7 abril,2018 8:25 am

El italiano Di Giannantonio, el más rápido en malas condiciones

Texto: EFE / Foto: (@FabioDiggia21 ‏) Twitter
Termas de Río Hondo, Argentina, 7 de abril 2018. El italiano Fabio di Giannantonio (Honda) se convirtió en el piloto más rápido de la tercera y última tanda de entrenamientos libres del Gran Premio de Argentina de Moto3, que se disputó con las malas condiciones del circuito de Termas de Río Hondo.
No lo tuvieron nada fácil los pilotos de Moto3 en su primera tanda de entrenamientos de la segunda jornada debido a la lluvia que cayó durante la noche y que, por una parte, limpió de goma el trazado pero también dejó algunos restos de arena por lo que resultó importantísimo mantener “la línea” para evitar sustos.
Por todo ello, los registros de la primera jornada prevalecieron en todo momento, al no poder romper con las pequeñas Moto3 la barrera de los dos minutos para cubrir los 4.806 metros del trazado argentino.
La tanda estuvo casi en todo momento dominada por los pilotos italianos, primero con Marco Bezzecchi (KTM) como líder y posteriormente con Fabio di Giannantonio (Honda), que en la clasificación del primer día se encuentran en posiciones muy retrasadas pero hoy supieron aprovechar las condiciones de la pista para encaramarse a los primeros puestos; si bien estos no valen para la formación de salida.
Tras ellos estuvo el español Jorge Martín (Honda), ayer quinto, a quien poco después superaron tanto el japonés Tatsuki Suzuki (Honda) como el español Arón Canet (Estrella Galicia 0’0 Honda), protagonista ayer de un incidente con el kazajo Makar Yurchenko (KTM), por el que luego se acercó a pedirle disculpas.
Nada cambió en los minutos finales, salvo que el italiano Enea Bastianini (Honda) superó a Canet -quinto- y el argentino Gabriel Rodrigo (KTM) hizo lo propio con Martín -octavo-, mientras que el debutante Alonso López (Estrella Galicia 0’0 Honda) mejoró notablemente y ascendió hasta la undécima plaza de la tanda.
Entre las caídas destacó la del italiano Niccolo Antonelli (Honda), pupilo del equipo de Paolo Simoncelli, que se fue por los suelos, sin consecuencias para su integridad física, en la curva trece, y la del propio Arón Canet, quien casi al final de la sesión se fue al suelo en la curva uno.