El bajista y vocalista de la banda Los Rastrillos, pioneros del género en el país, luchó dos años contra el padecimiento, pero falleció el lunes, informa la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México
Ciudad de México, 11 de abril de 2024. Gerardo Pimentel Zopi, bajista y fundador de la icónica banda mexicana de reggae Los Rastrillos, murió a causa de leucemia mieloide.
El músico y locutor falleció el lunes, a los 55 años, luego de más de dos años de lucha contra el padecimiento.
La noticia sobre su deceso la dio a conocer la Secretaría de Cultura de la capital del país, pero también lo publicaron varios de sus compañeros de Los Rastrillos, de la cual fue miembro fundador, en 1989.
Zopi fue diagnosticado con cáncer a finales de 2021 y en febrero de 2023 había sido trasplantado de médula ósea, sin embargo, a inicios de este abril reapareció la leucemia y había comenzado de nuevo con quimioterapias.
A través de sus redes sociales, el músico solía compartir parte de su proceso de recuperación, la última publicación en su Instagram es del 1 de enero de este año, con varias fotografías de sus días en el hospital y sus mejoras.
“Estos son algunos momentos que me marcaron en el 2023, pero sobre todo que fueron parte de estos dos años de lucha por recuperar la salud desde que fui diagnosticado con leucemia. (…) Agradecimiento infinito para todxs ustedes. Les deseamos lo mejor para este 2024 y sobre todo mucha salud. Bendiciones. One Love”, expresó al pie de sus imágenes.
Sus últimos días estuvo hospitalizado en el Instituto Nacional de Cancerología por las complicaciones de la enfermedad.
El artista es considerado un ícono en el género de reggae en México; durante más de tres décadas con Los Rastrillos lanzó discos como Revolución Latinoamericana (1992), 4 Vientos (1998), Códigos del alma (2000), Se acabó el reve (2005), y Luces (2013).
Como locutor destacó en el programa Reggaevolución, emitido por radio Reactor 105.7 y era amante del ciclismo, deporte que practicaba.
De Jamaica a las playas caribeñas de México
A finales de los años 80, en Cancún, Quintana Roo, el Caribe mexicano, cercano geográficamente a Jamaica, el reggae se reelaboró sobre una combinación de playa y rock que fue decisiva en su evolución posterior en el país. Ahí se creó Splash, una de las primeras bandas mexicanas que retomaban la música reggae, y que incluso participó en 1990 en el festival jamaiquino The Reggae Sunsplash.
Además, también en Cancún, surge Bosquimano. Estas y otras bandas como Selah y Blitz, o El Personal (en Guadalajara) fusionan ritmos caribeños como el reggae, la soca y el calipso, con un repertorio propio.
En la misma época, en la Ciudad de México, comenzó a desarrollarse un movimiento en torno a la música reggae, con bandas que posteriormente organizaron el Festival Razteca, en 1993, encabezado Los Rastrillos, Los Yerberos, Antidoping y Walla, que tienen una marcada influencia de Alpha Blondy, Augustus Pablo, Bob Marley & The Wailers, Burning Spear, Culture, Gregory Isaacs, Horace Andy, Black Uhuru, Jacob Miller, Jimmy Cliff, Max Romeo, Sly & Robbie, Steel Pulse, The Abyssinians, The Ethiopians, The Gladiators, Third World y UB40, entre otras figuras renombradas del género.
El reggae se caracteriza por sus mensajes de paz y armonía entre las personas, y en el caso de Los Rastrillos, en sus canciones se remarca la alegría de estar vivos, el respeto al medio ambiente y las culturas originarias, así como el rechazo a la violencia y a los regímenes políticos opresores.
Texto y foto: Agencia Reforma
