Sus acusaciones de que él impuso al secretario de Seguridad, son un distractor de la ingobernabilidad y del “quebranto financiero sin precedente” que generó en Chilpancingo, señala el gobernador. Dice que no promovió la salida de su correligionario priista de la alcaldía.
Texto: Karina Contreras
Foto: Archivo El Sur- Éric Chavelas Hernández
Acapulco, Guerrero. El gobernador Héctor Astudillo Flores aseguró que no tiene ni tuvo diferencias con el alcalde con licencia de Chilpancingo Marco Antonio Leyva Mena, y que sus declaraciones de que él le propuso al secretario de Seguridad en la capital, es un distractor por el desfalco que hay en las finanzas del Ayuntamiento y del cual es responsable.
En declaraciones ayer al concluir el informe anual de labores del delegado del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Reyes Betancourt Linares, subrayó que es importante dejar muy claro que Chilpancingo tiene “un quebranto financiero sin precedente en su historia y el responsable es Marco Antonio Leyva y él tiene que responder frente a las instancias” fiscalizadoras, la Auditoría Superior del Estado (ASE) –a la que el gobernador siguió llamando Auditoría General del Estado (AGE)– y con la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
Y aseguró que Leva Mena se retiró del cargo además por “la ingobernabilidad que provocó con sus desentendimientos, sus ausencias, sus omisiones” y que lo hizo también porque el Congreso se preparaba para discutir en el pleno una demanda de revocación de mandato contra el entonces alcalde de Chilpancingo.
Y esos son “asuntos totalmente diferentes a temas con mi señora esposa”, dijo el gobernador.
Anteayer por la noche Leyva Mena declaró en el noticiero principal de Televisa que dirige la periodista Denise Maerker, que el gobernador fue quien le propuso a Esteban Espinoza para el cargo de secretario de Seguridad Pública, y que éste venía de ser escolta de la ahora presidenta estatal del DIF, Mercedes Calvo, y en la nota se informó que el priista solicitó licencia a “raíz de diferencias con el gobernador”.
Al señalamiento, Astudillo respondió que Esteban Espinoza fue nombrado por el Cabildo, no por el gobernador y que la reciente intervención de la Policía del Estado sí fue una decisión de su gobierno derivada de los conflictos y crímenes que hubo, en alusión al caso de los siete jóvenes que a fines de diciembre fueron detenidos en diversos hechos por policías municipales y entregados a un grupo del crimen organizado, dos de los cuales aparecieron muertos, otros dos siguen desaparecidos y tres fueron liberados con visibles huellas de tortura.
A raíz de estos hechos, Esteban Espinoza tuvo que renunciar al cargo el 21 de enero, lo que hizo luego de que se difundió en el mismo espacio de Televisa y en otros medios que no aprobó los exámenes de control y confianza.
Astudillo Flores dijo que si éste hubiera sido jefe de escoltas de su esposa Mercedes Calvo, como aseguró Leyva Mena, lo diría “con mucho gusto, no tengo problema de ningún tipo; qué grave es que esté señalando a mi esposa para tratar de aparecer en los medios y de alguna manera presentar sus razones de las cuales él se retiró del cargo”.
En declaraciones en Acapulco, el gobernador precisó: “Yo no tengo ninguna diferencia con él, yo no le dije que pidiera licencia, él pidió licencia derivado de una gran cantidad de conflictos que generaron ingobernabilidad en Chilpancingo, pero aparte de eso es importante que el gobernador le diga a los medios, que lo manejen, de que sí les puedo decir con una gran contundencia es que él (Leyva Mena) es el responsable del grave conflicto financiero que hay en Chilpancingo; él es el responsable y tiene que responder por el quebranto que está a simple vista”.
Astudillo Flores insistió que la salida de Leyva Mena de la alcaldía fue, primero, por la ingobernabilidad que generó frente a una petición que habían hecho integrantes del Congreso local de revocarse el mandato: “él pidió licencia para evitar que llegara la revocación del mandato al pleno, no pidió licencia porque alguien lo presionara o exigiera y me parece muy lamentable que hoy trate de involucrar a una serie de personas que no tienen por qué involucrarse en los temas y en su ruta de encontrar explicaciones del porqué ya no es presidente municipal”.
“Derivado de las declaraciones de ayer les quiero decir con una gran contundencia que yo no tengo ninguna diferencia con él, yo no le dije que pidiera licencia”, finalizó el gobernador.
Leyva Mena se separó del cargo el pasado 16 de octubre y el 8 de enero irrumpìó en la oficina que ocupaba en el ayuntamiento y anunció que volvería al cargo. Su petición está detenida en el Congreso local.
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