EL-SUR

Viernes 19 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

Doblaje y respeto a la obra

Humberto Musacchio

Febrero 10, 2020

LA REPÚBLICA DE LAS LETRAS

 

El senador Martí Batres presentó una iniciativa para reformar las leyes federales del Derecho de Autor, del Trabajo, de Cinematografía, de Telecomunicaciones y Radiodifu-sión, así como las leyes generales de Cultura y Derechos Culturales para regular y proteger los “derechos laborales de los actores y actrices” que participan en doblajes. Cabe aclarar que, al menos hasta ahora, los empleados a sueldo pueden reclamar derechos laborales, pero no derechos de autor, de modo que los dobladores tendrán que elegir una u otra cosa. Por otra parte, se demanda la exhibición de películas dobladas en la misma cantidad que aquellas que se proyecten en su lengua original. También aquí es conveniente destacar que el doblaje atenta contra la obra cinematográfica, pues falsifica una parte decisiva de la obra audiovisual, que es la actuación. Las empresas televisoras lo vienen haciendo sin que la autoridad responsable se haya dado por enterada.

La gran Nellie Campobello

Durante varios años, la investigadora española Josebe Martínez se dedicó a estudiar concienzudamente vida y obra de Nellie Campobello, nombre de batalla de quien fue registrada como Francisca Luna, hija de Rafaela Luna y de Felipe de Jesús Moya, quienes sin estar casados procrearon varios hijos que para el Registro Civil de la época eran “naturales”, como si los vástagos de matrimonio civil fueran artificiales. Nellie, también conocida como Xica y Zobeida, nació en Villa Ocampo, Durango, y no en Parral, como alguien cree, en el año 1900 y no en 1909, 1910 ni 1913 como ella decía. Con el respaldo del general Agustín Castro, en 1921 se trasladó a la Ciudad de México donde trató a Martín Luis Guzmán –personaje definitivo en su vida–, a los grandes muralistas, sobre todo a Orozco, así como a Tina Modotti, Frida Kahlo, Nahui Ollin y el Dr. Atl, quien la animó a escribir el poemario Francisca Yo!
Tiempo después, se incorporó al ballet de Lettie Carrol, trabajó en la Secretaría de Educación Pública y en 1937 fue nombrada directora de la Escuela Nacional de Danza, cargo en el que se mantuvo durante cuatro décadas.

Editan cartucho en España

Para Josebe Martínez resultó fascinante la Campobello, una mujer que construyó su propia leyenda. Para ella escribió un sesudo y bien informado prólogo que debía acompañar la edición madrileña de Cartucho, pero la casa editorial le exigió presentar un documento en el que los herederos autorizaran la publicación. Sin embargo, se topó con el hecho de que Nellie había muerto intestada y que ninguno de los parientes de la escritora podía demostrar que poseía los derechos. Josebe recurrió al Instituto del Derecho de Autor que le respondió con ambigüedades y consultó al Departamento Jurídico de la Sogem. Finalmente, a fines del año pasado apareció Cartucho con el sello de Editorial Cátedra, lo que permitirá al público español conocer a una autora de la literatura de la Revolución Mexicana. Por supuesto, en México estamos en deuda con Josebe Martínez, quien dedicó años a este trabajo que ahora aparece.

Tapiz basado en un mural

Para conmemorar la liberación del campo de exterminio de Auschwitz, ocurrida hace 75 años, Amnistía Internacional develó un tapiz de 12 metros de largo en la sede de la Unesco, en París. La obra fue ejecutada por tejedores del taller francés Pinton y reproduce El Holocausto, mural de Manuel Rodríguez Lozano que se puede admirar en la Casa de la Condesa de Miravalle, en Isabel la Católica 30, en el centro de la Ciudad de México, a donde vendrá el tapiz después de exhibirse en la capital francesa durante un mes, como parte de una itinerancia que tocará numerosas ciudades de diversos países, de acuerdo con el anuncio de Francois Croquette, embajador de Amnistía Internacional para los Derechos Humanos y la Memoria de la Shoah, y Bill Shipsey, fundador de Art for Amnesty.

Buen año de Gregorio Luke

En el 2019 Gregorio Luke tuvo una intensa actividad y no pocos éxitos. Impartió medio centenar de conferencias, la mayoría de ellas en Estados Unidos; curó cuatro exposiciones y fue jurado de la Bienal de Florencia donde habló sobre Leonardo da Vinci ante 500 artistas llegados de todo el mundo. Celebró también el sexagésimo aniversario de la coreografía Huapango, obra de su madre, la inolvidable Gloria Contreras. Algo peculiar fue que la Asociación de Maestros Bilingües de California lo invitara a dictar una conferencia con el título Cómo dar conferencias, en la que agradeció el aporte de los intelectuales sudamericanos que salieron de sus países obligados por las dictaduras en los años 70. Gregorio quisiera repetir en México el ciclo de tres conferencias que ofreció en San Pedro, California, sobre Alfonso Cuarón, Alejandro González Iñárritu y Guillermo del Toro. Memorable fue la charla sobre Siqueiros en el Cyprus College cuyo auditorio, obra de Sergio Ocadiz Moctezuma, parece a la distancia una roca con relieves. “Es la primera vez que doy una conferencia dentro de una obra de arte”, comentó el mexicano. En fin, que da gusto saber que otro paisano nuestro, Gregorio Luke, tiene éxito en el extranjero.