27 junio,2022 5:49 am

Desaparición y homicidio: el engaño del gobierno de la CDMX

Pensándolo Mejor

Gibrán Ramírez Reyes

 

El gobierno local y el federal han celebrado repetidamente que los homicidios han disminuido en la Ciudad de México y que ésta es, actualmente, más segura que metrópolis de su calado. Según se presume, el homicidio en la Ciudad de México disminuyó en más de 60 por ciento. El promedio diario sería de 1.9 casos y se trataría de un éxito irrefutable de la administración capitalina. Creerlo es el riesgo que se corre al mirar un dato y desentenderse del contexto. Si se toma perspectiva, la mentira y el manejo engañoso y doloso de la estadística son evidentes. La clave está en el incremento fuera de toda proporción de las desapariciones durante este sexenio en la capital del país. Si se consulta el Registro Nacional de Personas Desaparecidas o no localizadas(versionpublicarnpdno.segob.gob.mx) y se establece una búsqueda con filtros, resultará que, durante el gobierno pasado –del 5 de diciembre de 2012 al 5 de diciembre de 2018– desaparecieron y no fueron localizadas 350 personas en la CDMX (0.159 por día). En el gobierno actual –del 5 de diciembre de 2018 al 26 de junio de 2022–, han desaparecido 2 mil 665 personas (2.056 por día). Según esos datos, el incremento en las desapariciones es de casi trece veces.

De considerar dicha desaparición masiva de personas y sumarla al mismo promedio de 1.9 homicidios diarios publicitado por el gobierno capitalino en mayo de 2022, el resultado sería de 3.95 homicidios o desapariciones cada día de este gobierno. 3.95 personas que sus familias no volverán a ver. La situación, sin embargo, es peor. En los mil 296 días de este gobierno hasta el 23 de junio, sucedieron 4 mil 36 asesinatos según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP). El promedio por día ha sido entonces de 3.11, mientras el promedio de ambos –homicidios y desapariciones— sería de 5.17 personas cada día. El sexenio pasado –entre el 5 de diciembre de 2012 y el 5 de diciembre de 2018— 5 mil 487 personas fueron asesinadas en total, también según datos del SESNSP. Si se añade el dato de las personas desaparecidas y no localizadas dicho sexenio, obtendríamos un promedio de 2.62 homicidios o desaparecidos por cada día de ese gobierno. De tal forma, el relativo éxito en la disminución de los homicidios es realmente resultante de un manejo tramposo de las estadísticas. Un invento mediático para tapar una realidad opuesta. Hay especialistas que han querido desentrañar la “hazaña” de la reducción del homicidio doloso. Mejor harían en explicar la desaparición de personas y su crecimiento inusitado. No hay manera de que sean hechos independientes.

Claudia Sheinbaum ha dicho que el número de desaparecidos incrementa porque ahora no se pide denunciar hasta pasadas 72 horas. No explica por qué, si no desaparecieron, no se registran después en las personas localizadas. Creerlo abriría la puerta a negar, con base en explicaciones anecdóticas, las más de 100 mil desapariciones que dicho registro acredita en todo el país, una cifra de referencia incluso internacional. Deben escucharse todas las hipótesis y marcadamente a los colectivos de víctimas. La única posibilidad de que esto no sea cierto es que haya un error mayúsculo en el Registro Nacional (RNPDNO) de la Secretaría de Gobernación del gobierno federal mismo. La fe de quienes quieren seguir creyendo en la palabra de los gobernantes quizá dirá que seguramente es eso, o que, por vez primera, se registra la realidad en su dimensión.