3 enero,2024 10:27 am

Por decreto de AMLO, se consuma la centralización del gasto en salud

 

Ciudad de México, 3 de enero de 2024. El presidente Andrés Manuel López Obrador promulgó este miércoles las reformas que consuman la centralización de los recursos en materia de salud para la operación del IMSS Bienestar.

Con el decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF), el organismo podrá manejar unos 110 mil millones de pesos, que equivalen al 81 por ciento de los recursos del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FASSA), aprobados para este 2024.

Las reformas a la Ley de Coordinación Fiscal y a la Ley General de Salud permitirán al Gobierno federal controlar el manejo de recursos de 23 estados, gobernados por Morena y el PVEM, que aceptaron adherirse al esquema del IMSS Bienestar, tras el fracaso del Insabi y la desaparición del Seguro Popular.

Durante la discusión en el Congreso, en diciembre pasado, se aseguró que la reforma busca completar el mecanismo de la federalización del sistema de salud que, según el presidente, debe alcanzar los estándares de Dinamarca en el primer trimestre de este año.

A través del IMSS Bienestar, el gobierno federal tomará control del personal, de la infraestructura, el equipamiento, los medicamentos y demás insumos, que antes eran manejados por los estados.

Con la entrada en vigor de los cambios legales, las únicas entidades que recibirán completos los recursos del FASSA son Aguascalientes, Chihuahua, Guanajuato, Querétaro y Yucatán (PAN); Coahuila y Durango (PRI), así como Jalisco y Nuevo León (MC).

En su momento, la reforma fue cuestionada por legisladores de oposición, quienes criticaron la visión centralista del nuevo sistema y sus posibles afectaciones al esquema federalista.

También expresaron sus preocupaciones sobre la transparencia en el ejercicio del gasto y la eficiencia del modelo que, hasta ahora, no ha conseguido avanzar en la cobertura de los servicios y el abasto de medicamentos.

En los transitorios del decreto, publicados este miércoles, se establece que el IMSS Bienestar tendrá hasta el 31 de marzo para realizar las conciliaciones necesarias y modificar los convenios de coordinación que suscribió con las entidades en 2023.

Una vez concretado ese paso, deberá gestionar ante las Secretarías de Salud y de Hacienda las adecuaciones presupuestales para consumar el traspaso de los recursos del Ramo 33 hacia sus arcas.

“En este caso, el IMSS Bienestar será responsable del ejercicio, administración, aplicación, comprobación, transparencia y rendición de cuentas de estos recursos”, refiere.

En el decreto se advierte que, en el traspaso, deberán respetarse los derechos laborales individuales de los trabajadores, de acuerdo con lo que establece la legislación vigente.

Texto: Claudia Guerrero / Agencia Reforma / Foto: Presidencia