EL-SUR

Jueves 25 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

Es de sabios corregir y rectificar

Marcos Matias Alonso

Diciembre 20, 2018

Ayer, en el Estado de Hidalgo, el presidente de México reconoció que se cometió un error en la presentación del Presupuesto de Egresos de la Federación del 2019 (PEF/19) y que no habrá una reducción en el dinero público destinado a las universidades públicas del país.
Andrés Manuel López Obrador, afirmó: “Yo hice un compromiso público de que no se iba a reducir el presupuesto de las universidades, y se presentó un presupuesto en donde, en efecto, hay una disminución de 4, de 5 mil millones de pesos al presupuesto de las universidades públicas. Aquí sostengo que se va a reparar ese error y se le va a entregar a esas universidades lo que les corresponde”.
Es digno reconocer la voluntad política del Presidente de la República de reparar el error y corregir el PEF/19, para asignar un presupuesto digno a las universidades públicas del país.
Las autoridades de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) que diseñaron el PEF/19, han cometido otros errores que es necesario corregir. Señalo la reducción del presupuesto indígena que urge rectificar.
El 15 de diciembre del 2018, el Ejecutivo federal presentó la Iniciativa de Decreto por el que se expide la Ley de Ingresos y el Proyecto de Presupuesto de Egresos para el ejercicio fiscal 2019. En el Anexo 10 sobre la Erogaciones para el Desarrollo Integral de los Pueblos y Comunidades Indígenas, pusieron a consideración el siguiente proyecto de presupuesto del Ramo 47 sobre las “Entidades no Sectorizadas”.
Sobre el cuadro anterior, comento las siguientes consideraciones:
Primero: Por normatividad fiscal, hasta el 2018, es en el Ramo 21 de las “Entidades no Sectorizadas” donde la SHCP asignaba presupuesto a la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI).
Segundo: Con base al Diario Oficial de la Federación (DOF) del 4 de diciembre del 2018, se expidió la Ley que creó el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) y se abrogó la Ley de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI).
Tercero: En el PEF/19, correspondiente al Ramo 21 de las “Entidades no Sectorizadas”, la SHCP diseñó siete partidas presupuestales sobre una institución que dejó de existir desde principios de este mes. Las siete partidas presupuestales que señalo en el cuadro 1, son las mismas partidas presupuestales que se programaron en el 2018 y en años anteriores.
Cuarto: el INPI, para cumplir con sus 29 artículos y sus más de 40 objetivos, atribuciones y funciones que se indican en el artículo 4, requiere de nuevas partidas presupuestales para dar respuesta a las legítimas demandas de los pueblos indígenas de México. Nuevas partidas y mayor asignación presupuestal, es la demanda indígena nacional.
Quinto: en la conferencia de prensa del 18 de diciembre, diversos representantes de los pueblos indígenas de México exigieron tomar como base el presupuesto máximo que la CDI alcanzó en el 2015, que fue de 12 mil millones de pesos, presupuestados en el Ramo 21 de las “Entidades no Sectorizadas” del Anexo 10 de la SHCP.
Sexto: la consideración anterior es lo que urge corregir. Es apremiante hacer los esfuerzos necesarios para evitar la reducción del presupuesto a los pueblos indígenas y fortalecer su institucionalidad. Así como se rectificó en la asignación presupuestal a las universidades del país, es altamente necesario rectificar en el presupuesto a los pueblos indígenas y afromexicanos.
Séptimo: de los cerca de 6 mil millones que la SHCP programó para el INPI en el PEF/19, a los 12 mil millones de pesos alcanzados en el máximo histórico del presupuesto de la CDI en el 2015, hay un boquete financiero de 6 mil millones de pesos. De este tamaño es el retroceso financiero.
Octavo: secundo la propuesta que ayer hicieron diversos representantes indígenas del país: “…resarcir el presupuesto destinado al Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, de acuerdo a lo ejercido en el año 2015, por la cantidad de 12 mil, 129 millones, 311 mil, 599 pesos y asimismo, solicitar la instalación de una Mesa de Trabajo con la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, para revisar las reasignaciones en incrementos en el presupuesto indígena”.
Noveno: recordar que en los 100 compromisos que el Presidente de la República anunció el 1° de diciembre pasado en el Zócalo de la Ciudad de México, asumió lo siguiente: “En primer lugar, vamos a darle atención especial a los pueblos indígenas de México; es una ignominia que nuestros pueblos originarios vivan desde hace siglos bajo la opresión y el racismo, con la pobreza y marginación a cuestas. Todos los programas del gobierno tendrán como población preferente a los pueblos indígenas de las diversas culturas del país”.
Décimo: es alentador que todos los programas de gobierno tengan prioridad a los pueblos indígenas, pero también es recomendable fortalecer el presupuesto directo para los pueblos indígenas a través del INPI.
Mantengo optimismo para que las instancias correspondientes hagan las revisiones necesarias y diseñen urgentemente nuevas partidas y nuevos montos presupuestales para una incipiente institución que es inaplazable fortalecerla. Es de sabios corregir y rectificar. El INPI, los pueblos indígenas y afromexicanos lo merecen.
En siglos, los pueblos indígenas han sobrevivido con austeridad, pero no es justo seguir apretando en la parte más débil de la sociedad mexicana.