22 junio,2020 10:52 am

Esperan trabajadores de Tlacopanocha con ansia la reapertura económica de las playas

 

Acapulco, Guerrero, 22 de junio de 2020. “Ya estamos listos para ponernos a trabajar”, fue la frase que comentaron prestadores de servicios de playa Tlacopanocha que acuden a la cocina comunitaria instalada en el Malecón, frente al Zócalo de la ciudad, y que mientras llega la comida se ponen a pescar.

Ayer antes de las 11 de la mañana como otras ocasiones la fila de objetos en el piso para apartar lugar y recibir comida era larga, los dueños de estos estaban sentados en la jardinera, otros ocupaban el tiempo para pescar y vender lo obtenido. Uno de estos últimos casos es el de Carlos Palomera Orozco, vendedor de boletos en los yates de fondo de cristal, que ayer mientras llegaba la comida pasaba el tiempo pescando.

Afirmó que junto con sus compañeros se están preparando para la reapertura de la actividad económica en la playa, y mencionó que el sábado acudieron a desinfectar las embarcaciones para evitar contagios del virus e indicó que nada más están en espera que el gobierno de “luz verde” para salir a trabajar, porque aunque es un “aliviane la comida que nos dan el comedor falta llevar ingresos a casa”, dijo.

Ayer en el Malecón eran las 11 de la mañana el sol estaba fuerte, había varias decenas de personas a la orilla pescando. Él contó que llegó a las 6 de la mañana y se va después que recibe la comida y lo que alcanza a pescar lo vende o se lo lleva a su casa.

Enseguida mostró el pescado de 500 gramos que había atrapado con cuerda y mencionó que es bueno en caldo o frito con ajo. Cuando saca más de tres los vende, 40 pesos la pieza, aunque hay días que no le va bien y nada más pesca uno y prefiere llevárselo a su casa.

Antes de la pandemia su labor era llevar paseantes a las embarcaciones de recreo Bonanza, Acarey, “pero están cerrados y haz de cuenta que me amarraron las manos, no me queda de otra que venir a pescar para comer y vender para llevar dinero para mi familia”.

Para alcanzar una ficha para recibir un poco de comida que otorga el Ayuntamiento “tenemos que estar antes de las 10 de la mañana, yo llego temprano a las 6 para tener un lugar hasta delante, porque si eres de los últimos el sol está fuerte”.

Al tiempo que mostró sus brazos para mostrar lo requemado que estaba por el sol por el tiempo que pasa en la pesca y por la espera para la comida, por ello de corazón pide a las autoridades que permitan que el 1 de julio puedan abrir las actividades para ponerse a trabajar.

Además de que ya estuvo mucho tiempo sin trabajar, mencionó que no tiene ingresos y “no me doy el gusto de comprarme algo que quiero, estoy a lo que me dan en el comedor y lo poco que saco con los peces es para sobrevivir”.

Otro de los prestadores de servicios de playa que estaba pescando con una cuerda dijo que “nosotros queremos que las autoridades digan que ya no podemos trabajar, tenemos dos meses sin llevar ingresos a nuestras casas y no podemos estar así”.

Aunque no dio su nombre, mencionó que es vendedor en la playa y que todos los días desde que están cerradas las playas baja a esa zona de la ciudad para formarse en la cocina comunitaria y pescar, ayer al mediodía llevaba un pescado.

Las personas que esperan por una porción de comida en el Malecón están siete hasta ocho horas unos sentados platicando o pescando. Ayer había hasta niños jugando a pescar.

Texto: Aurora Harrison / Foto. Carlos Alberto Carbajal