EL-SUR

Viernes 26 de Julio de 2024

Guerrero, México

Opinión

¿Cómo hacemos periodismo sin que nos maten?

Silber Meza

Mayo 05, 2018

Felicito al periódico El Sur de Guerrero por sus 25 años de historia. Conozco el diario desde hace unos siete años, y llegué a él por su prestigio de medio crítico y honesto. Hoy más que siempre debemos celebrar su existencia y apoyar estos esfuerzos. Yo, en lo particular, me felicito por ser un colaborar de este medio.
El próximo 15 de mayo se cumple un año del asesinato del periodista y escritor sinaloense Javier Valdez Cárdenas. El gobierno federal, con ayuda de la fiscalía estatal, ha detectado tres presuntos asesinos materiales.
Para recordar y protestar por el crimen de nuestro querido Javier, el periódico Ríodoce, del que fue fundador, junto con un grupo de periodistas y activistas, hemos organizado una serie de actividades para los días 12, 13, 14, 15 y 16 de mayo. Se realizará un torneo de ajedrez, se presentarán el libro La Estafa Maestra y el documental No se mata la verdad; expondrán los periodistas Jorge Zepeda Patterson, Adela Navarro, Alejandro Almazán, Guillermo Osorno, Marcela Turati, Carmen Aristegui, y se hará una marcha de protesta, entre otras actividades. Lo que más me emociona, es un conversatorio de periodistas de diferentes partes de México donde charlaremos sobre la seguridad de los reporteros y de los defensores de derechos humanos que ejercen la libertad de expresión, con una pregunta central: ¿cómo hacemos periodismo sin que nos maten?
Este cuestionamiento es impensable en un país medianamente democrático donde funciona el Estado de derecho, pero aquí es algo que nos preguntamos a diario muchos compañeros. ¿Y saben qué es lo impresionante? Que seguimos haciendo periodismo, y lo vamos a seguir haciendo. Por eso el asesinato de Javier fue un acto estéril, porque su silencio forzado con balas potenció el grito desaforado de miles. Por eso ahora nadie renuncia al periodismo, y nos preguntamos cómo hacerlo con más calidad y menos riesgo.
Con Siria, México es el país más peligroso para el ejercicio periodístico en el mundo. Nuestros índices de impunidad en asesinatos de periodistas llegan a 99.75 por ciento, según un estudio publicado por el Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República. Esa es nuestra realidad seca, dura.
Sólo durante este proceso electoral que aún no termina, la Red Rompe el Miedo, coordinada por Artículo 19, ha documentado 21 ataques a periodistas, y de éstas 14 son públicas (www.informaterompeelmiedo.mx). Coloco aquí tres agresiones documentadas:
1. “La tarde del domingo 21 de enero, las y los periodistas Daliri Oropeza, Aldabi Olvera y Cristian Rodríguez Pinto fueron interceptados por cinco personas armadas en la carretera de Tepalcatepec, en Michoacán, mientras daban cobertura a la caravana del Concejo Indígena de Gobierno. Allí fueron despojados de su equipo de trabajo”.
2. “El columnista Héctor Ponce de El Debate de Culiacán, fue víctima de una campaña de desprestigio el 1 de marzo de 2018 al ser señalado por el Partido Sinaloense en un comunicado publicado en Facebook”.
3. “Familiares del periodista Miguel Villarino Arnábal fueron víctimas de intimidación y hostigamiento el día 12 de marzo de 2018 por parte de sujetos en una camioneta blanca sin placas que vigilaba una de las casas de la familia”.
Del estado de Guerrero no existe ninguna agresión pública.
¿Cómo hacemos periodismo de calidad en estas condiciones? ¿Qué hacemos para disminuir o eliminar la autocensura? ¿Cómo documentar sin ser perseguido por gobierno, políticos, narcos o grupos de poder fáctico? ¿Qué papel juegan en esto los dueños de los medios informativos? ¿Qué rol le toca al gobierno y qué se puede esperar de él? ¿Qué esperar de la sociedad y cómo la motivamos para que participe y apoye la libertad de expresión? Estas preguntas me vienen hoy a la mente, pero seguramente serán muchas más las que se expongan en el conversatorio del 16 de mayo. Ya les estaremos contando.
En Twitter: @silbermeza