23 septiembre,2022 4:38 am

En Iguala hubo un “crimen de Estado”, señalan diputados de Morena y condenan su encubrimiento

En vísperas de cumplirse ocho años de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, se solidarizan con los padres de los jóvenes y condenan la colusión que hubo de la delincuencia con las autoridades. Deploran en la sesión la “falta de respeto” del perredista Bernardo Ortega, quien en el conteo de los estudiantes ausentes enumeró hasta 46, y luego se disculpa

Chilpancingo, Guerrero, 23 de septiembre de 2022. A unos días de cumplirse ocho años del ataque y desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa, diputados de Morena intervinieron en la tribuna del Congreso local para recordar y condenar la colusión e intervención de autoridades de distintos ordenes de gobierno en este hecho que calificaron como “crimen de Estado”. Al final contaron hasta 43 y demandaron justicia, acto que fue interrumpido por el perredista Bernardo Ortega Jiménez, quien riendo continuó el conteo hasta el 46, lo que generó reclamos por la “falta de respeto”.

En la sesión ordinaria del pleno del Poder Legislativo, en el último punto del orden del día, en intervenciones, la diputada morenista Nora Velázquez Martínez intervino por los ocho años de la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa. Afirmó que no cabe duda de que este hecho fue un crimen de Estado, “ésta que fue la consigna legítima de las madres y padres de los estudiantes en su lucha por encontrar con vida a sus hijos, se convirtió en una verdad lacerante, un hecho que puso en evidencia el grado de descomposición del régimen”.

La morenista dijo en tribuna que no solo se trató de “un acto de exterminio a cargo de un grupo de la delincuencia organizada en complicidad y coordinación con autoridades federales, estatales y municipales, sino todo un proceso pensado, planeado y coordinado desde las más altas esferas del gobierno federal, para encubrir los hechos”.

Y citó fragmentos contundentes del Informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa, presidida por Alejandro Encinas, “al filo de las 22:45 horas del 26 de septiembre de 2014, tras los hechos de violencia y la persecución, se dio la orden de desaparecer a los estudiantes…

“No hay indicio alguno de que los estudiantes se encuentran con vida. Por el contrario, todos los testimonios de evidencias acreditan que éstos fueron arteramente ultimados y desaparecidos…”.

Además de que durante los cuatro años que ha durado la investigación, “han muerto o han sido asesinados 26 personas claves para obtener información” y se acreditó “plenamente la colusión y la intervención de autoridades de distintos órdenes de gobierno con los policías municipales para llevar a cabo la desaparición de los muchachos”.

Y que la “verdad histórica fue una acción concertada del aparato organizado del poder, desde el más alto nivel de gobierno que ocultó la verdad de los hechos; alteró las escenas del crimen; ocultó los vínculos de autoridades con el grupo delictivo y la participación de agentes del Estado, fuerzas de seguridad y autoridades responsables de la procuración de justicia en la desaparición de los estudiantes. En resumen, se trató de un crimen de Estado”.

Nora Velázquez dijo que “no hay una expresión, una frase, o algo que describa el dolor y el sufrimiento de las madres y padres que han visto desaparecer a sus hijos. Es una situación que no encuentra acomodo en razón alguna, no hay nada que justifique o explique semejante suplicio. La desaparición de una persona rompe a la familia, rompe proyectos de vida, rompe la tranquilidad, se impone la zozobra y la incertidumbre día a día”.

La morenista lamentó que los padres de los normalistas no solo han luchando en contra de un sistema de procuración e impartición de justicia “que no les ha dado respuesta, sino también, en contra de la descalificación y criminalización a ultranza”, y se comprometió a “contribuir a que este Congreso los acompañe, en el ámbito de nuestras atribuciones, a la búsqueda de la verdad, la presentación de sus hijos y una estricta impartición de justicia”.

Afirmó que en “la Cuarta Transformación se acabó la impunidad, la corrupción, se acabaron los privilegios y se ha roto el pacto de silencio”. Llamó a que el Congreso no vuelva a cometer “el mismo error de Legislaturas anteriores y ser omiso e insensible ante tales violaciones a los derechos humanos”.

El morenista Alfredo Sánchez Esquivel dijo que a ocho años de lo ocurrido en Iguala, “un acto atroz se ha normalizado, pasa desapercibido, de muchos sus rostros muestran enfado, desencanto. Pero señores poco a poco avanza la verdad, hubo un conclave de líderes, de políticos, de funcionarios que armaron esa verdad histórica, y ojalá sigan brotando nombres y se haga justicia”.

Dijo que a pesar de que la mayor parte de la sociedad solo ve a estudiantes bloqueando carreteras, y las protestas en las sedes del Poder Legislativo, Ejecutivo y Judicial y se dice que “son muy agresivos”, por el contrario “su formación es generar conciencia social” y son líderes en sus comunidades y maestros en las aulas, y en Morena “también les debemos” porque ayudaron a llevar el mensaje de “la Cuarta Transformación” a las comunidades más alejadas del estado.

Mientras Nora Velázquez y Alfredo Sánchez hablaban en tribuna, la mayoría de los diputados del PRI, PRD abandonaron el salón.

Al concluir la intervención de Sánchez Esquivel los diputados de Morena aún presentes iniciaron el conteo del uno al 43, algunos de ellos como Beatriz Mojica Morga, María Flores Maldonado, Osbaldo Ríos Manrique, Nora Velázquez, mantenían el puño levantado. Por su parte Bernardo Ortega se mantuvo a lado de Yoloczin Domínguez y desde ese espacio con señas y riendo le pidió a la priista Alicia Zamora Villalva que se parara para no desairar a los morenistas.

Cuando el conteo llegó a 43, los morenistas gritaron “justicia”, y Bernardo Ortega continuó “44, 45, 46” y después mientras continuaba riendo dijo, “¡ay perdón!”, y se regresó a su curul mientras desde sus lugares morenistas le reclamaron.

“Ese es el nivel de respeto a los 43”, recriminaron Alfredo Sánchez y María Flores, pero la presidenta de la Mesa Directiva no dijo nada al respecto y clausuró la sesión.

Disculpa de Bernardo

Por la tarde en un breve comunicado, Ortega ofreció una disculpa por lo ocurrido en la sesión.

“Durante el conteo por la desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa que se realizó este jueves por la tarde en el Pleno del Congreso de Guerrero, por una distracción proseguí el conteo y aunque de inmediato rectifiqué, ofrezco una disculpa al movimiento social que exige su presentación con vida”.

En un segundo y último párrafo señaló: “Soy un hombre de izquierda, lo he acreditado a lo largo de mi trayectoria política, mis intervenciones en tribuna y mi trabajo como legislador, así lo acreditan soy solidario con las causas de la gente y por ello con humildad, hago público este pronunciamiento”.

Texto: Rosalba Ramírez García / Foto: Jesús Eduardo Guerrero