22 mayo,2024 5:50 am

La crisis diplomática entre Argentina y España

Gaspard Estrada

 

El pasado fin de semana, el presidente de Argentina, Javier Milei, viajó a Madrid, España, para ser uno de los principales oradores de un mitin político organizado por el partido de extrema derecha VOX, en el marco de la campaña para las elecciones europeas, que se llevarán a cabo el próximo 9 de junio.

Durante su discurso, el presidente Javier Milei acusó a la esposa del presidente del Gobierno de España Pedro Sánchez, Begoña Gómez, de ser “corrupta”, debido a acusaciones de su implicación en un escándalo de tráfico de influencias (la fiscalía española ha archivado la investigación en cuestión porque no había pruebas de ello).

El gobierno español rechazó rápidamente los comentarios y exigió una disculpa pública. El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares se reunió el lunes con el embajador argentino en España, Roberto Bosch, tras pedirle que se disculpara en nombre de Milei. La posición de Bosch fue que las autoridades argentinas confían en que las relaciones entre ambos gobiernos “puedan reconducirse para ponerlas en línea con lo que nuestras sociedades nos demandan” tras las elecciones al Parlamento Europeo.

Ante esta situación, Albares llamó inicialmente a consulta sine die a la embajadora María Jesús Alonso Jiménez el domingo, lo que significaba que debía regresar a su país de origen indefinidamente. Alonso Jiménez abandonó Argentina el domingo por la noche. Ayer, el canciller anunció que el país retirará definitivamente a su embajador en Argentina hasta que el gobierno argentino se disculpe con su par europeo.

La tensión entre Argentina y España viene desde principios de mayo, cuando el ministro de Transportes español, Óscar Puente, sugirió que Milei consumía drogas. Puente declaró posteriormente que había cometido un “error”, afirmando que no era consciente de las repercusiones que tendrían sus comentarios. Sin embargo, en vez de dar este asunto por terminado, Javier Milei ha querido doblar su apuesta, y escalar el conflicto diplomático con España. De hecho, no es la primera vez que Milei crea diferendos diplomáticos con líderes de otras naciones. Durante su campaña presidencial del año pasado, describió al líder brasileño Lula da Silva como un “izquierdista salvaje, que apoya dictadores, viola los derechos humanos, autócratas con las manos manchadas de sangre”. En enero, calificó al presidente colombiano Gustavo Petro de “asesino comunista” y en febrero dijo que Petro era una “plaga letal”, lo que llevó a Colombia a retirar también a su embajador en Buenos Aires. Tras una serie de consultas con la canciller argentina, Diana Mondino, el representante colombiano regresó a Argentina, pero las relaciones bilaterales no han vuelto a su nivel habitual, de la misma manera que es improbable que exista en el corto plazo un encuentro presidencial entre los líderes de Argentina y Brasil, tras las declaraciones de Milei durante la campaña presidencial. Finalmente, si bien la administración de Joe Biden ha dado de manera reiterada su respaldo a Buenos Aires, en particular en el tema militar –para hacerle contrapeso a China en América Latina–, la voluntad del presidente argentino de tejer una relación de cercanía con Donald Trump generó una fuente de tensión con el gobierno demócrata norteamericano.

De manera que las relaciones exteriores de Milei serán una fuente de problemas para el gobierno argentino, que tendrá consecuencias prácticas, en particular en los asuntos económicos. Argentina necesita respaldo de las principales potencias europeas y de las americanas para mantener los créditos que recibe de parte del Fondo Monetario Internacional. Por otro lado, también necesita de las inversiones privadas extranjeras para mantener a flote su economía.

Y en este sentido, las semanas de tensiones crecientes empiezan a preocupar a las empresas españolas que invierten 15 mil millones de dólares al año en Argentina. Entre ellas, podemos destacar a los bancos BBVA y Banco Santander y la empresa Inditex, propietaria de Zara, el mayor minorista de moda del mundo. Se trata del segundo país con más inversiones en Argentina, detrás de las empresas estadunidenses únicamente. El jefe de la federación empresarial española CEOE, Antonio Garamendi, dijo que el ataque de Milei podría “dañar” los intercambios. Esperemos que Milei recapacite y cambie su actuación internacional.

 

* Director Ejecutivo del Observatorio Político de América Latina y el Caribe (OPALC), con sede en París

 

X: @Gaspard_Estrada