El pasado 7 de marzo el Centro Nacional de Huracanes (CNH) del Servicio Meteorológico Nacional y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos presentó su reporte sobre el huracán Otis. Los autores son Brad y Amanda Reinhart y puede ser consultado en la página electrónica: https://www.nhc.noaa.gov/data/tcr/EP182023_Otis.pdf
Con base en este reporte se realiza una síntesis de las partes, en especial las relacionadas al desarrollo del fenómeno natural, que a juicio de quien escribe son las más importantes. Asimismo, para su contraste se utiliza el reporte del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) suscrito por B. Peláez, que está disponible en la página electrónica: https://smn.conagua.gob.mx/tools/DATA/Ciclones%20Tropicales/Ciclones/2023-Otis%20.pdf

Origen del Otis

1). De acuerdo con el SMN a partir del 14 de octubre se dio seguimiento a una zona de inestabilidad con 20 por ciento de probabilidad para desarrollo ciclónico en 7 días localizada al sureste de las costas de Chiapas. Esta zona se desplazó hacia el norte, incrementando su probabilidad para desarrollo ciclónico gradualmente durante los subsecuentes días.
2. El 22 de octubre a las 9 horas se formó la “depresión tropical Dieciocho-E” al sur de las costas de Oaxaca. Presentaba vientos máximos sostenidos de 55 km/h, rachas de 75 km/h y desplazamiento hacia el norte a 4 km/h.
3. Ese mismo día, a las 15 horas, seis horas después, se formó la “tormenta tropical Otis”, que mostraba mediante las imágenes satelitales, una zona de convección profunda al oeste de su centro. Este sistema alcanzó vientos máximos sostenidos de 65 km/h, rachas de 85 km/h.
El CNH indica, que a pesar de que las temperaturas de la superficie del mar (TSM) superaron los 28-29o C el 23 de octubre, inicialmente sólo se produjo un modesto fortalecimiento.
Para las 3 horas del día 23 de octubre, la tormenta tropical Otis presentaba vientos máximos sostenidos de 75 km/h, rachas de 95 km/h y desplazamiento hacia el norte.
4. De acuerdo con el CNH, durante la noche del 23 al 24 de octubre, Otis se acercaba a las TSM anómalamente cálidas (30-31º C; alrededor de 1-2º C por encima de lo normal para octubre) frente a la costa del sur de México. Estas condiciones alimentaron un notable período de intensificación rápida, que comenzó en la madrugada del 24 de octubre. En tanto el CNH estima que Otis se fortaleció hasta convertirse en un huracán de 120 km/h a las 6 horas del 24 de octubre, mientras se centraba a unos 265 km al sur-sureste de Acapulco. El Servicio Meteorológico Nacional mantuvo a Otis como tormenta tropical hasta las 12 horas del día 24 de octubre, seis horas después, cuando se intensificó a “huracán de categoría 1” en la escala Saffir-Simpson, con vientos máximos sostenidos de 130 km/h, rachas de 155 km/h y desplazamiento hacia el nor-noroeste a 11 km/h.
Se debe indicar que la escala Saffir-Simpson, los huracanes se clasifican en 5 categorías en términos de la máxima velocidad sostenida del viento: Categoría 1 (119-153 km/h), Categoría 2 (154-177 km/h), Categoría 3 (178 a 208 km/h), Categoría 4 (209 a 251 km/h) y Categoría 5 (252 km/h o mayores).
5. Una hora después, el Servicio Meteorológico Nacional comunica que a las 13 horas del día 24, Otis evolucionó a “huracán de categoría 2” cuyo centro se localizó a 170 km al suroeste de Punta Maldonado, y a 220 km al sur-sureste de Acapulco, con vientos máximos sostenidos de 175 km/h, rachas de 215 km/h y desplazamiento hacia el nor-noroeste a 11 km/h.
6. Dos horas después, a las 15 horas del mismo día, el sistema se había intensificado rápidamente a “huracán de categoría 3”, cuando su centro se ubicaba a 150 km al suroeste de Punta Maldonado, y a 185 km al sur-sureste de Acapulco.
7. Tres horas después, a las 18 horas, Otis alcanzó la fuerza de “huracán de categoría 4”. Su centro se localizaba a 130 km al oeste-suroeste de Punta Maldonado, y a 135 km al sur-sureste de Acapulco, con vientos máximos sostenidos de 230 km/h, rachas de 280 km/h y desplazamiento hacia el nor-noroeste a 13 km/h.
8. Las estimaciones satelitales del CNH indican que Otis alcanzó una intensidad máxima estimada de 268 km/h a las 21 horas. del 24 de octubre, con una presión mínima de 922 milibares, señal clave del ciclón, cuando estaba centrado a sólo 80 km al sur-sureste de Acapulco. Así, el SMN determinó que Otis a esa misma hora (21) se había fortalecido a un huracán de “categoría 5” en la escala Saffir-Simpson, localizado a 90 km al sur-sureste de Acapulco, y a 125 km al oeste-suroeste de Punta Maldonado, con vientos máximos sostenidos de 260 km/h, rachas de 315 km/h y desplazamiento hacia el nor-noroeste a 15 km/h. Se mantuvo una muy amplia zona de prevención y vigilancia por efectos de huracán desde Punta Maldonado hasta Zihuatanejo; y zona de prevención y vigilancia por efectos de tormenta tropical desde Lagunas de Chacahua, Oaxaca., hasta Punta Maldonado. Es decir, en sólo 9 horas, el huracán Otis pasó de ser un huracán categoría 1 a uno categoría 5.
9. Se estima que Otis tocó tierra en Acapulco alrededor de las 00:45 horas del 25 de octubre como un huracán de categoría 5 de 259 km/h. Una vez tierra adentro, se produjo un rápido debilitamiento cuando Otis se encontró con el terreno accidentado del sur de México. El ciclón se debilitó a tormenta tropical a las 12 horas del 25 de octubre y se disipó poco después.

Crítica al pronóstico

El CNH concluye que los errores de pronóstico oficial de trayectoria e intensidad fueron mucho mayores que los errores oficiales promedio para el período de 5 años anterior en todos los plazos de pronóstico. La intensificación rápida extrema de Otis no fue anticipada por los pronosticadores del centro. De hecho, se considera que las dificultades del modelaje para anticipar la intensificación rápida histórica de Otis serán el tema de futuras investigaciones.
La falta de datos observacionales sobre el Océano Pacífico oriental puede dificultar la predicción de la intensidad en casos extremos de intensificación rápida, especialmente en el caso de ciclones tropicales como Otis. Si bien los datos satelitales pueden ayudar a evaluar los cambios estructurales de un ciclón tropical, estas imágenes sólo proporcionan a los meteorólogos instantáneas esporádicas y retrasadas de la tormenta. Los conjuntos de datos in situ recopilados por el avión cazador de huracanes fueron cruciales para que los meteorólogos reconocieran que ninguno de los modelos tenía una representación precisa de la intensidad y estructura de Otis. Desafortunadamente, la intensificación rápida de Otis estaba en marcha cuando se recibieron estos datos, y el huracán continuó fortaleciéndose a un ritmo histórico hasta que tocó tierra menos de 12 horas después.
El Centro Nacional de Huracanes indica que la intensidad máxima de 268 km/h de Otis a las 21 horas del 24 de octubre marcó el final de un período histórico de intensificación rápida en el que Otis se fortaleció en un estimado de 166 km/h en solo 21 h (Se estima que a las 00:00 horas del 24 de octubre la velocidad del viento era de 102 km/h). Esta tasa de fortalecimiento sólo es superada en los registros de la cuenca del Pacífico oriental por el huracán Patricia, que se fortaleció en 194 km/h en un período de 24 horas.
Los datos de viento en un vuelo de reconocimiento del Centro Nacional de Huracanes al centro del sistema del huracán indican que Otis probablemente alcanzó una intensidad de huracán mayor (185 km/h) a las 12 horas del 24 de octubre. Esto debido a que el propio Centro señala, que no se disponían de datos de reconocimiento en el momento estimado de la intensidad máxima de Otis. Así, el propio centro concluye que los datos de la aeronave de ese mismo día indicaron que las estimaciones convencionales objetivas y subjetivas de los satélites a última hora del 24 de octubre subestimaron significativamente la verdadera intensidad de Otis debido a las limitaciones de las técnicas de los modelos. Enfatizan, que otros conjuntos de datos respaldan la evaluación de que Otis fue consistentemente más fuerte de lo indicado por las estimaciones satelitales convencionales. Un conjunto de datos que el centro presenta refuerza la noción de que las estimaciones satelitales convencionales estaban rezagadas con respecto al fortalecimiento de los vientos de Otis durante el período extremo de intensificación rápida.
El pequeño tamaño de Otis, el gran ángulo de visión cenital del satélite tanto desde el GOES-Este como desde el GOES-Oeste alrededor del momento de tocar tierra y las limitadas observaciones de superficie en la zona de aterrizaje complican el análisis del lugar exacto de la llegada a tierra y la estimación de la intensidad de la recalada. Las imágenes satelitales indican que se produjo un enfriamiento y llenado del ojo de Otis poco antes de que tocara tierra en Acapulco. Sobre la base de estos cambios en la presentación del satélite, parece razonable suponer que se produjo un ligero debilitamiento antes de tocar tierra. Por lo tanto, la intensidad estimada de la llegada a tierra se establece en 259 km/h. Esta intensidad convierte a Otis de categoría 5 en el huracán más fuerte registrado en la cuenca del Pacífico oriental desde que en 1988 el CNH asumió la responsabilidad operativa en esa área.
Otis trajo grandes vientos huracanados al área metropolitana de Acapulco, cerca de donde el centro tocó tierra en el estado de Guerrero. De acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes la observación de vientos más fuertes fue registrada por una estación meteorológica operada por el Servicio de Mareas de México en la Administración Portuaria Integral de Acapulco (API). Esta estación, ubicada en el lado noroeste de la bahía de Acapulco registró un viento sostenido de 188 km/h y una ráfaga de 329 km/h a las 12:40 horas del 25 de octubre. Este sitio también registró una presión mínima de 963.5 milibares a las 12:50 horas de ese día. Una estación meteorológica automatizada de la Armada de México en Isla Roqueta (IRQG3) informó de un viento máximo sostenido de 131 km/h a las 12:45 horas de ese día y una ráfaga máxima de 215 km/h, junto con una presión mínima a nivel del mar de 957.4 milibares. Por otra parte, un sitio de observación elevado (303 m) tierra adentro en el Parque Nacional El Veladero reportó una ráfaga de 176 km/h a las 01:20 horas de ese día.

Lluvias e inundaciones

Otis produjo fuertes lluvias en Guerrero. De acuerdo con datos del SMN gran parte del estado recibió de ~ 50 a 100 milímetros de lluvia, con cantidades localmente más altas cerca y al este del lugar de la llegada a tierra del 24 al 25 de octubre. Se midió una precipitación acumulada del 24 al 25 de octubre de 266.0 milímetros de lluvia en Acapulco. Por otra parte, cayeron 249.4 milímetros en El Veladero, y 220.0 milímetros en Tierra Colorada. Estas fuertes lluvias provocaron inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra en Guerrero, incluso en Acapulco y Coyuca de Benítez.

Marejada ciclónica

El huracán Otis produjo una marejada ciclónica catastrófica a lo largo de la costa de Guerrero, cerca y al este del lugar donde tocó tierra. Las imágenes aéreas muestran inundaciones devastadoras por marejadas ciclónicas en las comunidades costeras alrededor de Acapulco, y se observaron daños extensos en las marinas en la bahía de Acapulco con botes apilados a lo largo de la costa. Sin embargo, se desconoce la altura máxima de la inundación por marejada ciclónica. Una estación de mareas cercana en la bahía de Acapulco, operada por el Servicio de Mareas de México, registró datos incompletos. Por lo tanto, no se conocen mediciones de estaciones de marea que hayan capturado el pico de marejada ciclónica.
En conclusión, los modelos de pronóstico fallaron o por lo menos no fueron tan robustos como se suponía, por lo que se debe mejorar la calidad de los pronósticos de estos fenómenos. Se requiere fortalecer con urgencia las capacidades del SMN y de las demás instancias relacionadas con los sistemas de vigilancia, monitoreo, alerta y los relacionados a la protección civil para que un fenómeno como Otis, no nos tome por sorpresa.