EL-SUR

Miércoles 24 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

LA POLÍTICA ES ASÍ

Echeverría y el Plan Acapulco

Ángel Aguirre Rivero

Marzo 05, 2021

LA POLÍTICA ES ASÍ

 

Urbanizar una ciudad como Acapulco, en permanente crecimiento, preservar su competitividad turística y resolver los problemas del desarrollo, ha sido, es y será, un proceso que exige importantes inversiones públicas y privadas.
Por eso me parece importante realizar una mirada retrospectiva a una etapa importante urbano del municipio, me refiero al periodo del entonces presidente Luis Echeverría Álvarez y al Plan Acapulco.
Bajo ese proyecto, la ciudad vivió la gran migración desde el anfiteatro de Acapulco a la planicie de Ciudad Renacimiento.
El esfuerzo fue mayúsculo: se estima que se desplazaron cerca de 68 mil habitantes que fueron a poblar inicialmente Renacimiento. (Salgado, C. G. (2000). Políticas Urbanas de Acapulco 1927-1997).
El Plan Acapulco, fue creado con el objeto de atender las necesidades de las colonias populares y disminuir contrastes sociales.
En sus obras se invirtieron mil 457 millones de peso en infraestructura urbana. (Informes presidenciales – Luis Echeverría Álvarez, página 214). Así se realizan trabajos de agua potable, alcantarillado, pavimentación, alumbrado público y de regularización de la propiedad, entre otras, en las colonias populares La Garita, Santa Cruz y Jardín, con una inversión de 230 millones de pesos.
También se construyó la Unidad Deportiva de Acapulco en la colonia Progreso, el Centro de Desarrollo de la Comunidad de La Laja y se llevan a cabo trabajos de regeneración de calles y plazas en otras zonas del puerto
El Plan Acapulco consta de ocho acciones, cuyas metas siguen vigentes, y bien podrían servir de referencia a quienes pretenden competir por la alcaldía de este bello municipio. De ellas, voy a retomar dos aspectos que me parecen importantes:
Tras el paso del meteoro Pauline, Acapulco sufrió un doloroso revés que mostró el retroceso que hubo en las décadas siguientes, con la llegada de asentamientos irregulares con familias viviendo en zonas cercanas a los arroyos y barrancas con los resultados que todos conocemos.
También es cierto que no se cumplió el propósito del Plan en materia del campo: “Estimular el desarrollo industrial y agropecuario de áreas aledañas que provean de insumos necesarios a la demanda turística y de servicios, así como al futuro crecimiento del puerto”. Tampoco se ha logrado resolver el problema de la contaminación de sus aguas.
Como legislador y como gobernador, siempre he estado al tanto para resolver diversas problemáticas de la ciudad, con acciones como la regularización y entrega de 50 mil escrituras en el parque El Veladero; el nuevo acceso a Ciudad Renacimiento; la construcción del rastro TIF y la ampliación de la vía Mozimba-Pie de la Cuesta.
Y desde luego la gestión del Acabús, que mejoró la infraestructura de vialidades y modernizó el transporte público; el sistema de agua potable Chapultepec; la Orquesta Filarmónica de Acapulco y orquesta infantil de Ciudad Renacimiento; la orquesta infantil Azteca-Guerrero; la Unidad Deportiva “Jorge Campos”; el Polideportivo CICI Acapulco Renacimiento, la remodelación de la Unidad Deportiva Vicente Suárez, así como El Parque Papagayo con sus fuentes danzarinas.
Así como la gestión del Macrotúnel, la remodelación de gran parte del Mercado Central; la ampliación y rehabilitación de la costera Miguel Alemán en la zona del Acapulco Tradicional; la adquisición de la Casa de los Cuatro Vientos en Caleta, donde vivió algunos años Diego Rivera, por citar algunas obras que me vienen a la memoria.
Fueron muchas las obras que hicimos para mi amado Acapulco, lo menciono con orgullo, y sin egoísmo; porque sé que la grandeza de esta bella ciudad es producto del esfuerzo de muchos hombres y mujeres.
Los retos persisten, a mi generación y las siguientes nos corresponde resolverlos. Y como lo he dicho en diversas ocasiones, con cargo o sin cargo público o político: seré un permanente gestor para cuidar, renovar y hacer crecer a esta hermosa ciudad.

Del anecdotario

Hace unos días, conversando con mi estimado compadre Sabdí Bautista, quien fue alcalde de Azoyú (por los años 80) y luego diputado local por ese distrito, me hizo recordar un pasaje que me causó mucha risa. Allá por los inicios de un grupo musical originario de Huehuetán, Guerrero, denominado Los Magallones, que llegaron a ser muy famosos con su Cuararé.
Moringo su hermano, quien siempre fue muy entusiasta, decidió llevarlos a la Ciudad de México para que grabaran su primer disco.
Fueron hospedados en una casa que poseía la familia Bautista en la colonia Moctezuma, donde permanecieron cerca de dos meses.
Y pues con la confianza que sentían, le pidieron de inmediato a Sabdí que les invitara unas cervezas porque tenían que ensayar.
Lo que no le agradó es que a las pocas horas la sala de la casa estaba invadida de escupitajos, por lo que tuvo que cubrir todo el piso a base de papel periódico.
A los pocos días, Los Magallones pidieron a su anfitrión un deseo: “Oye Sabdí, llévanos a la mejor cantina de México, donde dicen que llegan muchos artistas.
–¿Cuál será? –dijo Sabdí…
–Una que dicen que en ese lugar Pancho Villa soltó un balazo al techo.
–¡Ahhh! ya sé cuál es, contestó el anfitrión…
Se trata de la cantina La Ópera, que fue fundada desde la época de Porfirio Díaz. Y pues no hubo otra más que complacerlos
Sabdí sólo les hizo una advertencia: “Nomás no vayan a andar escupiendo por todos lados, porque nos corren… Y para eso están los baños.
Al poco tiempo salió a la luz su primer disco, que se dedicaron a vender en la Costa Chica, en sus morralitas que invariablemente les acompañaban.
Su fama creció como la espuma y recibieron la invitación para participar en el programa Siempre en Domingo, que conducía el famoso locutor Raúl Velasco, con quien años después tuve una relación muy cordial cuando convenimos impulsar el famoso Festival Acapulco.
–Amigos, sin más preámbulos, presentamos a ustedes a los autores del famoso Cuararé, Los Hermanos Magallón de la Costa Chica de Guerrero.
Después de interpretar el contagioso Cuararé, Raul Velasco se acercó a entrevistar a Nacho Magallón, quien era el líder del grupo.
–Y díganos Nacho: ¿qué significa Cuararé?…
–Pues Cuararé pues… Contestó Nacho.
–Pero Nacho, supongo que algún significado tiene –insistió el conductor.
–Pues la verdad sepa la v…
Y de inmediato la consabida frase: Aún hay más… y Raúl Velasco mandó a un corte.
La vida es así…