24 mayo,2024 2:43 am

La colonia Bella Vista de la capital, en “muy alto riesgo” por lluvias; les urge un muro de contención

Chilpancingo, Guerrero, a 24 de mayo de 2024.- Desde 2013, después de los daños de Ingrid y Manuel, el Ayuntamiento de Chilpancingo no les ha construido un muro de contención a los vecinos de la colonia Bella Vista, al poniente de Chilpancingo, que se encuentran en riesgo “muy alto” debido a los derrumbes que podrían ocurrir en la temporada de lluvias.

De acuerdo con el Atlas de Riesgos elaborado por la actual administración municipal, la colonia Bella Vista, ubicada al poniente de la capital, a un lado de la popular colonia  Vista Hermosa, se encuentra en un “muy alto” riesgo por los derrumbes.

Uno de los vecinos del andador Rafael Galván, manzana T, Silvestre Arizmendi, informó ayer que desde 2013, cuando ocurrieron los daños por la tormenta tropical Manuel y el huracán Ingrid, han pedido a las autoridades municipales una obra de mitigación para evitar nuevos daños.

La obra consiste en el relleno del área donde ocurrió el derrumbe, pero dijo que a pesar de que no implica mucha inversión, no han recibido respuesta.

Dijo que los distintos presidentes municipales han ido a reunirse con los vecinos pero ninguno les ha hecho la obra.

La casa de Silvestre se encuentra a menos de 100 metros del derrumbe ocurrido en 2013 y dijo que el temor es permanente durante las temporadas de lluvias.

Como la de él hay otras 10 familias de esa manzana que se encuentran en riesgo muy alto, pero reiteró que las diferentes autoridades municipales no les han dado respuesta a su petición de que terminen el muro de contención y rellenen la zona para que las familias estén más seguras.

Frente al andador Rafael Galván, del otro lado de la barranca, está la colonia El Mirador, una de las que también fue destruida en el 2013 y la mayoría de las familias fueron reubicadas a lo que ahora es el Nuevo Mirador, al sur de la capital.

Silvestre contó que el problema no es muy difícil de resolver, pues lo que hace falta es que se contraten algunos camiones de volteo y que vayan a arrojar cascajo o escombro para rellenar el desnivel y afianzar el terreno.

Los vecinos llevan viviendo ahí 40 años, pues según Silvestre, la colonia se fundó entre 1984 y 1985.

Indicó que desde entonces han vivido en permanente riesgo y en el 2013 durante las lluvias de Ingrid y Manuel unas 12 familias resultaron damnificadas.

La mayoría de ellas fueron reubicadas al Nuevo Mirador, pero algunas se regresaron y siguen habitando sus casas a pesar del riesgo.

Algunas de las casas siguen derribadas, sin ventanas ni puertas y abandonadas desde el 2013 cuando fueron afectadas por los derrumbes.

Otro de los vecinos, Alberto Cortés, también vecino del andador Rafael Galván, denunció que desde cuando construyeron el muro de contención para evitar riesgos, lo levantaron mal y fue la causa de que durante las lluvias de septiembre de 2013 se fuera abajo arrastrado por el peso del agua y tierra.

Indicó que desde ese año han pedido a las autoridades municipales que reconstruyan el muro y rellenen la zona, pero no han tenido respuesta.

“Presidente municipal que entra, presidente municipal que le pedimos, pero sólo nos dicen: vamos a tratar de arreglar y nunca lo hacen”, denunció Alberto Cortés.

Se quejó: “Aquí los presidentes municipales no nos han hecho absolutamente nada, incluso este andador (Rafael Galván) lo pavimentamos con cooperación y trabajo de los vecinos”, denunció.

Explicó que los vecinos abrieron “a pico y pala” la calle que bordea la barranca que divide a la colonia Bella Vista con la Mirador, pero en el 2013 la parte baja de la calle se fue con el derrumbe.

“Se dañó para abajo y ahí quedó y hasta la vez los presidentes municipales no han hecho nada y ahora sólo les estamos pidiendo que levanten el muro y que lo rellenen”, insistió.

A más de 10 años de los daños provocados por las lluvias de Ingrid y Manuel, la barranca sigue sirviendo de basurero de los vecinos de las colonias cercanas, lo que aumenta el riesgo no sólo por los derrumbes por el terreno que es irregular, sino por las inundaciones.

Texto: Zacarías Cervantes / Foto: José Luis de la Cruz