14 octubre,2017 7:38 am

Llaman con documental a cuidar de la depredación al archipiélago de Revillagigedo

Ciudad de México, 13 de octubre de 2017. Con el documental Revillagigedo, el México más salvaje, el biólogo marino mexicano Octavio Aburto-Oropeza desea que la gente tome conciencia sobre el cuidado del medio ambiente y el ecosistema del mar.

National Geographic presenta hoy a las 8 de la noche el trabajo liderado por el explorador residente de este canal, Enric Sala, y en el que Aburto-Oropeza, jugó un papel fundamental.

“Lo hicimos en el archipiélago de Revillagigedo, que son las islas San Benedicto, Isla Socorro y Roca Partida, todo con la finalidad de monitorear el comportamiento y la conducta de vida marina en la región. Creo que las conclusiones son muy contundentes y son una invitación a los mexicanos a reflexionar sobre la importancia del ecosistema, de ponerle atención a la madre naturaleza y, sobre todo, de evitar la sobreexplotación y detectar a los depredadores que ponen en peligro esta región”, apuntó el experto.

Este archipiélago, ubicado a casi 400 kilómetros de Cabo San Lucas y de Manzanillo, y al que sólo se llega por mar, es considerado patrimonio de la humanidad y una de las zonas más vírgenes del espacio marítimo mexicano.

Egresado de la Universidad Autónoma de Baja California Sur y con maestría y doctorados en biodiversidad marina, Aburto-Oropeza participó en un equipo de más de 10 especialistas que durante meses exploraron la zona objeto este documental.

“Hicimos un trabajo con imágenes exclusivas, con la tecnología de punta, con todos los avances para mostrar la belleza de nuestra naturaleza y de cómo se ve amenazada por el ser humano y su inconsciencia”, explicó vía telefónica, desde su residencia en San Diego.

El biólogo, quien coordina a un grupo de investigación sobre la importancia de los manglares y ha hecho trabajo fotodocumental de una amplia porción de territorio mexicano, está satisfecho con el resultado de tantas horas de trabajo en altamar.

“Se usaron drop cams de National Geographic, que llegan a 2 mil metros de profundidad. También hubo un sumergible, un minisubmarino. Estuvo padrísimo porque tres personas descendieron a 400 metros de profundidad. Hay que hacer algo, y ya verán qué podemos hacer”.

Texto: Juan Carlos García- Agencia Reforma/ Foto: http://www.ngenespanol.com