8 marzo,2024 12:59 pm

Visibilizan la lucha de madres de desaparecidos

 

Ciudad de México, 8 de marzo de 2024. En este 8 de marzo no hay nada que festejar para la señora Rosa González.

Desde el 2010 que no ve a su hija Brizeida Anahí González González, que desapareció un 17 de octubre en el municipio de Marín, Nuevo León.

Para Rosy este día es para visibilizar la lucha de aquellas madres que buscan a una hija o un hijo desaparecido.

Ella lleva casi 14 años cargando con el peso de no saber qué le pasó a su hija Brizeida.

“Hoy no tenemos nada que festejar”, lamentó, “pero no tenemos chance de llorar porque hoy es tiempo de luchar”.

“Vinimos aquí con otras madres para alzar la voz y que las demás personas sepan lo que estamos viviendo”.

Junto a su esposo, Rosy salió desde las 5 de la mañana de Marín hasta el centro de Monterrey para reunirse con otras 50 mujeres del colectivo Agrupación de Mujeres Organizadas por los Ejecutados, Secuestrados y Desaparecidos (Amores) para realizar una protesta pacífica en la Macroplaza.

Con pancartas y lonas, las activistas estuvieron desde la mañana en la Explanada de los Héroes y realizaron una caminata cargando con las fotos de sus familiares desaparecidos.

Algunas mujeres aprovecharon las vallas metálicas antimotines para pegar cartulinas con mensajes exigiendo justicia.

En un comunicado, el colectivo Amores aprovechó el día para exigir un freno a las desapariciones.

“Conmemoramos el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, luego de que mujeres murieron masacradas por levantar la voz ante la explotación laboral y en su defensa marcharon por sus derechos.

“En el grupo Amores somos mujeres, madres, esposas, hermanas, abuelas, victimas indirectas que vivimos con dolor e incertidumbre, sacado adelante a nuestras familias y la mayoría de nosotras ha desarrollado enfermedades a partir de la desaparición de un ser querido”.

 

Texto y foto: Agencia Reforma