Abu Dabi, Emiratos Árabes Unidos, 16 de diciembre 2017. El Real Madrid puso este sábado el broche de oro a un 2017 casi perfecto al vencer al Gremio por 1-0 en la final del Mundial de Clubes de futbol, su quinto título en los últimos seis meses.
Cristiano Ronaldo decidió el partido en el Zayed Sports City Stadium de Abu Dabi con un gol de tiro libre en el minuto 56 y convirtió al actual campeón de Europa en el primer equipo que gana dos ediciones seguidas del Mundial. La estrella portuguesa anotó un “hat-trick” en la final del año pasado y hoy volvió a ser el hombre decisivo ante un Gremio que no llegó ni a inquietar.
El Real Madrid ganó este año la Liga española, la Liga de Campeones, las Supercopas de Europa y España y ahora el Mundial. Sólo le faltó la Copa del Rey para poder igualar la gesta del Barcelona de Josep Guardiola en 2009, el único equipo que conquistó el “sextete”.
El tercer Mundial de Clubes en las vitrinas del Real Madrid -más otras tres Copas Intercontinentales- supone además el octavo título para el técnico francés Zinedine Zidane. Ocho títulos en menos de dos años.
Los blancos mejoraron notablemente la imagen que dieron en semifinales, donde vencieron por un ajustado 2-1 al modesto Al Jazira, y recibieron una gran inyección de moral tras unas últimas semanas con más dudas que certezas en su juego. El título llega además a siete días de recibir al Barcelona en un clásico vital para su futuro en la Liga española, donde está a ocho puntos de los azulgrana.
Zidane apostó por el once titular que ganó en junio la Champions en Cardiff. Y el Real Madrid recuperó viejas sensaciones, pues dominó de principio a fin, aunque volvió a sufrir la falta de puntería, su Talón de Aquiles esta temporada.
Los primeros compases del partido respondieron a lo que todo el mundo esperaba: el Real Madrid adueñándose de la pelota y el Gremio haciendo honor a su fama de equipo duro. Pedro Geromel cazó a Cristiano Ronaldo en el minuto 1 y le clavó los tacos en el gemelo.
El dominio del Real Madrid tardó en traducirse en ocasiones, pero cuando llegó la primera, un tiro de Dani Carvajal en el minuto 20, el partido se convirtió en un asedio de los de Zidane.
Raphael Varane, Karim Benzema, Luka Modric, Isco y Cristiano Ronaldo acumularon muchas llegadas del peligro al área brasileña, pero no encontraron premio. Mediado el primer tiempo, el Real Madrid había disparado siete veces y el Gremio todavía no había visto de cerca a Keylor Navas.
El primer aviso del campeón de la Libertadores fue en el minuto 28. Tras una falta de Casemiro a Luan -que le valió una amarilla al centrocampista blanco-, Denilson disparó con muchísima potencia y a punto estuvo de sorprender a Navas.
La ocasión más clara la tuvo Cristiano Ronaldo en el minuto 38, pero en vez de golpear al primer toque cuando estaba delante del portero Marcelo Grohe, intentó un recorte y le robaron la pelota. Poco después, el Balón de Oro lo probó con una falta.
Con un Modric superlativo en el medio del campo, el Real Madrid estaba mostrando su mejor cara, pero el encuentro llegó al descanso sin goles.
La solución para el Real Madrid llegó en el minuto 56. Cristiano Ronaldo sufrió una falta en el balcón del área, agarró la pelota, la besó y la colocó sobre el verde. Resopló, disparó, la barrera se abrió y el balón acabó en el fondo de las redes.
La sentencia pudo llegar minutos después, cuando el árbitro anuló un gol del portugués por fuera de juego. Y en el minuto 65, Modric disparó al palo con un potente remate desde fuera del área, pero pasaban los minutos y el partido seguía abierto. Un gol del Gremio, con Luan a los mandos, y amenazaba la prórroga.
Pero éste no llegaría nunca y siempre estuvo más cerca el 2-0 que el 1-1. Los 90 minutos acabaron con 20 tiros del Real Madrid y uno del Gremio (y no fue a puerta), reflejo de la diferencia entre uno y otro, entre el futbol europeo y el sudamericano. De las últimas 11 ediciones del Mundial, el campeón de la Libertadores sólo ganó una, la de 2012 con la firma del Corinthians.
Texto:DPA/Foto:EFE
