Marcial Rodríguez Saldaña
El Tribunal Electoral del Estado de Guerrero resolvió por unanimidad –el martes 20 de julio– que la impugnación presentada por la coalición del PRI-PRD, es infundada, esto es que no tiene ningún sustento legal, con lo cual respeta la decisión soberana y democrática del pueblo de Guerrero, de haber electo como su gobernadora a Evelyn Salgado Pineda.
1.- El proceso electoral que vivimos en Guerrero para la elección de la gubernatura fue atípico y muy rudo. Morena inició campaña por la gubernatura sin candidato, debido a que por grillas internas, se ordenó hacer una nueva encuesta para seleccionar a su candidato a gobernador, luego se le despojó de su candidato inicial –Félix Salgado Macedonio– por parte de seis Consejeros Electorales del INE y seis Magistrados del Trife, lo cual impidió hacer campaña durante varias semanas, lo que obligó a realizar intensas movilizaciones, megamarchas en Chilpancingo y Acapulco, caravanas hacia la Ciudad de México y un plantón durante varios días y noches afuera de las instalaciones del INE, para protestar en contra de esa decisión injusta; todo ello, propició un fuerte desgaste del movimiento.
Después de la cancelación de la candidatura de Félix, se tuvieron que hacer nuevas encuestas –una interna y dos externas– donde resultó ganadora Evelyn Salgado Pineda.
2.- Mientras tanto, el candidato a gobernador del PRI-PRD-PAN, meses antes y durante la campaña electoral, repartía despensas –especialmente en las zonas rurales–, hizo campaña todos los días, lo cual le daba ventaja, incluso llegó a decir que podría ganar por default, a lo que le contestábamos que perdería por nocaut.
Los factores reales de poder que concibieron la alianza PRI-PRD y luego con la candidata del PAN, la mantuvieron política y económicamente, bajo una visión tradicional, ya que sostenían y confiaban en las estructuras electorales de sus partidos, esto es que tendrían el control de las casillas –donde se reciben los votos– y del proceso electoral para poder manipular el resultado y utilizar trampas electorales, como: compra y hostigamiento de representantes de casilla de Morena –o impedir que se presentaran el día de la jornada electoral; amenaza directa de grupos armados a electores para que votaran por esa alianza; obligaron en algunas casillas a votar sin mamparas, violando la secrecía del voto, y ya de plano la compra del voto. Por ello es que bajo esta lógica, el 6 de junio, día de la jornada electoral, antes de que se cerrara la votación en las casillas, proclamaron un supuesto triunfo electoral.
3.- La postura del candidato y de los mecenas de la alianza PRI-PRD-PAN, respecto del proceso y la jornada electoral, se fue modificando radicalmente en los días previos, el día de la jornada electoral y en los días inmediatos siguientes. Antes de la jornada electoral, reconocían el gran trabajo de las instituciones electorales, como el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del Estado de Guerrero –IEPC– y de los ciudadanos que participaban como funcionarios de casilla. Pero cuando el Programa de Resultados Electorales Preliminares –PREP– comenzó a funcionar y las tendencias no les favorecían, lo descalificaron; luego uno de los más fervientes animadores de la alianza, los conminó a reconocer con dignidad su derrota –aunque de inmediato se desdijo; ya cuando el órgano electoral –IEPEC– por conducto de su Consejo General realizó el cómputo y declaró como ganadora a Evelyn Salgado, arguyeron que el órgano electoral había actuado con parcialidad y que se había cometido fraude electoral, por lo que decidieron impugnar la elección, a sabiendas de que no procedería. Esto obligó al gobernador a posponer el inicio del proceso de entrega-recepción.
4.- Ahora, el Tribunal Electoral del Estado ha emitido una sentencia aprobada por unanimidad, en el sentido de que la impugnación del PRI-PRD-PAN es infundada, lo cual quiere decir que no tiene sustento legal, toda vez que alegaron que el Presiente de la República Andrés Manuel López Obrador intervino en el proceso electoral a favor de Morena –lo cual nunca ocurrió– y que la candidata ganadora –Evelyn Salgado– era inelegible, diciendo que no participó en el proceso interno de Morena, lo cual es falso, en razón del que el TRIFE obligó a Morena a sustituir su candidato a gobernador, además de que el propio Tribunal Electoral local ya había resuelto este tema, declarando que sí era elegible. Al momento de escribir este artículo, el candidato del PRI-PRD-PAN, no había fijado una postura en el sentido de continuar el proceso impugnativo, lo cual sería infructuoso.
El gobernador del estado ha reaccionado correctamente, al reconocer a Evelyn Salgado como gobernadora electa y ha planteado iniciar ya los acercamientos para la entrega recepción, lo cual debe ocurrir en los próximos días y con ello comenzar una transición institucional, en un ambiente de estabilidad política hacia el inicio de la Cuarta Transformación en Guerrero.
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