27 agosto,2024 5:29 pm

Ruperta Bautista, poeta tsotsil, se lleva el PLIA

 

Guadalajara, Jalisco, 27 de agosto de 2024.- La vitalidad de la lengua tsotsil encuentra en la obra de Ruperta Bautista Vázquez una voz poderosa que resuena con fuerza en el ámbito literario contemporáneo. La poeta, originaria de Chiapas, fue reconocida con la 12 edición del Premio de Literaturas Indígenas de América (PLIA), un galardón que celebra su capacidad para mantener una tensión poética constante, fusionando recursos literarios con los elementos propios de su cultura y cosmovisión, según expresó el jurado.

La Feria Internacional del Libro de Guadalajara, junto con varias instituciones dedicadas a la promoción de la cultura y las lenguas originarias, han respaldado este premio, que este año destacó el trabajo de Bautista Vázquez.

“La obra de Bautista Vázquez muestra la vitalidad de su lengua originaria al tomar decisiones sobre la traducción de las palabras; recrea los elementos propios de su cultura y expresa la preocupación contemporánea por la muerte de las ancianas y los ancianos, lo que amenaza la continuidad de esa sabiduría”, señaló Angélica Ortiz López, hablante wixárika e integrante del jurado, compuesto también por Celerina Patricia Sánchez (mixteca) y Liliana Ancalao (mapuche).

Las integrantes del jurado destacaron el poemario “Presagio Lóbrego”, escrito en lengua tsotsil, como la obra ganadora entre los 47 candidatos, que incluyeron a 30 hombres y 17 mujeres de países como Bolivia, Argentina, Ecuador, Perú, Guatemala, Colombia y México.

Bautista Vázquez, quien estudió Antropología Social en la Universidad Autónoma de Chiapas, es poeta, pero también traductora, actriz, maestra en educación y diversidad cultural, y también ha incursionado en la escritura de cuentos y dramaturgia.

Su poemario ganador explora la temática de la muerte, tanto la natural como la provocada por la violencia generalizada en el país y en su natal Chiapas.

“(Esta obra) expresa el dolor, la sensación de orfandad, el desconsuelo y el abatimiento al ver cómo se deshilacha la vida de quienes se despiden de este mundo, este poemario está dedicado a la memoria de las madres que, aun sin haber llegado su tiempo, alguien cortó el hilo de su vida.

“Sabemos que vivimos en un País discriminatorio, donde las mujeres somos las que más sufrimos la discriminación. Hay menos disposición y posibilidad de manifestar nuestras actividades literarias, científicas y de investigación. Que una mujer de un pueblo originario pueda realizar este tipo de actividades representa un gran esfuerzo”, afirmó la autora, que recibirá este premio, dotado con 300 mil pesos, este 6 de diciembre en el marco de la FIL Guadalajara.

 

Texto e imagen: Agencia Reforma