Acapulco, Guerrero, 25 de julio de 2023. En Puerto Marqués guardan celosamente una pequeña playa, llamada Palmita Sola que en algún tiempo fue un espacio donde los mismos lugareños arrojaban basura y desperdicios.
La playa está ubicada del lado derecho de la bahía, en la zona donde está la residencia oficial del gobierno de estado, Casa Acapulco, que tiene su propia playa “Miguel Alemán”. Cerca de la zona está playa Pichilingue, a la que solo se puede llegar por mar, y también playa Majahua, a un costado del Muelle Marina Cabo Marqués.
El señor Mauro Palma Martínez, de 70 años, “me apodan el tres veces sí”, quien nació en el poblado de Puerto Marqués, es maestro de natación, guardavidas voluntario y pescador.
El hombre indicó que tiene el permiso de uso y usufructo de la playa, que apenas tiene un espacio de unos 10 metros de franja de arena, y el resto está ocupado por grandes piedras donde el mar golpea. También tiene una alberca de piedras que al paso de los años se ha ido resquebrajando.
Relató que esa zona no era precisamente una playa sino que la propia gente del poblado lo agarró como basurero, lo que les perjudicaba como pescadores y prestadores de servicios turísticos, porque era un foco de infección y contaminación al mar.
Pero él y otros familiares se dieron a la tarea de retirar los desechos, de limpiar un área de unos 100 metros, donde hicieron una pequeña vereda hasta la zona de playa. Sin embargo a pesar del paso de los años no han podido arreglar el acceso principal, que pega con la playa de la bahía.
Al llegar, hay decenas de rocas apiladas, con amplios espacios, pero hay una zona donde, poco a poco, han ido rellenado de tierra y han formado pequeños escalones con madera, que no tiene estabilidad, pero permiten el acceso. El señor dice que pasando las vacaciones espera poder arreglar el acceso.
El nombre de la playa fue retomado porque en la zona solo había una palmera, de unos 80 metros de altura. En la actualidad está seca, pero en la punta viven pájaros carpinteros. Explicó que la palmera se secó debido a que el agua del mar llegó hasta sus raíces, una vez que se concluyó el muelle del otro extremo de la bahía.
El hombre dijo que “La palmita sola” no pertenece a la playa de Casa Acapulco e incluso recordó que el ex presidente Miguel de la Madrid llegó a visitar la playa, cuando recorría las orillas de Casa Acapulco.
En la playa hay mucha paz y tranquilidad, a diferencia de la franja de arena de la bahía, porque a esa zona no entran los vendedores ambulantes debido a lo accidentado del acceso. “No cualquiera viene a la playa palmita sola”, dijo don Mauro.
En la playa, los niños que acuden pueden disfrutar de los chapuzones sin mayor cuidado, debido a que la playa a pesar de que es pequeña, las olas golpean de forma suave.
Don Mauro pidió a quienes quieran visitar la playa que al llevar sus bebidas refrescantes y cervezas, se llevan los envases y los depositen en los cestos de basura y no lo dejen en la playa.
Comentó que por la comida no hay que preocuparse porque en el local que tiene lo pueden adquirir o bien incluso pueden acompañarlo a pescar y de regreso les prepara unas tiritas de pescado, o se los fríe.
Dijo que la playa se cierra a las 7 de la noche por muy tarde, debido a que no hay lámparas que iluminen el sendero, además de que no hay nadie al pendiente de los bañistas.
En esa playa también trabaja Alberto Hernández Palma, quien ofrece servicios acuáticos y deportivos en la bahía, como el paseo en banana que cuesta cien pesos por persona, además de las motos acuáticas que por media hora se rentan en 800 pesos.
Texto: Jacob Morales Antonio / Foto: Jesús Trigo
