28 agosto,2023 4:38 am

Vuelven ataques con drones a Nuevo Caracol y hay un muerto, denuncia el Centro Minerva  

 

Pide el director Filiberto Velázquez que el gobierno dé garantías para la vida y seguridad. Señala que desde mayo, la Familia Michoacana está provocando terror en pueblos de la ribera del Balsas. Anuncia una caravana para llevar alimentos

 

 

Chilpancingo, Guerrero, 28 de agosto de 2023. El Centro de Derechos de las Víctimas de Violencia Minerva Bello denunció que nuevamente el poblado de Nuevo Caracol, municipio de Heliodoro Castillo (Tlacotepec), fue atacado con proyectiles desde drones, que tuvo como resultado un muerto, este sábado al medio día.

“Necesitamos ayuda; nos aventaron ayer (sábado) 20 bombas y hoy ocho”, dice una mujer, quien agrega que la gente no puede salir de sus casas y necesitan agua.

Anunció que este martes 29, defensores partirán en una caravana humanitaria para llevar víveres a esta localidad, asolada por un grupo delictivo.

En conferencia de prensa, el director del Centro, José Filiberto Velázquez Florencio, informó que solicitó al Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas acompañamiento en esta visita, aunque saben que la respuesta será negativa, porque ya les han dicho que este tipo de acciones no está en su plan de protección.

Asimismo, indicó que requirieron apoyo a la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos de Guerrero, para garantizar la labor de los defensores y periodistas que vayan a la cobertura.

“Vamos a llevarles alimentos, porque los camiones repartidores de leche, y en general de los productos de la canasta básica, no pueden llegar al pueblo debido a que están amenazados, por el grupo de la Familia Michoacana (FM), que opera en esa región”, dijo.

El sábado, en un comunicado, Velázquez informó que, vía telefónica pobladores del Nuevo Caracol le dijeron que desde el mediodía comenzaron los ataques.

Recordó que el pasado 3 de mayo, casi la mitad de la población se desplazó de manera forzada a Tlacotepec para intentar resguardarse de las agresiones, pero “decidieron retornar para poder trabajar reinstalándose en su comunidad el 19 de mayo, sin las condiciones necesarias para un retorno seguro”.

Añadió que el Centro hizo un exhorto hace algunas semanas a las autoridades para poner a salvo a los pobladores, sin obtener respuesta.

Insistió en que, de manera emergente, las instituciones de gobierno den garantías de salvaguardar la vida, seguridad e integridad física y sicológica de las familias, además de que se investiguen los ataques armados perpetrados y se dé el cese inmediato de las agresiones.

Este domingo, en conferencia de prensa, añadió que la desaparición de siete caporales y de los pescadores, que denunciaron vecinos de Nuevo Balsas y Mezcala con el cierre de la carretera federal el viernes, está relacionado con los ataques en El Caracol, por el mismo grupo.

Con una fotografía de una cancha de la comunidad de Tetela del Río, con un hoyo en el techo, producto de un ataque de drones, denunció que desde mayo La Familia Michoacana está provocando terror en comunidades ubicadas en la ribera del Balsas, desde Cocula, Telolopapan y Apaxtla.

Sobre el Nuevo Caracol indicó que ya van tres episodios, uno en mayo y dos en agosto. Presentó los audios de dos mujeres que señalaron el ataque con drones durante dos días y la falta de alimentos para los niños. Una mencionó que, al parecer, uno de los proyectiles habría caído sobre los agresores, y esperaban que eso diera fin a los ataques.

“Cuando fuimos en mayo, con el director de Gobernación, hubo presencia de la región militar de Teloloapan, quedaron de brindar más vigilancia. En la propia presa hay fuerzas militares, que sólo protegen la presa”.

Insistió en el diseño de un plan de protección permanente, para pacificar y que atienda los orígenes de la violencia, la precariedad y falta de servicios.

Aclaró que siempre ha habido conflicto en la zona, pero desde mayo está afectando a la población y su economía, y empezaron los retenes y el bloqueo de caminos.

 

 

Los retenes en el Nuevo Caracol impiden el paso de la fuerza pública, dice el director de Gobernación

En consulta telefónica el director de Gobernación, Francisco Rodríguez Cisneros, señaló que la población del Nuevo Caracol sostiene que los retenes impiden el libre tránsito de las fuerzas de seguridad.

Mientras estén cerrados los únicos dos caminos, no pueden realizar acciones en la zona, indicó.

Aseguró que los militares han realizado “aseguramientos y detenciones muy importantes”. Por ello, insistió en que los pobladores permitan a las autoridades realizar sus actividades.

“Les hemos dicho que no somos sus enemigos, ni el gobierno federal, a través de la Sedena, ni el estado, con la Secretaría de Seguridad Pública; somos aliados, no tenemos vinculación con actividad delictiva”.

Aclaró que, cuando los cuerpos de seguridad encuentran hostilidad, no se van a confrontarse con las personas que consideran víctimas. Insistió en que no van a criminalizar, ni a realizar investigación, sino a generar estabilidad y orden.

Pero, añadió que “si alguien está fuera de la ley, tendrá que sujetarse a ella, trátese de quien se trate”.

De la caravana humanitaria que anunció el Centro Minerva Bello, sólo dijo que es respetuoso de todas las expresiones, y que han hablado con el comisario de Nuevo Caracol, y no había mencionado esta acción.

Aseguró que están en constante comunicación, incluso el día anterior, le pidió vía telefónica que se abriera el paso a seguridad pública.

 

 

Texto: María Avilez Rodríguez y Lourdes Chávez / Foto: Jessica Torres Barrera