EL-SUR

Lunes 22 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

Hoy como ayer en Guerrero, federalismo o centralismo

Arturo Martínez Núñez

Diciembre 22, 2020

La Revolución de Ayutla, liderada por el insigne guerrerense Juan Álvarez fue, desde mi punto de vista, el momento definitorio de México como nación independiente.
A lo largo del siglo XIX, tras la consumación en 1821 de la independencia nacional, proceso iniciado en Iguala y del que en el próximo año se conmemorará el bicentenario, dio paso a una nación independiente pero sin proyecto lo que provocó que gran parte del siglo XIX, sobre todo la primera mitad, se ocupara en la definición del proyecto de nación que se necesitaba.
La lucha entre conservadores y liberales, entre distintas logias masónicas y entre diferentes caudillos regionales, propició que Antonio López de Santa Anna fuera y viniera del poder abrazando todo tipo de causas en un pragmatismo que nos recuerda al PRI que ha sido a veces de izquierda, a veces de centro y en su última etapa, férreos neoliberales.
Con el pretexto de apaciguar una revuelta en la Costa Chica, Santa Anna envió soldados hacia la provincia del sur, ante lo cual Juan Álvarez aceleró la promulgación del Plan de Ayutla en donde se planteaba la república federal como forma de gobierno, regresando a los principios liberales de la Constitución de Apatzingán de 1824 inspirada a su vez en los Sentimientos de la Nación que promulgara Morelos en Chilpancingo.
Santa Anna, aficionado a encabezar él mismo los ejércitos, decidió venir personalmente a encabezar lo que el creía sería un día de campo para colgarse una medalla más en su larga colección de méritos de oropel. Sin embargo, lo que Santa Anna encontró en Guerrero fue un pueblo digno, fuerte, combativo y encabezado por un gran líder. En Guerrero, los intentos centralistas de Santa Anna simplemente no pasaron.
En momentos de definiciones políticas de fundamental relevancia, es importante regresar a revisar la historia para no volver a cometer los mismos errores.
Las decisiones políticas importantes las debe de tomar el pueblo y únicamente el pueblo. Es lo que nos enseñó Juárez, y es lo que nos repite a cada momento nuestro líder Andrés Manuel López Obrador: con el pueblo todo, sin el pueblo nada.
En los momentos de las definiciones es necesario hacer a un lado las aspiraciones personales, la cercanía personal que se pudiera tener con determinado aspirante y tenemos que escuchar la voz del pueblo.
En Guerrero la voz del pueblo es fuerte, sonora y contundente. En Guerrero hay una corriente popular que grita contra el intento de imposición centralista.
En Guerrero, cuna de Álvarez, lugar desde donde se encendió la llama de la Revolución federalista triunfante, hacemos un respetuoso pero enérgico llamado a los dirigentes de nuestro partido para que la voz del pueblo se escuche, se atienda, pero por sobre todas las cosas, se respete.

@AMartineznunez