6 febrero,2023 8:30 am

Llama AMLO a abolir por la vía democrática las reformas neoliberales impuestas a la Constitución

Al conmemorar los 106 años de la Carta Magna de 1917, desde el Teatro de La República, en Querétaro, el presidente señala que los cambios realizados en gobiernos anteriores fueron orientadas a favorecer los intereses de una minoría nacional y extranjera. Debemos “continuar proponiendo cambios al marco legal en beneficio del pueblo, hasta devolver a nuestra ley máxima toda la grandeza de su humanismo original”, dice en su discurso

Querétaro, Querétaro, 6 de febrero de 2023. El presidente Andrés Manuel López Obrador llamó este domingo a abolir las reformas aprobadas durante el periodo neoliberal.

Al conmemorar los 106 años de la Constitución de 1917, el mandatario consideró que se debe dar marcha atrás a todos los cambios realizados a la Carta Magna que no representen un beneficio para el pueblo.

“Debemos seguir luchando por los ideales de la Revolución Mexicana, consagrados en la Constitución de 1917, no dejar de insistir en abolir, por la vía legal y democrática, las reformas contrarias al interés público impuestas durante el periodo neoliberal”, dijo.

“Continuar proponiendo cambios al marco legal en beneficio del pueblo, hasta devolver a nuestra ley máxima toda la grandeza de su humanismo original”.

Desde el Teatro de La República, el Jefe del Ejecutivo federal consideró que las reformas realizadas en gobiernos anteriores fueron orientadas a favorecer los intereses de una minoría nacional y extranjera.

“Por eso, frente a este vergonzoso retroceso, podemos decir con orgullo y con la frente en alto que hemos logrado la aprobación de algunas reformas en el congreso, con el distintivo de la honestidad y del humanismo”, expresó.

Al hablar sobre corrupción, el presidente volteó la mirada hacia el presidium, donde lo escuchaban los integrantes de su gabinete, pero también algunos de sus críticos y opositores.

“Ahora es delito grave la corrupción, que no lo era porque habían modificado el código penal durante el sexenio de 1988 a 1994”, soltó.

López Obrador reivindicó las reformas impulsadas por su Gobierno, como la que convirtió en derechos constitucionales las pensiones y apoyos de Bienestar.

También destacó las reformas en materia de austeridad, extinción de dominio para recuperar lo robado y la prohibición a la condonación de impuestos, que han generado ingresos por 200 mil millones de pesos.

El político tabasqueño también celebró las reformas para clasificar el robo de combustible, la evasión fiscal y el fraude lectoral como delitos graves, así como la eliminación de fuero del Presidente, la revocación de mandato, la consulta popular y la nueva ley laboral, que garantiza el voto libre y secreto directo en los sindicatos.

Durante la ceremonia estuvieron solo dos de las llamadas “corcholatas” presidenciales de Morena rumbo al 2024: la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, y el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, quien se sentó a la derecha del presidente.

No acudieron el Canciller Marcelo Ebrard, quien se habría reportado enfermo, y el coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal.

El mandatario estuvo acompañado de los integrantes de su Gabinete, de los presidentes de las mesas directivas de las dos cámaras del Congreso federal, Santiago Creel y Alejandro Armenta, y de la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Piña.

También asistieron todos los gobernadores de los estados, con excepción del de Jalisco, Enrique Alfaro.

La Constitución no admite atajos para violentarla, dice Kuri

El primer orador del acto, Mauricio Kuri, gobernador de Querétaro, advirtió que la Constitución no admite atajos ni procedimientos legislativos que la violenten.

“La supremacía de la Constitución se afirma sobre el poder de los ejércitos revolucionarios y de sus caudillos. Nunca, salvo el breve periodo de la República restaurada, había México logrado librarse del poder de un solo hombre”, señaló.

“El principio del fin de esa realidad se da aquí, cuando se acuerda que no habrá nadie por encima de la Constitución, tampoco admite, ni entonces ni hoy, atajos, planes o procedimientos legislativos para violentarla”.

El mandatario emanado de las filas del PAN advirtió que la Carta Magna está, incluso, por encima de quienes mandan.

“La ley suprema es, y lo es, a pesar de la voluntad de quienes mandan, de los anhelos, de las facciones o de las añoranzas de los poderes fácticos”, advirtió.

“La independencia es la principal garantía de imparcialidad”, subraya la presidenta de la SCJN

La presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ministra Norma Piña, segunda en intervenir en la ceremonia, exigió respeto a la división de poderes y a la independencia del Poder Judicial, en el 106 aniversario de la Constitución.

“La diversidad entre quienes impartimos justicia no sólo es inevitable, es deseable. Es sano y necesario ponderar la actividad de los jueces en virtud de las resoluciones que emiten y nunca, nunca, perder de vista la independencia judicial, la de los juzgadores y de la de uno de los poderes constitutivos de la República. Una judicatura independiente es pilar de nuestra democracia, es el legado que nos transmite nuestra ley fundamental.

“La independencia judicial no es un privilegio de los jueces, es el principio que garantiza una adecuada impartición de justicia para hacer efectivas las libertades y la igualad de las y los mexicanos. La independencia judicial es la principal garantía de imparcialidad del Poder Judicial siempre en beneficio de la sociedad”, destacó la ministra Piña elevando el tono de voz para enfatizar sus conceptos.

Pide Creel reconocer los límites que impone la Constitución y los tratados internacionales

En su turno, el presidente de la Cámara de Diputados, Santiago Creel, pidió al Jefe del Ejecutivo, Andrés Manuel López Obrador, parar la confrontación, abrir el diálogo y rectificar.

Al participar en la ceremonia por el 106 aniversario de la Constitución de 1917, el diputado del PAN llamó al mandatario a no repetir los errores del pasado.

“Hoy, después de dos alternancias federales incuestionables, era de esperarse que hubiéramos arribado a un amplio consenso en torno a las instituciones y a las reglas electorales. Esto no es así”, expuso.

“Rectifiquemos, aún estamos a tiempo, no tenemos por qué repetir los errores del pasado”.

Por ello pidió rectificar, al considerar que la política también es la conciliación de intereses encontrados y porque todos tienen derecho a defender sus creencias y posiciones políticas, teniendo como límite la Constitución y los tratados internacionales suscritos por el país.

El legislador lamentó que, ante la falta de acuerdos, la definición de las reglas electorales haya quedado en manos del Poder Judicial y no de los actores políticos del país.

La celebración de la Constitución de 1917 pone distancia entre Poderes

Como hace 106 años, los choques entre los progresistas de Obregón, los moderados de Carranza y las alas radicales, revivieron ayer con posturas políticas que dividieron los aplausos.

La ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Lucía Piña, se estrenó en su primer evento oficial encabezado por el Presidente Andrés Manuel López Obrador.

De entrada, no se levantó de su silla cuando el tabasqueño ingresó al Teatro de la República, aunque lo hizo después en los honores al Presidente.

Los pronunciamientos fueron dulces, salados y de manteca.

La ministra exigió independencia para las decisiones del Poder Judicial.

El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Santiago Creel, alertó que hay desacuerdo sobre el combate a la violencia, la seguridad pública, la cuestión social, la económica, la impunidad y la corrupción. A la vez urgió a la reconciliación.

Con una reforma electoral en puerta, el Gobernador de Querétaro, el panista Mauricio Kuri, llamó a defender la democracia y su sistema.

“Modificarlo no sólo iría contra la Constitución, sino contra un proceso histórico y una sentida demanda de la sociedad”, dijo.

En tanto, el presidente del Senado, Alejandro Armenta, presumió reformas e iniciativas impulsadas por López Obrador y se lanzó contra los “discursos anteriores” por no considerar a la ciudadanía.

“Yo soy un soldado, señor”, le dijo Armenta al Presidente.

El Presidente por su parte, llamó a no dejar de insistir en abolir, por la vía legal y democrática, las reformas contrarias al interés público impuestas durante el “periodo neoliberal”.

Al término de su discurso, Piña lanzó un saludo de lejos a López Obrador, lo mismo que Creel.

Cambio de sillas

El distanciamiento fue evidente, incluso en el acomodo de lugares.

La ministra Piña estaba considerada para ocupar la silla cerca del Presidente, entre el Secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, y Creel.

En la orilla se tenía proyectado que estuvieran los titulares de la Defensa, Luis Cresencio Sandoval, y de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez.

La logística hizo un enroque. A la extrema derecha del Presidente quedó Rodríguez, luego Creel y después Piña. Enseguida Sandoval y después López Hernández.

El año pasado, Arturo Zaldívar, ex presidente de la Corte, estuvo más cerca de López Obrador, con Sergio Gutiérrez Luna, ex presidente de San Lázaro.

Aplausos y selfies

Tras el mensaje del Senador Alejandro Armenta, Creel intentó saludar a Armenta cuando concluyó su discurso. Pero el de Izúcar de Matamoros, Puebla, se fue de largo para darle la mano al presidente.

Por su parte, ante el pronunciamiento del tabasqueño, Piña y Creel se guardaron los aplausos.

El mandatario sólo ganó el aplauso de ambos cuando presumió que en su administración se elevó a rango constitucional el derecho a las pensiones de adultos mayores y personas con discapacidad y las becas a estudiantes pobres en todos los niveles de escolaridad.

También aplaudieron cuando concluyó la ceremonia. Y, aunque bajito, respondieron a los seis vivas que arengó el Presidente para enaltecer la Constitución, al estado de Querétaro y a México.

En el aplausómetro ganó la titular de la SEP, Leticia Ramírez. Celebró todos los discursos de los morenistas.

Al terminó del evento, Piña y Creel se fueron enseguida, entre saludos de dientes para afuera.

El diputado panista ya había pronosticado que en su discurso “iba a hacer calorcito”.

En contraste, los gobernadores y la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, que tomaron asiento detrás del Presidente y el gabinete federal (sin el Canciller Marcelo Ebrard, que al parecer padece gripa), se colmaron de selfies.

En una que tomó Claudia Sheinbaum, aparecieron la panista de Chihuahua, Maru Campos; Indira Vizcaíno, de Colima; Layda Sansores, de Campeche; Mara Lezama, de Quintana Roo; Evelyn Salgado, de Guerrero; Rutilio Escandón, de Chiapas; Cuauhtémoc Blanco, de Morelos; Samuel García, de Nuevo León, y Américo Villarreal, de Tamaulipas.

Aprovechan el viaje

Los mandatarios estatales también aprovecharon el evento para plantear algunas peticiones a los funcionarios federales y al propio presidente.

Maru Campos le pasó un papelito al presidente en el desarrollo de la ceremonia; Tere Jiménez, de Aguascalientes, también le entregó otro al termino del evento.

Luego Jiménez, Diego Sinhue Rodríguez, de Guanajuato, y Mauricio Vila, de Yucatán, abordaron a la titular de Seguridad Pública.

Las “gestiones” también incluyeron a la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro, y al titular de Gobernación, quien comió barbacoa en el restaurante Santiago, junto con Víctor Castro, gobernador de Baja California Sur.

A la pasarela de gobernadores faltó el de Jalisco, Enrique Alfaro.

En el pasillo, el Presidente de despidió entre saludos y selfies de quienes ocuparon las filas F y H.

Estuvieron ahí, entre otros, Bernardo Bátiz, consejero de la Judicatura Federal, y Santiago Nieto, ex titular de la UIF y actual encargado de despacho de la Procuraduría de Hidalgo.

Se quedan afuera

La restricción de acceso al evento provocó que decenas de funcionarios se quedarán afuera, aseguraron fuentes de seguridad.

Eso provocó que el Teatro no se llenara, principalmente en la zona de palcos y plateas.

En las vallas metálicas autoridades de Querétaro asumieron un papel distinto al convenido con instancias federales, lo que llevó a complicar el paso de invitados. Se hizo un embudo, reclamó un elemento del Ejército.

El Teatro tenía lugar para 449 invitados. De ellos, 258 fueron federales y 150 del Gobierno queretano.

“Faltó que pasaran varios, unos 60 funcionarios federales, entre ellos subsecretarios, pero ya inició la ceremonia y no se permitió el paso”, dijo la fuente.

Marcelo Ebrard, por ejemplo, tenía su lugar entre el senador Armenta y el secretario de Marina.

Esa silla fue ocupada por la titular de la SEP, quien originalmente no estaba contemplada en el presidium.

Un total de 81 invitados cancelaron su asistencia. Entre otros, la esposa del presidente, Beatriz Gutiérrez; el senador Ricardo Monreal, el coordinador de asesores Lázaro Cárdenas Batel, los titulares de Salud y Sedatu, el diputado Ignacio Mier y seis generales de División de la plana mayor, de acuerdo con el listado de cancelaciones.

Los que sí fueron llevaron familiares o asistentes.

Sólo el gobernador de Querétaro incluyó a unas 20 personas, entre esposa, hijos, hermanos, sobrinos y cuatro amigos con sus parejas.

Acudieron alcaldes, magistrados, legisladores federales y locales, ex gobernadores del estado y empresarios.

Para el evento se consideró la renta de los estacionamientos Constitución y El Carmen, con una disponibilidad de 250 lugares.

Alertan protestas

De acuerdo con los datos proporcionados, parte de las restricciones para el paso de invitados se derivó de un “riesgo” detectado por la presencia de varias manifestaciones sociales en la capital queretana.

Dos fueron consideradas de alto riesgo, cuatro de mediano y nueve de bajo nivel, según militares.

Las de alto riesgo fueron adjudicadas a la Unidad Cívica “Felipe Carrillo Puerto”, Sindicato Independiente de Trabajadores de SLP y el Frente Popular.

“Se indicó que buscaban la forma de pasar las vallas a como diera lugar; varios camiones de esta organización provinieron de San Luis Potosí y sus líderes son radicales: Pablo González Loyola y Miguel Ángel Wong”, dijo uno de los elementos.

Añadió que el otro riesgo se enfocó en el Frente de Organizaciones Sociales, encabezado por Sergio Jerónimo Sánchez, Tereso Gómez, Rosalío Olguín y Adela Pedro Domingo.

“Buscaban la confrontación con elementos de seguridad”, se alertó.

Esto amplió el perímetro de seguridad, lo que provocó que se extremara la vigilancia.

Texto: Claudia Guerrero y Benito Jiménez / Agencia Reforma