EL-SUR

Martes 08 de Octubre de 2024

Guerrero, México

Opinión

Emmanuel Macron frente al riesgo Marine Le Pen

Gaspard Estrada

Marzo 01, 2017

La campaña presidencial francesa está sorprendiendo a todo el mundo. Hasta finales del año pasado, tanto las encuestas de opinión como la percepción en la clase política francesa daban por hecho que el vencedor de las primarias del partido Los Republicanos, François Fillon, sería el próximo presidente de Francia. Sin embargo, a poco menos de dos meses de los comicios, lo que parecía ser una elección imperdible para el candidato de la derecha republicana se está transformando en un calvario para éste. Una serie de encuestas de opinión, publicadas durante el pasado fin de semana, encendieron la alerta roja en el cuartel general del ex primer ministro de Nicolás Sarkozy. Por primera vez desde el principio de la campaña, Emmanuel Macron, el popular ex ministro de Economía de François Hollande, se instaló en el segundo lugar, a menos de 3% de Marine Le Pen, la candidata del partido de extrema derecha Frente Nacional. Esta última, por su lado, tiene un promedio de 25% en las encuestas.
Conforme la campaña avanza, la apuesta de Emmanuel Macron parece tomar forma. Para los estrategas del ex ministro de François Hollande, el sistema político francés, definido como un sistema “bipartidista multipolarizado” ya no está en condiciones de dar las respuestas políticas y económicas que la población demanda. Desde hace más de treinta años, los sucesivos gobiernos, de izquierda como de derecha, han acumulado las promesas no cumplidas, de la misma manera que los déficit presupuestales. Las reformas institucionales de principios del año 2000, que tenían como objetivo modernizar a la Quinta República, no tuvieron el impacto esperado. Por el contrario, los gobiernos de Nicolás Sarkozy y de François Hollande decepcionaron a la gran mayoría de los franceses. Es en base a esta constatación que los estrategas del joven político de 39 años nacido en la ciudad de Amiens decidieron construir su eje de campaña electoral.
Paradójicamente, su juventud, en vez de restarle votos, ayuda a posicionarlo como un actor de cambio, a pesar de haber sido durante dos años el principal asesor económico del presidente François Hollande, y más tarde su ministro de Economía. El hecho que este último haya decidido no ser candidato a la reelección también le da un apoyo político substancial, en el sentido que es mucho más difícil para el candidato de la derecha republicana, François Fillon, poner de relieve en la campaña el legado del actual gobierno. Sin embargo, para este último, el principal problema hoy en día consiste en poder expresarse en los medios sobre su programa electoral, después de los escándalos de corrupción en los que se ha visto involucrado. En efecto, el periódico satírico semanal Le Canard Enchaîné divulgó, a mediados de enero, que la esposa del ex primer ministro de Nicolas Sarkozy habría presuntamente sido contratada por su marido durante décadas cuando este fue diputado y senador, sin que trabajara por ello. En total, la justicia (que ya inició una investigación judicial al respecto) estima que la pareja Fillon ganó casi un millón de euros de manera irregular, ya sea a través de este esquema, o bien a través de otra plaza de aviadora en una empresa editorial de un amigo de François Fillon, el empresario Marc Ladreit de Lacharrière. La revelación de estos actos dinamitó buena parte de la estrategia de campaña de François Fillon, que hasta ese momento se vanagloriaba de su supuesta honestidad como persona pública para pedir más sacrificios a los franceses, en particular a los que viven gracias a los mecanismos de seguridad social. Por ende, desde ese momento, Emmanuel Macron ha conseguido capitalizar su posicionamiento político para aumentar su caudal electoral. Si bien esta estrategia está dando resultados, no podemos soslayar el hecho de que esta nueva situación política también favorece a Marine Le Pen, que se ha transformado en la principal rival del ex ministro de Economía. Esperemos que en esta ocasión, las encuestas no se equivoquen, y que esta última no sea electa presidenta de Francia.

* Director ejecutivo del Observatorio Político de América Latina y el Caribe (OPALC), con sede en París.

Twitter: @Gaspard_Estrada