EL-SUR

Jueves 13 de Febrero de 2025

Guerrero, México

Opinión

Ay nanita, las promesas de Mr. Trump

Abelardo Martín M.

Diciembre 10, 2024

Sin lugar a dudas, el gobierno mexicano tendrá que estar preparado por las amenazas del más cercano “amigo” pero el más activo enemigo de México y los mexicanos, en especial los varios millones de compatriotas que arriesgaron la vida y, muchos de ellos, la mayoría, trabajan honradamente y han contribuido a la grandeza de los Estados Unidos de América, su presidente a partir de enero, mister Donald Trump.
Como empresario exitoso que ha sido toda su vida, Mr. Trump negocia duro y fuerte, como el mejor jugador de póker que con juego o sin él sube la apuesta. Él dice que nos mantiene, que gracias a los Estados Unidos comemos y nos vestimos y habrá que estar alertas por si nos suspende la manutención.
Por sí o por no, pese a que no tuvo un gran impacto en los medios, y su difusión más bien pronto se apagó, la reunión celebrada por la Presidenta Claudia Sheinbaum con los integrantes del Consejo Mexicano de Negocios tiene una trascendencia que se notará a partir del próximo año. Sobre todo si Mr Trump cumple sus amenazas y tenemos que sobrevivir por nosotros mismos.
Ante la organización que aglutina a las empresas de mayor dimensión en el país, la doctora Sheinbaum expuso el proyecto del llamado Plan México, con el cual se busca detonar la inversión y la producción en México para disminuir la importación, y generar cadenas de valor en las que se integren empresas de todos los tamaños.
A este plan se ha referido la presidenta desde antes de tomar posesión del cargo, aunque sin dar muchos detalles, y ha dicho que el programa se presentará formalmente al empezar el próximo año.
Su adelanto ante los empresarios fue visto como parte de la estrategia de respuesta a las amenazas del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien presiona al gobierno mexicano acusándolo de no impedir la migración que busca llegar al vecino país, de permitir la entrada de mercaderías chinas que desplazan la producción local y cancelan los puestos de trabajo en la región, y de no perseguir a los criminales que trafican con fentanilo, la droga que mayor daño está haciendo a la salud y a la vida de quienes han caído en la adicción en los países vecinos del norte.
Si el Plan México se prepara como una alternativa de fortalecimiento económico nacional y regional, las acciones en contra del narcotráfico también están dando resultados. El aseguramiento de más de una tonelada de tabletas de fentanilo, unas 20 millones de dosis que podrían haber dañado al 15 porciento de la población norteamericana, fue reconocida y agradecida a la mandataria mexicana por el presidente Joe Biden.
Es de hacerse resaltar que no es la única acción en este sentido, pues en los poco más de dos meses que lleva la doctora Sheinbaum en el poder, los reportes de seguridad hablan del decomiso total de unas 50 millones de dosis del estupefaciente.
En materia de migración, las corrientes de hombres y mujeres que buscan un mejor destino para sus vidas han sido contenidas en territorio mexicano, no por la represión, sino por el ofrecimiento de visas temporales y apoyos que han sido medidas eficaces para hacer desistir a la mayoría de los migrantes de llegar hasta la frontera norte.
Ahora, ante el amago de deportar a indocumentados mexicanos que desde hace años y décadas se han radicado en Estados Unidos pero no han podido regularizar su condición migratoria, el gobierno de Sheinbaum ha hecho ver que de cumplirse la amenaza el próximo año, en México habrá capacidad de respuesta y de protección y defensa para los paisanos.
Tiempos muy movidos y de grandes retos le han tocado desde su estreno a la presidenta de México, pero por lo que ya se aprecia nuestra mandataria no se ha achicado ni amilanado. Por el contrario, con entereza e inteligencia está encarando la compleja situación con la que se ha encontrado, está “agarrando al toro por los cuernos” como se decía en el argot de la fiesta brava. No le resultará fácil, pero en ello será fundamental que se mantenga el apoyo de la población, con el cual llegó y que se ha mantenido e incluso se ha acrecentado en lo que va de su gobierno.
En todo ello, una condición imprescindible será abatir los niveles de inseguridad y criminalidad que en la actualidad sufren vastas regiones del país. La operación en este rubro empieza a notarse. Destaca por su importancia la intervención que se lleva a cabo en Sinaloa, una entidad que se descontroló desde antes que diera inicio el actual sexenio, y que lleva tres meses sin poder superar una oleada de violencia que tiene aterrada a la población y paralizada la economía.
En ese contexto es que en Guerrero, previamente a la celebración este martes de una reunión del Sistema Nacional de Seguridad, se ha puesto en marcha un programa con la coordinación de los gobiernos federal, estatal y municipales, en esa dirección de pacificación, al que se la ha denominado “Guerrero por la paz”, el cual estará centrado en los municipios de Acapulco, Chilpancingo e Iguala, para atender las causas que generan la violencia y devolver la tranquilidad a las comunidades.
Una vertiente interesante de esta iniciativa es que contempla como una de sus líneas la integración de las mujeres, beneficiarias de programas sociales, a quienes se ha nombrado “guerreras por la paz”, y a quienes se pretende convertirlas en líderes en las tareas de reconstruir el tejido social, operar comités vecinales y llevar a cabo jornadas comunitarias.
Se trata de una estrategia acorde a los tiempos de empoderamiento femenino, congruente con su propósito, pues las mujeres han sido siempre el pilar fundamental de la familia y de sus comunidades, y su participación desde luego enriquecerá y potenciará los esfuerzos de erradicación de la violencia.
Los resultados los iremos viendo, en todos estos órdenes, en los próximos meses y años.