16 octubre,2018 5:34 pm

Reportan 24.6 millones inseguridad alimentaria en México

De acuerdo con la medición multidimensional de la pobreza hecha por el Coneval, el 20.1 por ciento de la población mexicana reportó inseguridad alimentaria en 2016, lo que representa 24.6 millones de personas con hambre en el país.
Ciudad de México, 16 de octubre de 2018. En México, 24.6 millones de personas reportaron inseguridad alimentaria en 2016 y quienes viven en zonas rurales o tienen los ingresos más bajos son los que ven más vulnerado el derecho a una alimentación adecuada, reportó el Coneval.
En el Día Mundial de la Alimentación, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) resaltaron la importancia de monitorear y evaluar las políticas públicas orientadas a garantizar este derecho para contribuir a lograr Hambre Cero, el objetivo número dos de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible.
De acuerdo con la medición multidimensional de la pobreza hecha por el Coneval, el 20.1 por ciento de la población mexicana reportó inseguridad alimentaria en 2016, lo que representa 24.6 millones de personas.
Los grupos más afectados fueron la población indígena, que representó un 30.5 por ciento; las personas con discapacidad, con el 27.9, y los residentes de zonas rurales, con un 24.7 por ciento.
Gonzalo Hernández Lecona, secretario ejecutivo de Coneval, dijo que el reto alimentario supone visibilizar la desnutrición pero también la obesidad, un par de fenómenos que parecieran contradictorios pero que suelen presentarse en una misma familia en pobreza.
“Cuando uno observa a muchas familias, a muchas mujeres muchos hogares en pobreza combinan elementos de desnutrición con obesidad”, manifestó.
Entre las condiciones que intervienen en la mala nutrición de las familias mexicanas están: hogares con jefatura indígena, participación precaria en el trabajo, bajo nivel educativo, ausencia de programas sociales y la falta de acceso a agua dentro de la vivienda.
Otro factor que influye en el acceso a una alimentación adecuada, dijo, es que ha bajado el costo de los alimentos con alto contenido de calorías y ahora es más fácil conseguir un alimento con alto contenido calórico a bajo costo.
Para que los mexicanos puedan ejercer el derecho a la alimentación, el Coneval recomendó revertir la tendencia creciente en la prevalencia de sobrepeso y obesidad, mejorar el ingreso básico de las familias, incrementar la producción de alimentos de los pequeños productores y abatir la desnutrición crónica especialmente en mujeres en edad fértil y en infantes durante los dos primeros años.
En tanto, a nivel mundial, la FAO alertó que el hambre está aumentando y afecta a 821 millones de personas.
De acuerdo con la FAO, el hambre está en aumento debido a los fenómenos meteorológicos relacionados con el cambio climático, los conflictos, la recesión económica y el rápido aumento de los niveles de sobrepeso y obesidad.
Por lo anterior, urgió a los gobiernos a crear oportunidades para que se produzcan mayores inversiones del sector privado en agricultura, así como a impulsar programas de protección social para las personas más vulnerables.
Crispim Moreira, representante de la FAO en México, convocó a redoblar esfuerzos para alcanzar el objetivo de Hambre Cero.
“Estamos convocando al gobiernos, estados, sociedad, para poner freno a esta catástrofe de que más de 800 millones de personas han ido a dormir sin su derecho a la alimentación, no puede ser así”, enfatizó.
Miguel Ruiz Cabañas, subsecretario de Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la SecretarÌa de Relaciones Exteriores (SRE), destacó que aunque se producen alimentos suficientes para alimentar a todas las personas, persiste al menos un 30 por ciento de desperdicio.
“El hambre está aumentando por tres razones: por el cambio climático, porque están aumentando los conflictos violentos y porque está aumentando la desertificación. Lo más trágico es que hoy el mundo sí produce alimentos suficientes para alimentar a todo el mundo, lo que pasa es que se desperdicia entre 30 y 35 por ciento de los alimentos en el País”, expresó Ruiz Cabañas.
Francisco Javier García Bejos, subsecretario de Planeación, Evaluación y Desarrollo Regional de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), destacó la Cruzada contra el Hambre así como la red de Liconsa y Diconsa, como parte de las políticas públicas con las que el Gobierno federal combate el hambre.
Texto: Evlyn Cervantes Silva, Agencia Reforma / Foto: Cuartoscuro, archivo El Sur