futbol, un número de asociaciones miembro fueron castigadas por actos discriminatorios de sus respectivas aficiones”, publicó ayer la FIFA, tras sancionar a varias federaciones del mundo.

El próximo juego oficial calendarizado en el país es el del 30 de enero contra Costa Rica, en la décima fecha del Octagonal

Ciudad de México, 23 de octubre de 2021. La posibilidad de la enésima multa o de disputar partidos a puerta cerrada cimbra a la FMF y a la Selección Mexicana, debido al grito homófobo en los partidos contra Canadá y Honduras.

La FIFA abrió una nueva investigación luego de que el “eeehhh… puuuto” se escuchara en los partidos de Eliminatoria Mundialista celebrados en el Estadio Azteca.

“La FIFA puede confirmar que su Comisión Disciplinaria ha abierto procedimientos en contra de la Federación Mexicana de Futbol en relación con ambos partidos”, informó a Grupo Reforma un portavoz del organismo.

El juego contra Canadá incluso fue interrumpido brevemente, como dicta el protocolo antidiscriminación. Frente a Honduras, las expresiones fueron más tenues e incluso fueron lanzadas por mera diversión, ya cuando el Tricolor ganaba 3-0.

La afición no erradica la palabra, pese a que la Selección Mexicana arrancó la Eliminatoria a puerta cerrada, contra Jamaica en el Azteca el pasado 2 de septiembre, como parte de la sanción por el grito durante dos partidos del Preolímpico, en marzo pasado. El castigo pudo ser peor, pero procedió la apelación de la FMF para que la FIFA rebajara el veto de dos partidos a uno solo.

El próximo juego oficial calendarizado en México es el del 30 de enero contra Costa Rica, en la décima fecha del Octagonal.

No obstante, la FIFA ha reconocido los esfuerzos de la FMF para erradicar el grito considerado homófobo. De hecho, el presidente Gianni Infantino calificó como una “costumbre idiota” dicha expresión.

Texto: Édgar Contreras / Agencia Reforma