4 febrero,2023 5:34 am

El cártel que agobia a tu municipio

De Norte a Sur

Silber Meza

 

Este país está colmado de cárteles. Para ponerle una cifra: 80 cárteles del crimen organizado. Sean Jalisco Nueva Generación, de Sinaloa, Los Zetas, del Golfo y decenas más.

La cifra es resultado del análisis del mapeo que ha hecho la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en los últimos cinco años, al cual pudimos tener acceso con la filtración del grupo identificado como Guacamaya. La obtuvimos en el equipo de investigación de El Universal y publicamos un mapa digital llamado “México, país de Cárteles. Aquí van algunos detalles.

Tomando en cuenta la geografía de cada municipio, 75 por ciento del territorio nacional tiene la presencia de al menos una organización criminal. El Cártel Jalisco es la que más ha crecido en los últimos años, es la que opera en más municipios pero el Cártel de Sinaloa, su acérrimo rival, es el que se halla esparcido en más territorio.

Hay localidades que tienen solamente un cártel en su zona, y existen otras que suman hasta nueve bandas delictivas.

Entre los elementos menos conocidos que se pueden localizar en el mapa está un grupo criminal llamado Cártel San Luis Potosí Nueva Generación, que es una escisión del de Jalisco.

Otro elemento poco mencionado en lo nacional es la enorme fragmentación de Los Zetas y el Cártel del Golfo. Este último con facciones como Espartano, El Señor de la P, Squalo y Escorpión.

En el mapa digital se puede buscar estado por estado y municipio por municipio. Desgraciadamente, en la mayor parte del país actúan criminales organizados que lo mantienen en llamas.

Guerrero

Según un documento de inteligencia militar de 2021, en el estado de Guerrero coexisten 12 grupos delictivos que son considerados por la Defensa Nacional como generadores de violencia: Beltrán Leyva, Caballeros Templarios, Cártel de la Sierra, Cártel Jalisco Nueva Generación, Cártel Independiente de Acapulco (Cida-Los Marín), Guardia Guerrerense, Guerreros Unidos, La Familia, Los Ardillos, Los Granados, Los Jefes y Los Viagras-Sangre Nueva Guerrerense.

En el documento se advierte que en cinco regiones del estado se localiza la mayor parte de las actividades delictivas: Acapulco, Centro, Costa Grande, la Montaña y Tierra Caliente. En estas áreas, y hasta el año mencionado, predominan y disputan los grupos delictivos Jalisco Nueva Generación, La Familia, Guerreros Unidos y Los Caballeros Templarios. Estos tres últimos son considerados “de menor nivel”.

En los documentos de GuacamayaLeaks existen informes que explican a detalle la formación del Cida, y su influencia en Acapulco.

En Zacatula, cercano al puerto de Lázaro Cárdenas, Michoacán, se mantienen en disputa el Jalisco contra Guardia Guerrerense.

País de cárteles

En el trabajo realizado por Samuel Aguilar, Daniela Guazo y yo, contamos que de los 32 estados de la República, solo en 18 hay zonas sin cárteles, el resto está totalmente infestado.

El sur-sureste es la región con menos presencia de grupos delictivos, pero está lejos de ser una zona de paz. Los cárteles se han ocupado de invadir la línea fronteriza de Chiapas y estados como el apacible Campeche y el movido Quintana Roo.

Pero el sur no solamente tiene presencia del crimen nacional: en Tenosique, Tabasco, opera la Mara Salvatrucha 13, originalmente de El Salvador, ahora internacional, con brazos en Honduras, México, Estados Unidos. También está en Palenque, Chiapas, y en Candelaria, Campeche.

De acuerdo con la información militar, la Mara pelea en territorio mexicano contra los cárteles mexicanos. Entre sus líderes se encuentran Rubén Darío Rodríguez Sauceda, Ednio López Carpio (alias El Dark), Jesús Abdías Castro Domínguez (alias Chuy), Carlos Ernesto Sánchez Villeda y José Luis Jimenez Cruz, alias (La Parka).

Desde que se inició la llamada “guerra contra el narco”, durante el sexenio del presidente Felipe Calderón, los cárteles han pasado de buscar negociaciones con el gobierno federal a enfrentarlo, de rehuirle a medirse en fuerzas y balazos, de buscar la pax narca a incendiar el país con tal de obtener más territorio, rutas, dinero y poder.

Mientras eso sucede, se van acabando las zonas de paz en México. Décadas atrás los territorios ocupados por el crimen eran contados, ahora lo complejo es encontrar un pedazo de tranquilidad.