Madrid/Bruselas, 15 de diciembre 2017. Los últimos sondeos publicados sobre las elecciones del próximo jueves en Cataluña dibujan un Parlamento regional sin mayorías absolutas, con dificultades para formar gobierno y con resultados muy ajustados entre el bloque separatista y el que está a favor de la unidad de España.
Según la encuesta publicada hoy viernes por el diario “El País”, los partidos “constitucionalistas” superarían en casi un punto en intención de voto a los independentistas (44.9 por ciento frente al 43.8 por ciento), aunque estos últimos sumarían más escaños, favorecidos por la ley electoral que otorga más valor a los votos de zonas rurales.
El sondeo de “El Mundo”, sin embargo, sitúa a los separatistas por delante incluso en intención de voto, con un 45.5 por ciento frente al 44 por ciento de los partidos contrarios al proceso soberanista.
En escaños, la suma separatista del partido Esquerra Republicana (ERC), Junts per Catalunya -coalición del ex jefe del Gobierno catalán Carles Puigdemont- y el partido antisistema CUP daría entre 64 y 69 diputados, cuando la mayoría absoluta se fija en 68.
Los partidos constitucionalistas (Ciudadanos, el Partido Socialista de Cataluña y el Partido Popular de Mariano Rajoy) obtendría entre 57 y 61 diputados regionales, según la encuesta de “El Mundo”.
Ambos sondeos están encabezadas en intención de voto por el partido liberal Ciudadanos, que en los últimos años lideró la oposición en Cataluña con Inés Arrimadas al frente. En escaños, sin embargo, le adelanta la formación independentista Esquerra Republicana (ERC), con el ex vicejefe del Gobierno catalán Oriol Junqueras como candidato.
Otro sondeo, publicado hoy por el diario conservador “ABC”, otorgó una ligera ventaja a Ciudadanos en el primer puesto, tanto en votos (23.2 por ciento) como en escaños (31-32). Le seguiría ERC con un 20.3 por ciento del sufragio y entre 29 y 31 diputados.
Lo que muestran todos los estudios demoscópicos es que la coalición izquierdista Catalunya en Comú-Podem, afín al partido Podemos, podría tener la llave del gobierno, a pesar de que pierde apoyo respecto a los anteriores comicios catalanes, celebrados en 2015.
Las elecciones del próximo jueves fueron convocadas por el Gobierno de Rajoy en el marco de las medidas tomadas para tratar de frenar el desafío independentista impulsado por el Gobierno catalán de Carles Puigdemont, que fue destituido por Madrid a final de octubre.
La campaña electoral está siendo anómala, con varios candidatos separatistas en prisión acusados de rebelión, sedición y malversación en relación con el proceso soberanista, entre ellos Junqueras, y otros fuera de España, como Puigdemont.
Las medidas puestas en marcha por Rajoy para intervenir la autonomía catalana estarán vigentes hasta que se forme Gobierno en la región.
Sin embargo, esto parece complicado a tenor de los resultados de las encuestas, que no dibujan mayorías absolutas. Hoy se publicaron los últimos sondeos, según contempla la ley electoral en España.
“Las encuestas nos están diciendo que hay un gran apoyo a la independencia es una falsedad y (…) que por la irresponsabilidad de algunos hay una gran fractura de la sociedad catalana”, dijo hoy el presidente del Gobierno español desde Bruselas.
Lo que todas las encuestas pronostican es una participación récord, por encima del 80 por ciento.
Texto: DPA / Foto: EFE
