24 julio,2023 4:51 am

La Filarmónica de Sonora

LA REPÚBLICA DE LAS LETRAS

Humberto Musacchio

La Filarmónica de Sonora

Otro escándalo en Hermosillo: Beatriz Aldaco, directora del Instituto Sonorense de Cultura, está empeñada en cesar al muy calificado maestro Héctor Acosta como director de la Orquesta Filarmónica de Sonora, mientras favorece y fomenta la grilla barata de un grupo de buenos músicos armenios que, lamentablemente, una y otra vez incurren en ausentismo y otros casos de indisciplina. A estos se suma una decena de atrilistas que carecen de estudios formales, quienes pretenden disfrazar su incompetencia moviéndole el tapete al director, con la complicidad de la señora Aldaco que, otra vez, en lugar de respetar las normas y la disciplina que debe privar en un conjunto sinfónico digno de ese nombre, fomenta e incluso produce conflictos en el área que está bajo su responsabilidad. Y mientras priva de fondos, personal de apoyo y todo respaldo logístico a Héctor Acosta, doña Beatriz favorece sin rubor a su hijo Pablo Aldaco, cantautor que tiene en su combo a dos de los armenios a los que paga la OFS. Como la Filarmónica de Sonora se debe presentar en el próximo Festival Cervantino, la señora, debido a su fobia a Héctor Acosta, pretende contratar a Enrique Patrón de Rueda, un músico capaz, pero al que durante la gestión del gobernador Guillermo Padrés se le encontraron facturas irregulares por millones de pesos, algo que la administración de Claudia Pavlovich señaló como desfalco. En suma, sigue y se ahonda el desastre en el área cultural del gobierno sonorense, por lo cual, lo prudente y procedente sería liberar a la señora Aldaco de trabajo, pues es un hecho que no goza de cabal salud. El gobernador Alfonso Durazo bien le podría dar una de esas asesorías que se conocen como aviadu-rías, por supuesto en un área alejada de la cultura. Al estado le saldría más barato.

Se recuperan piezas yaquis

Adelfo Regino Montes, director general del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, entregó a los yaquis 24 piezas arqueológicas que estaban en poder del Museo Etnográfico Nacional de la Cultura del Mundo, institución sueca que se hizo de ese patrimonio durante la represión porfirista contra la citada etnia sonorense. El funcionario hizo la entrega ante una reunión del máximo órgano de gobierno de la nación yaqui, integrado por autoridades (gobernadores, pueblos mayores, capitanes, comandantes y secretarios) que representan a los ocho pueblos: Ví-cam, Pótam, Ráhum, Huírivis, Belem, Tórim y Cócorit-Loma de Guamúchil.

Los murales de la SCOP

Cuando ya queda menos de año y medio al presente sexenio, la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes y la de Cultura anunciaron el rescate de los murales y esculturas de lo que fuera la SCOP. Con la restauración de esas obras se creará el Parque del Muralismo Mexicano y, sobre todo, se preservarán las creaciones de artistas como Juan O’Gorman y José Chávez Morado, de los Fridos Arturo Estrada y Guillermo Monroy, de Rodrigo Arenas Betancur (el mexicolombiano que insistía en aclarar que su apellido no era Betancourt, sino Betancur), del costarricense Francisco Zúñiga, autor de los altorrelieves; y de Jorge Best, creador de El fuego. La intención es buena, pero es dudoso que el prometido parque sea terminado antes del fin de sexenio.

Deshojando la Margarita

Denuncia la querida Ángeles González Gamio (La Jornada, 23/jul/23) que en la alcaldía Azcapotzalco, Pablo Moctezuma, durante los dos periodos en que gobernó la entonces delegación, creó el Centro-Museo de los Pueblos Originarios y el Museo de Azcapotzalco, pero vino la pandemia y tras ella la gestión de la alcaldesa panista Margarita Saldaña, quien mandó cubrir un mural que no era de su gusto, ordenó mover piezas de un museo a otro y, en el colmo, hizo pintar el Museo de Azcapotzalco y lo reinauguró como Museo Regional, donde colocó una gran placa que la presenta como creadora de ese espacio. “¡Sí, Chucha!”, decían antes.

¿Y el autor de Las mañanitas?

Tradicionalmente, ha estado a discusión la autoría de Las mañanitas, esa canción con la que celebramos cumpleaños y a quienes tienen nombres tomados del santoral católico. Se ha dicho que el compositor fue Alfonso Esparza Oteo, aunque es Manuel M. Ponce quien cuenta con más votos para ser considerado su autor, al que también le atribuyen La Cucaracha y Cielito Lindo, pero ocurre que se trata de melodías tradicionales. En el lejano 1934, el musicólogo March Pincherle, a quien Ponce conoció en París, escribió: “folclorista intuitivo y paciente, Ponce fue el primero en recoger la música popular de su país, que ha estilizado con fidelidad”. Sí, tomó viejos temas y los estilizó, como dijo Pincherle.

Breviario…

Fue reconocida la fructífera trayectoria de Luis Estrada en el Festival Internacional de Cine de Guanajuato. Felicidades a ese maestro, hijo de tigre: el inolvidable Pepe Estrada. @@@ Con traducción de la excelente Selma Ancira, está en circulación El Diablo, sexto libro de Marina Tsvietáieva que ofrece Ediciones sin Nombre. Los interesados en adquirir el paquete completo pueden escribir a [email protected] o comunicarse al teléfono 55-3142-5194.